Jessica ✔️

🌺•15-Rosas rojas•🌺

"El dolor en mi pecho no es por haberte perdido. No, es por haberme perdido yo misma en un mundo lleno de mentiras contigo"

🌺-Belosnezkha-🌺

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🌺•Jessica•🌺

¿Estará jugando con mi sentimientos? Sí, seguro debe de ser eso, pero demonios como me gustó ese beso. Mi mente no procesaba nada de lo que había pasado, me quedé en shock durante 4 horas aún sabiendo que debía  dormir bien.

—  Jessica — habla la señora Peyton pero no le hago caso.

¿Cómo le han llegado las cartas? ¿Quién le dijo todo? ¿Por qué me besó? ¿Por qué no quiere que lo olvide? Y la pregunta más importante, ¿Qué quiere de mí exactamente?

— ¡Jessica! — habla de nuevo la señora Peyton —. Dios mío, niña, ¿Adónde se te va esos pensamientos?

Pone su mano en su  frente y me mira con disgusto.

— Al planeta del rey Aaron — habla Violeta la cual está sentada.

Es una necia, no quiso quedarse en su casa.

— ¿Quién es Aaron? — pregunta Andy, quien mira su figura en el espejo como si no pudiera creer lo que está viendo —. Dios mío, pero ni cuanta hermosura.

Estamos en el camerino, esperando por nuestro turno.

— Digamos que es la bipolaridad deambulando  por las calles.

— Jessica, ¿Te sientes bien con tu vestuario? — habla la señora Pyton ahora con emoción.

Miro el vestido rojo que llega hasta mis muslos con la pierna izquierda  descubierta, un short de la misma tela y el mismo color, este no deja que se vea de más, un pequeño escote  y las mangas que dejan al descubierto mis hombros bronceados.

— Sí,  estoy cómoda con el — le sonrío.

Tocan la puerta y ya me imagino para que es, la señora Peyton abre la puerta y deja ver a dos hombre, el primero con una carpeta en la mano y la tarjeta de pase colgando de su cuello y el segundo con un gran ramo de rosas rojas.

— Andy Brazoban y Jessica Jackson, salen en 10 minutos — el señor de la carpeta habla con rapidez y se va de igual forma.

— La señorita Jackson — habla ahora el señor de las rosas.

— Soy yo — lo miro confusa y  me acerco adonde él está.

— Bien, firme aquí — hago lo que me pide, para después recibir las rosas —. Muchas gracias.

— Gracias a usted — se va sin decir nada más y me volteo para ver a todos mirándome con una sonrisa.

— ¿Quién fue? — pregunta Violeta con una sonrisa.

— No lo sé — me escojo de los hombros.

— ¡Ay por Dios niña! Mira la tarjeta — habla la señora Peyton, esta  hasta con más emoción que yo.

< No señora, el puesto de bipolaridad ya está ocupado por Aaron > habla mi conciencia.