Capítulo XXVII

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Era casi septiembre y el calor entraba por la ventana, Jinyoung quería morir lentamente mientras el ventilador no funcionaba tan bien como él quisiera. Hoy había tenido que trabajar desde casa porque en su oficina intentaban fomentar el teletrabajo, Jinyoung no era un gran fan ya que su razón para quedarse en casa era estar con Seunghun, pero con el trabajo no podía. Pensaba esto frutrado con su computadora sobre las piernas mientras estaba en el sofá.

Mientras tanto Seunghun hacia sus ejercicios matutinos en la sala, como era verano la escuela estaba cerrada por lo que Seunghun no estaba trabajando, que afortunado, al menos pronto entraría nuevamente.

Jinyoung miraba con atención los músculos de Seunghun flexionando cada vez que levantaba la pesa, no debía estar mirando a su novio, debía terminar de diseñar algunos personajes antes de la fecha límite.

Luego de su primer ataque de ansiedad Jinyoung decidió pedir ayuda e ir a terapia, al principio fue duro y se sintio como si lo estuvieran tratando de loco, realmente odió cada segundo de las primeras sesiones, todo esto hasta el día que lo diagnosticaron con trastorno de estrés postraumático (TEPT), aparentemente su gamofobia no era especialmente normal, era una consecuencia del trauma de su infancia luego del divorcio de sus padres, según sus médicos.

Jinyoung intentó negar varias veces su condición e incluso quiso pedir una segunda opinión pero todo comenzó a ser muy obvio cuando comenzó a notar los síntomas de forma más clara ahora que entendía de que se trataba.

Luego de varios meses entre llantos, un ataque más, suspiros, gritos, constipación sexual, más peleas, dolores de cabeza y antidepresivos, Jinyoung quería creer que se sentía un poco mejor, Seunghun había sido muy comprensivo durante todo el proceso, como siempre era y el amor de Jinyoung por su novio crecía cada vez más para la sorpresa de Jinyoung, ya que pensaba que era imposible.

Lamentablemente los medicamentos no le permitían concentrarse por mucho tiempo por lo que su trabajo o solo dibujar por gusto eran tareas complicadas de llevar a cabo. Eso más la importancia sexual, que lo avergonzaba y mortficaba, a veces lo entritecian más, por lo que Jinyoung frecuentemente miraba los antidepresivos con rabia.

Lo único en lo que Jinyoung veía progreso era con la terapia de conversación, ya que en solo un par de meses había descubierto más cosas de sí mismo que en sus 26 años de vida.

Su mejor amigo estaba muy feliz con su proceso, diciendo que estaba orgullo de él y que esperaba que todo saliera bien, Yonghee era un positivo por naturaleza al igual que su prometido por lo que a veces eran molestos en la cabeza triste de Jinyoung, pero sabía que no era culpa de ellos, al fin y al cabo solo faltaban semanas para la boda y Jinyoung nunca los había visto tan radiantes.

Al recordar a su mejor amigo le llegó justo una notificación de este, seguramente otro mensaje para preguntar sobre su opinión de los centros de mesa o el sabor del pastel, sinceramente ¿qué tenía eso de relevante? Nadie lo iba a notar, todos estarían borrachos.

Yonghee le decía que en la tarde iría a probarse trajes y que esperaba que él estuviera allí. Jinyoung dió un quejido ante la idea de ver horas a su amigo probándose ropa que probablemente era igual, pero dijo que si porque es el padrino, literalmente no puede decirle que no al novio.

—Voy a ir por helado —dijo Seunghun repentinamente mientras estiraba sus brazos luego de terminar el ejercicio— ¿quieres?

—Si es de ese vegano que tiene sabor a relleno de galleta light, no —dijo con un poco de asco pensando en el gusto de helado de Seunghun.

Seunghun se rió y se acercó para dejar un beso en la nariz de Jinyoung.

—Si me lo pides con amabilidad puedo ir a una heladería normal —sugirió levantando una ceja.

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