Quédate aquí para siempre
— Unas semanas después –
Habíamos pasado una Navidad increíble. A pesar de todo, nuestras vacaciones acabaron por ser perfectas, pasamos fin de año en Nueva York, en Times Square. Actuamos para miles de personas y millones nos veían en la tele y al final acabamos por ver la gran bola bajar. Fue increíble pero por desgracia la Navidad había acabado y con ella nuestras vacaciones. Así que volvimos a Atlanta. Yo debía continuar con mi disco y mis estudios y Justin debía continuar con Believe Tour, aunque por suerte a él aun le quedaba una semana de descanso. Bueno, un descanso relativo, la frase correcta sería una semana de descanso de Belive Tour, no sé si me explico. A pesar de hacer una pequeña pausa en su gira, Justin no paraba, entre ensayar para el tour, ir al estudio y unas cuantas cosas más le costaba sacar tiempo para mí, así que no nos solíamos ver mucho. Pero es normal, le comprendo. Mientras yo, solía pasar los días en el estudio, con Caitlin o con mi hermano. Bueno y cuando podía con Justin.
Caitlin, mi mejor a miga, y Carly, otra de mis mejores amigas, habían venido a casa para pasar el día. Justin estaba ensayando con el Team y yo tenía el día libre, a no ser que Alice me llamase para nuevos planes.
— Y tú _____, ¿con quién irás al baile de final de curso? –me preguntó la chica pelinegra de ojos verdes, Carly.
— Oh vamos, ¿enserio estáis pensando en eso? Queda medio curso. –me dejé caer en la cama, no quería pensar en eso ahora.
— Es el momento más importante de este curso ____. Es nuestro último año. Nos hemos pasado la vida aquí y después de esa noche todo habrá acabado. Cada uno tomará un camino y todos nos separaremos, algunos no nos volveremos a ver más y… -Caitlin intentó captar mi atención por el tema.
— Me muero de ganas por ir, pero ni si quiera sé si podré acabar el curso aquí. –ni si quiera sabía si podría acabar el curso en general.
— Sabes que puedes compaginar perfectamente tu carrera musical con los estudios, lo has hecho hasta ahora. –me animó la pelinegra.
— No es eso. –me removí incómoda en el colchón.
— ¿Justin? –adivinó Cait.
— Insiste en que forme parte del Tour. –suspiré indecisa- y no sé.
— ¿Tu padre? –encertó de pleno Carly.
— Bingo. –me incorporé a la cama nerviosa- sólo queda una semana y todo está preparado y organizado para que vaya con él, absolutamente todo…
— Menos la aprobación de tu padre. –volvió a acabar mi frase la castaña de ojos azules.
— Ajá. –miré apenada a mis amigas- sé que es muy difícil para mi padre. –me levanté de la cama, me ponía de los nervios hablar de este tema- tendré que acabar los estudios de gira, estaré lejos de él y de mi hermano durante meses, cada vez me uniré más a Justin y cada vez me separaré más de ellos y ya perdió a mamá hace unos años y mi ida no ayuda mucho a darle ánimos.
— Es normal melona. –intentó tranquilizarme Cait- yo tampoco quiero que te vayas.
— Ni yo. –se unió a las caras largas Carly.
— No voy a tener una oportunidad igual en la vida. –me convencí a mí misma- además me volvería loca sin ver a Justin.
— No hace falta que lo jures. –rieron mis amigas- pero serían muchas horas al día juntos y durante muchos meses, ¿no tienes miedo?