Suelto un largo suspiro y me siento en el banco que queda un paso a la derecha. Apoyo mi teléfono en mis piernas y me cruzo de brazos.
¿Qué voy a hacer contigo?.- Pienso en voz alta.
Me levanto del banco y doy media vuelta, hasta mi casa de nuevo. Intento no tener cara de mierda cuando entro y fingir como si de verdad hubiera quedado con mis amigas y no haberme vuelto a casa por otra razón como Niall.
-¿Hay mucha gente por la calle?.- Mi madre me mira desde el sofá.
-No.- Contesto rápido para irme a mi habitación.
-¿Y qué les ha pasado a tus amigas?.- Cambia el canal de la TV.
-Estaban cansadas.- Me quito el abrigo.- No pasa nada, otro día saldremos.- Subo el primer escalón.
-¿Y Niall? ¿Seguis estando juntos?.- Me mira.
-Sí.- Asiento.- Y por mucho que lo odies, no vas a hacer que me separe de él.- Digo por último y subo.
•••••••••••••••••••••••••••••••••••••
-Shhh...-Susurro al teléfono para que se calle.
Me desperezo aún en cama, entre las sábanas calentitas. Me froto el ojo y me coloco mis lentes de vista.
-Me voy a hacer la compra.- Mi madre aparece por mi habitación.- Tu hermana sigue dormida. Si bajas a desayunar no armes ruido.
Solo levanto la mano y el pulgar para darle mi Okey y se va. Alargo la mano, con los ojos aún medio pegados y me ciego al mirar la pantalla.
-Ven a mi casa, mi madre se va.- Le mando un audio.- Que no te vea.
Al segundo me contesta y sí viene a mi casa. A los diez minutos, suena el timbre y me levanto de la cama al fin. Bajo casi volando y abro la puerta. Niall pasa y cierro detrás suya. Me agarra por el cuello y se acerca a darme un beso en los labios.
-No me he lavado los dientes.- Pongo cara de asco.
-Me da igual.- Me da otro beso.
-Vente a la cama.- Agarro su mano y subo.
En cuanto llego, me tiro a la cama y Niall a mi lado.
-¿Vas a contarme qué pasó ayer?.- Lo miro.
-Lo de siempre.- Se encoge de hombros.- Le llevaron una multa a mi madre para que la pagara.
-¿Has vuelto a traficar?.- Pregunto molesta.
-Yo siempre trafico.- Acaricia mi pelo.
-¿Y de cuanto es la multa?.- Suspiro.
-3000 £.- Se encoge de hombros.- La va a pagar mi madre.
-La vas a pagar tú.- Toco con mi índice su pechoz
-Yo no voy a pagarla.- Niega y se ríe.- Que deje de gastarse el dinero en mierdas y que haga algo por mí.
-Tu madre da su vida por tí.- Lo miro.- Pero tú te ciegas a verla siempre de la mala.
-Es mala.- Se encoge de hombres.- No me da pena.
-Es tu madre Niall.- Suspiro.
-Me da igual.- Se rasca la nuca.- En cuanto teng 18 me voy de casa.
-Ojalá.- Apoyo su decisión.- Tu madre va a poder vivir tranquila.
-¿Puedes dejar de estar del lado de mi madre?.- Se molesta.
-La mujer vive aterrada Niall.- Lo miro seria.- Y todo es por tu puta culpa.
-Ella se lo ha buscado.- Se excusa en eso.
-¿No te da vergüenza haber ingresado en el centro de menores por pegarle a tu madre?.- Me cruzo de brazos.
-No.- Dice sin hacer ningún gesto de culpabilidad.
-No tienes corazón, enserio.- Niego mientras suspiro.
-Cállate ya, siempre la misma charla.- Bufa.
-¿Y si no me callo qué?.- Lo miro a los ojos.- ¿También vas a pegarme como haces con todos?
-No....-Parece que mi pregunta lo ha ofendido.- Yo no voy a tocarte ni un pelo. A tí no.- Me abraza.
-Eso dices ahora.- Pongo la cabeza en su pecho.
-Es enserio.- Me abraza fuerte.- Si algún día te tocara, no me lo perdonaría jamás.