Capítulo XIV

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Luego de que toda su familia se enterara, incluso el padre de Seunghun (que Jinyoung realmente solo había visto un par de veces porque el señor viajaba por el mundo casi todo el tiempo), ya podían estar juntos todo el tiempo sin preocupaciones.

Así estuvieron el resto del verano, que solo fueron unas pocas semanas antes de que los Bae regresaran a casa para comenzar las clases. Jinyoung sabía que estaba siendo dramático pero luego de vivir prácticamente con su novio durante más de un mes, terminar ese sueño era realmente triste.

Volvió a su hogar y se encontró finalmente con Yonghee que parecía no estar de buen humor, le comentó que llevaban unos días enojado con Hyunsuk y Jinyoung estaba confundido porque Yonghee no se enojaba con nadie, nunca. Al parecer Hyunsuk estaba de vacaciones en algún lugar y no respondía sus mensajes. Jinyoung solo podía reír porque Yonghee en serio nunca se enoja, pero ahora lo hacían enojar pequeñas cosas como esa, que claramente no eran enojo, solo estaba necesitado porque Hyunsuk no le prestaba atención todo el día.

—¿Ya son novios? —le preguntó recostandose a su lado en la cama de Yonghee.

Yonghee negó suavemente con la cabeza.

—Aún no hablamos de eso, realmente creo que él cree que sí lo somos pero aún no recibo una cordial invitación a pensar del mismo modo —Jinyoung no pudo evitar reír.

—¿Y por qué no le preguntas tú? —Yonghee se sonrojó un poco.

—No lo sé, no tengo el valor, creo.

—Te prometo que te dirá que sí —rió.

Yonghee solo miró su celular con rabia ya que no tenía nuevos mensajes.

—Entonces Seunghun ya es tu novio —comentó dándole la vuelta a la pantalla. Jinyoung asintió feliz por volver a pensar en Seunghun—. Me alegro por él.

—¿Por mí no? —hizo puchero

—Nah, llevas enamorado como 3 segundos, él sí que es todo un luchador —Jinyoung ya le había comentado a Yonghee de todo el tiempo que Seunghun había estado encaprichado.

—Bueno, al menos tú tampoco sabías —dijo parándose para preparar la consola de videojuegos. Sin embrago, Yonghee no respondió nada a eso y Jinyoung lo miró—. No sabías, ¿verdad?

Yonghee entonces rió un poco y se sentó en el suelo tomando uno de los controles.

—Bueno no "sabía" a ciencia cierta, eran... sospechas.

Jinyoung ya estaba cansado de ese maldito secreto que todos sabían menos él.

—¿Por qué? —preguntó casi enojado.

—Bueno era un rumor durante la escuela, muchos chicos comentaban que estaba enamorado de otro chico, lo cual de por sí ya era escandaloso —comenzó mientras seleccionaba las opciones de la partida—. Pero como lo veía con chicas y eso fuera de la escuela realmente no pensé mucho más, hasta que un día en los vestidores comentaron que eras tú y pensé "imposible" pero luego noté que a veces te miraba aunque tú lo ignoras por completo e incluso parecia triste... —suspiró—. Y ya, luego Hyunsuk me dijo.

Jinyoung abrió los ojos ante eso.

—¿Él sabía?

—Por supuesto, han estado viviendo juntos todo el año. Me lo dijo un día por error en realidad —rió— me hizo jurar que no te diría. Luego cuando los vimos juntos durante la fiesta los dos no lo podíamos creer, por eso te hablé de él pero siempre supe que él no te gustaba así que cuando lo descubrí, eso sí fue una sorpresa, pero ese día que salieron con Hyunsuk, ¡él lo hizo con toda la intención!

Jinyoung se quedó pensando en que realmente era un tonto ciego... Nunca había notado nada de eso, tampoco había notado que su mejor amigo sabía... y lo supo desde hace bastante.

—¿Por qué nunca me lo dijiste? —Yonghee pareció pensar un rato mientras le entregaba el otro mando.

—En ese momento estabas con Jihoon, cuando me enteré en los vestidores, y... ¿Qué hubieras hecho con esa información?

