Nunca imaginé que tú serías mi verdadero amor

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Nath llevaba tiempo sin ver a su novio por lo cual estaba muy feliz de poder verlo antes de que salieran a tocar, pero se sorprendió al no encontrar a nadie más que a una chica castaña y de ojos verdes.

- ¿Hola? - preguntó Nath a la chica.

-Hola, mi nombre es Laura Jiménez ¿y el tuyo? - se presentó la chica.

-Nath Campos, un placer - dijo la mexicana.

Ambas quedaron sumidas en un silencio un poco incómodo hasta que Laura habló para romper el hielo y empezar una conversación.

- ¿Y qué haces acá? - preguntó la de ojos verdes.

-Venía a visitar a mi novio Simón - respondió ella y Laura la miró sorprendida.

- ¡Qué casualidad! Yo venía a ver a mi novio Martín - comentó la otra.

-Valla, había escuchado a Martín nombrarte de vez en cuando, pero no sabía cómo eras - dijo Nathalia -. Por cierto, ¿sabes dónde están? - preguntó.

-Salieron a revisar algo junto con Pedro hace no mucho, me dijeron que volverían en media hora - le respondió.

Poco a poco la conversación comenzó a ser más fluida y pronto empezaron a charlar como si fueran viejas amigas de toda la vida.

-Ya volvimos, sentimos haberte dejado sola - dijo Martín entrando a la sala para encontrarse con ambas chicas charlando animadamente.

- ¡Nath! - dijo Simón emocionado por ver a su novia de nuevo.

La pelirroja se levantó del sofá rápidamente, abrazó a su novio y este se inclinó hacia delante para poder besarla.

-No coman enfrente de los pobres - se quejó Isaza.

-No es culpa nuestra que usted este solo - dijo Villamil abrazando por la espalda a Aleho.

-No se preocupe tarde o temprano llegará esa persona especial y ya no tendrá que escribir canciones de desamor - comentó Martín, bromeando.

Cuando los chicos salieron al escenario Nath y Laura volvieron a su animada conversación dando paso así a una futura amistad.

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Pronto se había formado una fuerte amistad entre las dos chicas y no era raro que estuvieran hablando por WhatsApp o en llamada, incluso de vez en cuando acordaban ir a visitar a sus novios el mismo día para poder verse en persona, pero hubo un día en que Nath recibió una llamada de Laura en la que ella le decía que necesitaba hablar con ella y por suerte la mexicana había ido a Bogotá para visitar a Simón.

Nath caminó siguiendo las instrucciones del señor Vargas para llegar al parque y una vez allá se encontró con su amiga sentada en uno de los bancos y cabizbaja, se veía triste por lo cual la pelirroja se apresuró en llegar dónde su amiga se encontraba.

Se sentó a su lado y la abrazó fuertemente.

- ¿Qué ocurre, Lau? - preguntó Nathalia preocupada por la de ojos verdes.

-He descubierto algo... - respondió la nombrada.

-Me estas preocupando - confesó la mexicana.

-Yo le quiero y me intentaba engañar a mí misma pensando que aquello no podría ser - empezó a hablar -. ¿Por qué no quise verlo? Era demasiado obvio - continuó hablando, logrando así solo confundir más a la otra -. A Martín le gusta Juan Pablo Isaza y yo no quería admitir la verdad - finalizó mientras algunas lágrimas empezaban a bañar sus mejillas.

Sobre shipps de Morat y sus efectos secundarios y unas cuantas cosas más./FINISHDonde viven las historias. Descúbrelo ahora