《SIETE》

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Vegetta:

Me duele mi estómago, me siento caliente y siento que todo gira a mi alrededor pero el olor que tiene esta casa me relaja este olor a coco hace que pueda estar un poco más calmado pero esta calma no dura mucho ya que me duele demasiado no se que hacer en esta situación y Rubius no aparece.

Vi que en mi entrepierna hay algo levantado me quito los pantalones de la pijama y mi ropa interior noce que hacer pero empiezo a tocarme y veo que en cada movimiento que hago poco a poco hace que duela menos.

Mi corrí en mis manos, me dio algo de curiosidad saber que era esto y porque se sintió tan bien pero dentro de mi sentí que no era suficiente que quería más, mucho más...

Rubius:

No puedo correr más, no he corrido hací en casi toda mi put* vida pero ya estoy en la entrada de mi casa, entro y veo el reloj colgado en la pared marcan la 12:05 de la tarde, tanto me tarde?, tanto pasé dormido junto a Vegetta?.

Dejo de ver el reloj y subo las escaleras hacia mi cuarto, en la última escalera siento que mi cuerpo pesa y caigo de rodillas mi cuerpo se empieza a calentar y empiezo a jadear, no hay duda ya empezó el celo de Vegetta.

Se hable la puerta de mi habitación dejando ver a Vegetta que esta semi desnudo, solo trae camisa puesta me sonrojo un poco a ver tal escena pero no es el momento de pensar eso ya que Vegetta al verme camino hacia mi.

Note que en sus ojos ya no estaba la preocupación al no recordar nada, el temor que sentía desde que lo vi despertar si no avía algo nuevo algo que yo nunca había visto.

Cuando llego donde estaba se agachó y me levanto. Iva hacia mi cuarto y mientras me llevaba en brazos le decía que me bajara que se calmara pero no recibía señal de respuesta. Me tiro a la cama y se colocó encima mío.

Me besó en los labios y no supe como reaccionar ya que este era mi primer beso solo sentir esos labios suaves me encendió más, poco a poco empezó a meter su lengua en mi boca esta era una experiencia inolvidable pero necesito que esto pare porque me podría perder ante todo esto, ante sus feromonas, ante su cuerpo y ante el.

Intento quitarlo de encima pero no puedo sigue besandome solo nos separamos cuando necesitamos oxígeno, empieza a tocar mi entrepierna se sentía tan bien pero no quiero tener relaciones todavía, todavía no, lo único que se me ocurre es hacerlo tomar la pastilla para que se relaje y sus feromonas bajen.

Mientras me sigue besando intento sacar la pastilla, lo logró y muevo la cabeza y empieza a besarme en mi cuello y me levanta la camisa y empezó a tocarme el pecho, mi distrae tanto que aga eso pero logro meter la pastilla en mi boca.

Le agarro la cabeza y hago que me mire y con mis labios pido que me de otro beso al instante que lo hace meti mi lengua haciendo que se tome la pastilla. No le dio tanta importancia ya que siguió basándome.

Sentí como poco a poco dejaron de ser tan fuertes sus feromonas y bajo las intensidades de los besos, me sentí más calmado ya que evité perder mi primera vez y ser marcado ya que muy pronto caerá dormido.

 《No Me Dejes》 RubegettaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora