"Encuentra sitio en la mesa,
muestra tus buenos modales.
Agacha la cabeza, aquí son gente devota."-Wild Things, Alessia Cara-
Tanya despertó con el sonido de unos golpeteos en la puerta. El cuarto estaba prácticamente a oscuras. Se talló los ojos y por inercia su mirada se dirigió hacia el dvd que reposaba sobre un gran mueble de madera frente a la cama. Marcaba las 4:30 de la mañana.
¡¡4:30 DE LA JODIDA MAÑANA!!
¿Qué diablos...? Y entonces pensó con desazón, que debió habérselo esperado. Después de todo era el primer día de escuela... Aunque Alexander le había dicho que las clases empezaban a las ocho.
-Adelante- dijo Tanya con voz pastosa preguntándose quién diablos sería, mientras se sentaba perezosamente entre el revoltijo de sábanas.
La puerta se abrió de par en par y para sorpresa de Tanya, una señora entró como si nada seguida de dos muchachas cargando varios maletines negros. La señora de unos cuarenta años iba increíblemente elegante con un vestido negro y el cabello recogido. Encendió la luz y al ver a Tanya sobre la cama se quedó de piedra.
-Señorita Wright, ¿Qué hace usted aún en la cama? Pensaba que ya habría terminado de ducharse. - dijo la señora mirándola con el ceño fruncido en un claro tono de reproche.
Tanya no podría estar más perdida.
-¿Quién es usted? ¿Qué hace aquí...? - preguntó Tanya observando a las otras chicas pasear por el cuarto acomodando los maletines.
La señora la miró como si se hubiese vuelto loca.
Tanya se mordió la lengua, era obvio que esa señora la conocía y ella no tenía idea de que estaba sucediendo ahí. Pero al ver las pilas de maquillaje y productos de belleza que las chicas sacaban de los maletines, de repente empezó a comprender.
-Oh, oh sí claro. Lo siento, es que... em, creo que debería, um, meterme al baño ya. -dijo Tanya saltando de la cama y corriendo hacia el baño sin mirar atrás. Cuando estuvo encerrada, apoyó la cabeza sobre la puerta unos momentos.
¿En serio la habían despertado a las cuatro de la mañana para que la maquillara una estilista? Dios, era el primer día de clases, no la fiesta de graduación, y aparte ¿CUATRO DE LA MAÑANA? ¿Enserio?
Tanya se bañó rápidamente, el agua caliente despertándola por completo. Salió y maldijo al caer en la cuenta de que no había metido nada de ropa con ella, así que salió envuelta en una toalla.
Apenas había dado dos pasos fuera del baño y la mujer ya estaba frente a ella quitándole la toalla antes de que pudiera hacer nada. Y ahí estaba ella, desnuda ante una mujer desconocida que la miraba de arriba abajo como si la pudiese traspasar con la mirada. Tanya despertó del shock e intentó cubrirse con las manos algunas partes indispensables, era bastante extraño estar desnuda ante una persona que había conocido hacía 20 minutos. Normalmente suelo esperar después de un par de bailes y dos o tres cervezas, pensó en tono de broma.
Una de las muchachas se acercó a ella y le puso una bata alrededor para después guiarla hacia el tocador que ahora estaba lleno de toda clase de productos desconocidos para Tanya. Se sentó el banco, y después de eso, el suplicio empezó.
Tanya nunca había sido una chica que se acicalara demasiado. Desodorante, perfume, delineador, de vez en cuando lápiz labial. En fin, lo normal. No tenía ni idea, ni la más mínima, de lo ignorante que era cuando se trataba de "arreglarse", hasta ese momento.

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Twisted Fate
Romance"Por supuesto que te haré daño, por supuesto que me harás daño, por supuesto que nos haremos daño el uno al otro, pero esta es la condición misma de la existencia. Para llegar a ser primavera, significa aceptar el riesgo de invierno. Para llegar a s...