Jessica ✔️

🌺•37-Fin•🌺

"La maldad habita junto a nosotros como si fuera un humano más"

🌺-Belosnezkha-🌺

☆☆☆☆☆☆☆☆☆

🌺•Aaron•🌺

Tiempo atrás…

— Ya el apartamento está amueblado — habla Katerin.

— Que bueno, ¿Ya no tengo más nada que firma? — pregunto.

— No, solo el señor Fredy tiene que firmar algunas cosas y todo estará solucionado — contesta.

Resulta que me mudaré a Los Ángeles. Sí, esa es la sorpresa que le daré  dar a Jessica. Las llaves de nuestro propio apartamento. El señor Fredy se quedará a cargo de este hotel y yo del que estará en Los Ángeles, son muchas cosas que debo revisar, papeles por firmar y hacer que tenga tantos huéspedes como este; no le dejaría ese trabajo a otra persona, no ahora que está iniciando, debo de estar familiarizado con todo lo que sucederá.

Sé que le dije a Jessica que me mudaría en mi apartamento, pero solo lo hice para hacer las cosas como me lo había dicho Katerin. Compré los pasajes del vuelo y le dije a los padres de Jessica que actúen como si fueron ellos.

—  ¿Tú y tu esposo se trasladarán a Los Ángeles esta semana?

— Realmente la otra semana, no sabes cuanto agradezco que me tengas tanta confianza para que me  dejes aún como tu secretaria.

— Me salvas de muchas cosas — contesto —. Además,,, tú me seguirás ayudando con las ideas para hacerle algunos detalles a Jessica.

— Aún ayudándote con esas cosas no puedo creer que esto de verdad está pasando — habla burlona —. De verdad espero que se cansen y tengas hijos.

— Me acordaste a sus hermanas.

— Sí, sí — responde burlona —. También debes de hacerle una carta, aunque te vayas con ella, pero debes hacerle creer que no.

— Eso haré ahora.

— Te recuerdo que solo les quedan 5 días aquí y hoy a las 7:50 debes pasar por ella para poder llegar a las 8:00 a la casa de Ricard.

— Tranquila, no sé me a olvidado.

— Bueno ya me voy.

Niego con la cabeza mientras río y ella sale de mi oficina. Tomo mi teléfono y marco el número de Jessica y espero a que conteste.

— Hola, guapo — contesta.

— Hola, hermosa.

— Hoy debemos ir a la casa de Richard — me avisa.

— Sí, te llamé para avisarte que a las 7:50 pasaré por ti — contesto.

— Entonces te espero.

— Está bien, cuídate.

— Tú igual, ahora debo ir a resolver un asunto con las gemelas, adiós — cuelga y sonrío para después tomar un sobre rojo y una hoja para escribir la carta.

(...)

Hasta hace poco comprendí porque los malos momentos deben de suceder, realmente lo entendí. Sin ellos los buenos momentos no consiguen un buen sentido y yo tuve que vivir por mucho tiempo con ese momento que se volvió años. Jamás me voy a olvidar de la noche en la que me fijé en ti por primera vez, yo estaba tan roto, tú tan completa y verte así con una sonrisa mientras bailabas, hacías que me detuviera por una hora; lograste robarle una hora todos los días a mis pensamientos de dolor. Entonces no pude comprenderlo hasta hace poco, tú lograste hacer que sonriera inconscientemente y un momento donde no podía hacerlo.

Que cosa, ¿no?  te dije: "Nunca estaría contigo" y resulta que tú eres a la misma que le digo: "No puedo pasar mucho tiempo sin estar sin ti" 

Si antes me  hubiesen preguntado: "¿De qué te enamoraste? " Hubiese contestado: "De su piel bronceada, de sus hermosas piernas y de como sonríe a pesar de que te hayas equivocado de paso".
P

ero si ahora me preguntan "¿De quién te enamoraste?" Eso estaría más sencillo, pero realmente le contestaría la verdad.

Una palabra y siente letras que solo con verla escrita me haría sonreír de la mejor manera. Jessica,  Jessica sería la respuesta.  

Leo la carta por tercera vez y me conformo con lo que dice, guardo la carta en el sobre rojo y la entro en un lugar seguro para que no se vaya a perder. Me levanto del asiento y salgo de la oficina con una sonrisa y me despido de Katerin.

Aquí es donde comprendo porque Aurora tuvo que morir. Aurora fue mi primer amor, se llevó con ella mis primeras veces y me dejó el conocimiento y la experiencias de  haberlas perdido. Si ella y mi padre no hubiesen muerto, no me hubiese mudado y si no hubiese mudado Jessica para mí nunca hubiese existido. 

Jessica es la eternidad y junto a ella los momentos recuperados.

Tiempo actual…

Me siento atrás de ella. Sí, ya estoy en el avión listo para ver su sonrisa; Andy sabe todo así que no temo si me ve de repente. Jessica abre el sobre rojo y saca la carta.

Sé que debe dolerle que yo no apareci  para despedirme, todo sabían lo que iba hacer. Al principio no tenía claro si mudarme sí o no pero después fue necesario. 

Saco las llaves del apartamento de la pequeña caja gris y sonrío esperado a que termine.

— ¿Cuál fue la razón por la que no pudo venir? — habla ella y tira su cabeza hacia atrás.

— Todo estará bien — habla Andy.

— De verdad tenía ganas de verlo de nuevo — contesta y pone su mano en su rostro.

Me paro de mi asiento y me agacho un poca para que dar al lado de su cara y dejo la  llave del apartamento frente a su rostro.

— Las 24 horas del día junto a ti — hablo haciendo que se sorprenda —. Aceptas.

— ¿Aaron? 

Fin.