Jinyoung lo pensó y le gustaría creer que su yo del pasado intentaría ser mejor persona con Seunghun si hubiera sabido, pero a conciencia sabía qué simplemente hubiera pensado que era mentira e incluso hubiera evitado mucho más a Seunghun. La tristeza se volvió a apoderar de él pensando en la tristeza que hubiera sentido Seunghun si él lo hubiera evitado más. Yonghee pareció percatarse.

—Jinyoung, está bien, las cosas sucedieron como tenían que suceder, no puedes vivir arrepentido toda tu vida, las cosas están bien ahora y los dos están felices ¿no?

Jinyoung tomó el control y se sentó a su lado. Realmente desearía no estar arrepentido pero al pensar en la sonrisa de Seunghun y que esta se viera interrumpida por su indiferencia en el pasado, vaya mierda... La felicidad de Seunghun debía ser su prioridad de ahora en adelante.

A los pocos días volvieron a los dormitorios y se volvieron a encontrar con Seunghun, Jinyoung estaba infinitamente feliz por volverlo a ver, ahora podían pasar días enteros juntos de nuevo, salían a citas casi todas las semanas, en varias ocasiones Jinyoung iba a verlo jugar fútbol donde lo veía tan feliz y debía admitir, tan sexy. Iban juntos a clases y almorzaban juntos, era muy extraño estar más de algunas horas separados, eran de esa clase de parejas que no se peleaban y parecería que todo era perfecto.

Jinyoung realmente estaba sorprendido de la perfección de su relación con Seunghun, siempre estaban felices y le daba miedo pensar en un momento en el que no estuvieran.

A veces Seunghun dormía con él, aunque su cama era muy pequeña los dos lograban que funcionara, Jinyoung estaba acostumbrado a dormir con sus hermanos cuando eran pequeños pero esto era distinto ya que los dos eran grandes. Seunghun dormía como un koala y aunque Jinyoung a veces sentía mucho calor en las noches decidía no despertarlo porque se veía tan tranquilo y adorable.

Pero aparte de verse adorable, en su cama se veía infinitamente mejor cuando estaba abierto de piernas, dejando que Jinyoung hiciera de las suyas. Aunque no habían tenido sexo en sí, Jinyoung estaba igualmente conforme porque Seunghun era muy sensible y adorable, frecuentemente se avergonzaba, Jinyoung lo cuidaba yendo a su paso y pidiendo permiso antes de hacer cualquier cosa nueva.

Seunghun obviamente quería más pero parecía que lo que hacían hasta ese momento podía ser suficiente. Por otro lado Jinyoung sabía que igualmente todo llegaría a su paso y ver el rostro de felicidad de Seunghun cuando se abrazaban desnudos en alguna de sus camas era simplemente suficiente.

Durante las vacaciones de invierno ambos regresaron a sus casas, que obviamente siempre estuvieron en el mismo barrio por lo que continuaban viéndose seguido. Durante ese mes cumplieron 6 meses juntos y Seunghun había hecho una reserva en un costoso restaurante, sin embrago cuando llegaron, de algún modo, se había perdido dicha reserva.

Luego de intentar quejarse, sin éxito, tuvieron que salir a la fría noche aún vestidos formalmente. Jinyoung se reía, Seunghun estaba muy triste porque su noche estaba arruinada pero Jinyoung estaba feliz sosteniendo su mano, cubierta por su guante, y caminando por las calles iluminadas por la luces de la Navidad que se acercaba.

—Está bien Hunnie —dijo su apodo suavemente—, aún podemos ir a cualquier lugar —Seunghun frunció el ceño.

—Pero quería llevarte a ese lugar —hizo un puchero.

Jinyoung se detuvo para besarlo dulcemente sosteniendo suavemente el abrigo del otro para acercarlo.

—Felices seis meses Hunnie —le dijo a unos centímetros de sus labios. Seunghun le sonrió cálidamente haciendo humo con su boca.

Terminaron su noche en un pequeño bar lleno de gente viendo un partido. Y mientras tomaban, comían, hablaban y veían el partido, intoxicados por la emoción de la otras personas, Jinyoung pensaba que nunca se había sentido así y que esperaba poder decirle sus sentimientos a Seunghun pronto.

Decirle que ya no estaba enamorado, lo que Jinyoung sentía al mirar su sonrisa era simplemente amor.

Dime lo que piensas | BAEHUNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora