EL GUARDIA | Joel Pimentel

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Me llevan hacia el despacho de la directora, pican la puerta y se escucha un adelante. Abren la puerta y me dejan pasar para luego retirarse. Ahí está Joel con la cabeza bajada, pero al oír la puerta la sube y su mirada cambia a asombro y miedo cuando me ve, yo solo le miro con pena y me siento en el sillón de su izquierda mientras noto su mirada seguir mis movimientos.

- No me esperaba esto de ustedes - la directora comienza a hablar y ambos le miramos - Confíe en los dos - suspira - ¿cuánto llevan con su relación?

- No estamos juntos - dice Joel

- No es nada oficial - me apresuro a decir

- Como comprenderán no les creo dadas las circunstancias. Les pillaron en una cita - ninguno de los dos hablábamos - Cambiemos la pregunta ¿cuánto llevan saliendo, conociéndose? ¿Podría decir... besándose?

- Varios meses - dice él - poco después del accidente. Cuando nos mandaron a mi apartamento

- ¿Ahí comenzó todo? - asentimos - Sé que si no tomo medido todo sucederá igual, no se dejarán de ver a escondidas, así que yo junto al director, tu papá - dijo dirigiéndose a Joel - Hemos decidido que T/N será expulsada y como consecuencia volverá a Miami con su familia

- ¡¿Qué!? - Exclamamos ambos ante tal noticia

- Mamá, no puedes hacer eso

- ¡Claro que puedo! Hijo, confíe en ti. Me dijiste que no había nada entre ustedes dos y te creí. Dejé de escuchar a Jessica porque a diferencia de ti te hice caso, no como tú a mí y pensé que solo seguía resentida, pero llevo varias semanas dudando al verles después de la cena, como tú te disculpas y ella se levanta para irse

- No nos vamos juntos - murmuro y sus miradas se posan ante mi

- No me mientan más. Hoy les seguí y los vi en el balcón. Estaban bastante cariñosos y entonces vi como se besaban, luego vi como comenzaban a acercarse y salí de ahí antes de que me vieran, iba a ir a la habitación de mi hijo para decirle que cortaran lo que tenían, pero me paró el guardia diciendo que no estabas en tu habitación. Les ordené que los buscaran, ya que supuse que seguirían juntos y yo vine aquí para llamar a tus papás, con los que acordamos que vendrán mañana a primera hora para llevarte de vuelta a casa.

- No puedes llevártela - suplica Joel y eso hace que una lágrima corra por mi mejilla mientras bajo la mirada - si se va yo también me iré

- Claro que no. Tú te quedas a cumplir con tus obligaciones - dice firme

- Ya no me importan mis obligaciones, me importa ella. A Jessica no la mandaste de vuelta a casa, la dejaste aquí. ¿Por qué a ella si?

- Jessica me ha demostrado un cambio. No me importaría que estuvieran juntos una vez saliera de aquí, al ser mayor de edad. Te recuerdo que para eso faltan pocos meses

- No me importa cuanto le falte para salir, no estaré con ella - Se nota que enojado y eso me asusta porque Joel enojado puede llegar a decir cosas que en realidad no siente y podría acabar llevándole a problemas más graves. Algo que no quiero que le suceda - Quiero a T/N mamá. No me van a separar de ella.

- Solo es un capricho y estoy seguro de que ella solo jugó contigo - me mira y ahí soy yo quien se enoja. La miro y noto como Joel va a hablar, pero alzo mi mano haciendo que callara

- Permíteme decirle, señora, que los sentimientos que siento hacia su hijo son reales - digo con la mirada fija en ella y notando la de ambos sobre mí - Podré ser muchas cosas, pero nunca jugaría con la gente que me importa y él lo hace, así que antes de suponer lo que puedo llegar a sentir o pensar debería darse la oportunidad de conocerme realmente y vería que la imagen que tiene de mí no es la correcta - ella nos mira a ambos

- Vendrán a buscarla a las diez de la mañana. Tenga sus cosas listas para entonces

- Mamá - replica Joel

- No hay más que hablar - alza la voz - ahora márchense y hasta la hora de su despedida un guardia le acompañará en todo momento y estará alerta para que no se escapen a verse durante la noche, así que no lo intenten

Ambos suspiramos y nos levantamos rendidos, nos acercamos a la puerta y salimos. El guardia mencionado por la directora está esperándonos y cuando nos ve salir nos mira

- Señorita, debe descansar. Vayamos a su habitación - me dice, yo me giro a ver a Joel quien me mira con los ojos tristes.

Me acercó a él y le abrazo, acto que no duda en responder. El guardia carraspea su garganta y nos separamos, yo para irme hacia mi cuarto y él al suyo. Camino hasta llegar a ella y me paro en la puerta al escuchar la voz del chico que me acompaña.

- Si necesita ir al baño o alguna cosa estaré aquí. No me permiten moverme - asiento y me giro para entrar en mi cuarto, pero su voz vuelve a detenerme - señorita Miller. Lo lamento por ambos - hago una mueca de disgusto y finalmente entro.

Ahí se hallan mis amigas realmente nerviosas al verme de vuelta tan temprano.

- ¿Qué sucedió? No logramos distraerlos esta noche y descubrieron la almohada debajo tus sabanas - Dice Hannah apresurada

- Me voy mañana a las diez - digo bajando la mirada, apenada

- No puede ser - dice Nina - ¿qué pasó?

- Nos pillaron. La directora nos siguió después de la cena y nos vio besarnos. Ha llamado a mis papás y me llevan de vuelta a casa

Todas se pusieron a exclamar entre ellas y Sarah se acercó a mi

- No estés mal. Puede que los separen, pero no por eso Joel dejará de quererte ni luchar por el amor que se tienen ambos. Volverán a encontrarse, estoy segura, y entonces podrán estar juntos - la abracé y las demás se unieron al abrazo.

 Les digo que estoy cansada y que quiero dormir, así que me cambio y entro en la cama.

No puedo evitar llorar. Desde que llegué aquí deseaba salir, escapar y volver a mi casa con Emily, las criadas, la cuales habían sido mi soporte cuando me quedaba sola y eran como mi familia, incluso quería ver a Christopher. Ahora todo era diferente. Me he enamorado de mister europeo y odio la idea de separarme de él. Por más que le diga que lo quiero es mentira, yo no le quiero, le amo y no quiero estar lejos de él.