PROHIBIDO (ADAPTACIÓN) - JULIANTINA

CAPÍTULO 9 - CÁMARA SECRETA

Valentina's POV

Me golpeo el brazo al caer mal en el pequeño balconcillo, Juliana me da una media sonrisa.

Entramos por una puerta pequeña al interior de un salón que no conocía, luego salimos al pasillo y en puntillas corremos hasta otra puerta para que las cámaras no nos graben por mucho tiempo. Ahí dentro hay una escalera que baja hasta otro salón en el que hay una puertecita atrás de un estante, subimos por una escalera y caminamos un corto pasillo hasta el interior de algo que no parece un aula. No conocía absolutamente ninguno de esos pasadizos, ahora que lo pienso, en realidad, no conozco mucho la escuela.

—¿Dónde estamos? —pregunto a la chica que me ha guiado por las entrañas de Charles WeiBull School.

Ella enciende una luz y me encuentro en un cuarto donde perfectamente viviría una persona, incluso se ve ordenado y nada empolvado. Hay una cama bastante angosta que se ve muy limpia, un armario, una librería y un retrete al aire libre.

—Me parece una falta de respeto que no sepas donde vive Gunter. —dice ella con una media sonrisa.

Me quedo estática y sorprendida. Gunter es el conserje, y no sólo de la escuela, sino de la biblioteca, de la estación de policía e incluso de mi casa, la de Esme y la de Manuel.

—No tenía idea. —hablo tontamente sorprendida. —Pero... no es... ¿Cómo sabes de este lugar?

—Soy verdaderamente fan de merodear por los pasillos. En realidad, nadie sabe de este lugar, solo Luciano, yo, y pues Gunter, claramente, pero él sólo viene a su cuarto por las noches y su puerta no tiene cerradura. —todo esto lo dice con aires de suficiencia y siento algo de preocupación estando acá. Es tan extraño.

—¿Por qué me traes a este lugar?

Ella levanta los hombros.

—Porque tengo sueño, y ya que estás muy interesada en romper las reglas. Pero escucha... —la chica de ojos marrones se acerca a mí y me mira desafiante. —No se te ocurra decirle a alguien sobre este lugar. Si el director se entera de que aquí vive Gunter, lo echan.

—Yo... Oye, espera... no...

Titubeo, estoy nerviosa y mi instinto dice que estoy haciendo algo incorrecto, pero ella parece no importarle mi notorio miedo y se lanza a la cama.

Miro a mi alrededor, ni siquiera recuerdo cómo volver. Camino de un lado a otro nerviosa, esto está mal. ¿Qué tal que el profesor vuelva al salón de castigo? ¿Qué pasa si Gunter aparece y nos ve usurpando en su cuarto?

—Relájate, princesa, no va a pasar nada, al menos no aquí dentro. —dice Juliana con pereza en su voz.

—¿Me acabas de llamar princesa? —esta vez me detengo, voy hasta el pequeño sillón junto a la cama y la miro con mi expresión más seria.

—Pues sí. —ella se acomoda de medio lado para mirarme. —Todos te dicen así, tú eres la princesa y Manuel el príncipe de WeiBull.

Eso no lo sabía. Ahora mismo me siento una persona muy tonta e ignorante.

—No me llames así.

—¿No te gusta?

—Mi vida entera no es mi relación con Manuel. —espeto como una idea vana que ni yo misma me creo.

—Como digas, princesa.

Pasa un rato, y cada vez parece ser más cómodo estar aquí dentro. Escucho la respiración de Juliana a mi lado, parece que se durmió. La observo. Se ve bien durmiendo, eso es algo sorprendente para mí. Como dije, me encanta ver a las personas haciendo cosas, cualquier cosa, incluso dormir. Juliana Valdés, a diferencia de mi novio, Esme, Makenzie, Camila, Paul o cualquier persona que haya visto dormir, no pierde su particular encanto cuando duerme, incluso ese pequeño moretón en el ojo, se le ve bien, como si fuera una persona ruda que duerme plácidamente después de una pelea.