Pude notar el temblor en sus manos, y cuando volví a mirar sus ojos, estos estaban rojos y no paraban de llorar.
Movió sus labios, probablemente quería decirme algo. Di un paso hacia ella, quedando muy cerca.
Mi corazón latía con fuerza en mi pecho, ni yo misma creía que esas palabras salieran de mi boca, pero fué un impulso.-Me acaban de dar una paliza, casi me matan a golpes. Osborn me ha pillado, sabe que le he traicionado y no parará hasta matarme. Me la he jugado todo este tiempo por ti, porque no quiero que te pase nada malo, porque no quiero perderte a ti también. Porque te quiero Billie. -soltó una de mis manos y la acercó a mi rostro. No podía ver en su mirada lo que estaba pensando pero juro que nadie nunca me ha mirado así.
Su labio inferior temblaba.
-Por favor, no te vayas. Tú has cambiado muchas cosas de mi, Billie, y te juro que puedo cambiar todo por tí. -le dije.
Su mano acunó mi mejilla, cerré los ojos por el contacto y noté su pulgar limpiando la sangre de mi mejilla lentamente.
Abrí mis ojos y vi que sonreía.
-Te quiero. -susurró.
Iba a sonreir, pero la mano en mi mejilla se fué a mi nuca y me acercó a ella.
Cuando sentí el suave contacto de sus labios con los mios, el dolor que sentía en mi cuerpo desapareció, sentía cosquillas en mi estómago.
No podía creer que Billie me estaba besando.Al principio me paralicé, pero luego llevé mis manos a su cintura y la atraje hasta mi.
Ahí fué cuando nuestros cuerpos chocaron y sentí la lengua de Billie chocar con la mia, su mano en mi nuca se enredó en mi pelo.Había besado a muchas personas, pero nunca a ninguna a la que amara. Y besar a Billie era como si flotara en el aire, como si un viento cálido chocara contra mi rostro, la sensación que notaba en mi estómago era parecida a cuando subes a una montaña rusa. Adrenalina.
Su sabor me impregnó, y era un beso tan lento y delicado que sentía mis piernas flaquear.Se separó de mi y junto su frente con la mia, lamiendo sus labios.
-Ahora entiendo el porqué me pongo nerviosa cada vez que me miras. -susurró cerca de mis labios.
Sonreí como una estúpida enamorada, pero eso es lo que era, una estúpida enamorada.
-Vamos a curarte esas heridas. -dijo cogiendo mi mano.
Asentí y caminamos con nuestras manos entrelazadas hasta mi caravana, donde vimos a Diego en el sofá.
***
Cuando Billie limpió la sangre de mi cara, las heridas en mis pómulos y la herida de mi frente, con la ayuda de Diego me llevaron hasta mi cama.
Cuando estiré mi cuerpo adolorido suspiré, y Billie se estiró a mi lado.Me quedé dormida en su regazo mientras sentía sus caricias en mi pelo, escuchando su respiración y sintiendo la llema de sus dedos acariciar con delicadeza mi mejilla.
Cuando desperté no estaba a mi lado, pero un ligero olor a comida pasó por mi nariz y supe que seguía allí.
Me senté de un salto en la cama, acordándome de las palabras de Osborn.
"Te mataré."
No estábamos a salvo ahí, debía irme cuanto antes y avisar a Patrick para que no se reuniera con Osborn.
-Hey, no te levantes. -dijo Billie apareciendo en la habitación con una bandeja.
-Tenemos que irnos, Osborn viene a por mi. -le dije levantándome de la cama.
-Primero, debes comer. -dijo apoyando sus manos en mis hombros y volviendo a sentarme.
Levanté la mirada y miré sus ojos azules, sonrió y se acercó, dejando un fugaz beso en mis labios que quitó todos mis miedos.
Comimos en la cama mientras decidíamos qué hacer, tanto Diego como yo no podíamos vivir por más tiempo allí, sinó Osborn nos mataría. A mi por traicionarle y a Diego por defenderme.
-Os quedareis en la cabaña. -me dijo Billie.
-No, ni hablar. Esa cabaña es tuya. -le dije dejando el plato vacío en la bandeja.
-Y por eso mismo podeis vivir allí. -me miró. -Y no hay peros.
-Hasta que encontremos algo, vale. -respondí. -Gracias.
Sonrió y se levantó de la cama.
-Vayamos a buscar a mi padre, debe saber lo ocurrido. -dijo.
***
Cuando le contamos lo sucedido a Patrick, se austó muchisimo.
No sabíamos qué hacer, porque Osborn sabía dónde vivían los O'Connell y allí no estaban a salvo.-Te estaré eternamente agradecido por tu ayuda, Judith. Te la has jugado por nosotros. -me dijo el hombre.
Billie y Maggie salieron de su despacho hacía unos minutos, sólo estábamos él y yo.
-Quiero que Billie esté a salvo. -le respondí.
Me miró durante varios segundos.
-La quieres, ¿verdad? -preguntó.
Suspiré, era hora de decirle a Patrick lo que sentía por su hija.
-Si, la quiero. -respondí. -Ella sin quererlo, me ha ayudado muchisimo y con ella a mi lado soy feliz.
El hombre sonrió.
-Ese chico no me gustaba para ella, y tu, Judith, me dejas muy tranquilo. Sé que contigo está a salvo, así que tienes mi bendición. -dijo apoyando su mano en mi hombro. Sonreí. -Tenemos otra casa en la ciudad, allí es donde trabajaba con... ya sabes, las drogas.
-Vaya, parece que ganabas mucho dinero. -dije.
-Si, pero se acabó. Seguiré en mi empresa como siempre y tiraré todas esas máquinas a la basura, despediré a mis hombres y saldré de ese mundo. Estaré limpio. -explicó.
-Entonces, ¿qué hareis con esta casa? -quise saber.
-La venderé, y Osborn nunca sabrá mi nueva dirección. -contestó.
-Me dejas muy tranquila. -dije sonriendo. -Pronto acabará todo esto.
-Diego y tu podeis quedaros el tiempo que necesiteis en esa cabaña, ¿de acuerdo? -dijo volviendo a poner su mano en mi hombro.
Ese gesto, su voz ronca y masculina y la manera en la que me miraba, me transmitió confianza y me recordó a mi padre. Mis ojos se humedecieron.
-¿Te parecería bien trabajar con Diego en mi empresa? -me soltó.
No podía creerlo. Si me llegan a explicar hace dos meses que estaría teniendo esta conversación con Patrick, el hombre intimidante al que le vendía droga y que esa chica rubia que vi en la piscina me había besado dos veces, no podría creerlo.
Mi vida había dado un giro de 360 grados, parecía que todo estaba cambiando para bien.
Sé que mis padres, allá donde estén, estaran sonriendo por mi.
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A bullet in my chest | Billie Eilish
Fanfiction-No puedo seguir sufriendo por ti, Judith... Te quiero, y el día que te vayas me harás sufrir, por eso debo irme ahora. -dijo soltando mis manos. -Yo sufro cada día, porque te quiero de una forma diferente. Estoy enamorada de ti, Billie. -retrocedió...