moments;

25;

"Make your fingers soft and light

Let your body be the velvet of the night

Touch my soul, you know how

Andante, Andante

Go slowly with me now."

ABBA - Andante, andante

***

[Continuación del oneshot 12;]

***

En el momento que la puerta de la habitación se cerró, los besos tímidos se tornaron besos apasionados y llenos de curiosidad, las manos empezaron una viaje por sus cuerpos, seguido de sus labios. Llegó un punto donde la ropa molestaba, ya que impedía el contacto deseado, el contacto de piel contra piel. Entre besos, piezas de ropas descartadas y movimientos torpes acabaron en la cama individual que había en la esquina de la habitación. Y rato después se encontraban tumbados cara a cara, completamente desnudos, con las piernas enredadas entre sí y una sonrisa enorme en sus rostros sonrojados, compartiendo la pequeña cama de la habitación de invitados del piso de Roy Harper. 

Gar apartó un mechón de cabello morado de su frente sudorosa, cuánto más la miraba más sentía que algo se hinchaba en su corazón. Rachel con una pequeña sonrisa en sus hinchados labios apartó su mano de su piel y recorrió la palma de su mano con su dedo. Él solo le sonrió, esa sensación en su corazón se apretó al punto de ser un placentero dolor.

—¿Cuánto tiempo me vas a mirar así?—le preguntó ella con una sonrisa, su rostro se volvió más rojo ante su mirada risueña.

Él dejó escapar un suspiro de satisfacción, todavía sonriendo como un tonto enamorado. Rachel notaba sus emociones contra su piel desnuda y le hacían cosquillas por dentro, sus emociones alimentándose de las Gar, sintiendo aquella ternura y adoración, acoplándose a su sentimiento de amor. Estaba estática aunque estaba haciendo un gran trabajo en disimularlo, no como Gar que parecía sin procesar lo ocurrido, completamente atontado y parecía que en cualquier momento iba a estallar de alegría.

— No lo sé.—fue su respuesta.— Simplemente nunca, ya sabes, pensé que esto nunca sucedería.—parecía incapaz de formular una frase. Rachel tuvo que ahogar una carcajada ante eso.—o, al menos, no aún.

— Acabamos de tener sexo, Gar.—dijo ella de manera directa, no obstante, aquella frase le provocó cosquillas en el estómago.— No es como si algo magnífico hubiera sucedido.—dijo intentando quitarle importancia, aunque sabía que su corazón parecía negarse a hacerlo. Y menos aún cuando con la yema del dedo empezó a acariciarle el pómulo de manera distraída.

— ¡Pero ha sucedido algo impresionante!— Soltó un ruido entrecortado que Rachel no supo a que le recordaba pero le era familiar y se rió. — Ha sido increíble, Rach. ¿Cómo no estás volando a la luna en este momento?

Ella levantó una ceja, a través de su rostro sonrojado. Sí que se sentía como si estuviese flotando en un mar de estrellas, pero no se lo iba a confesar a Gar ni en un millón de años.

—¿Porque va a suceder nuevamente?

Parecía realmente anonadado ante esta idea, pero al mismo tiempo ilusionado, como cuando se le decía a un niño que la Navidad sucedía cada año, y sus achinados ojos se volvieron hacia ella llenos de sorpresa.

—¿Qué?

— No es que como si esto no volverá a suceder.—dijo mientras acercaba su cara al hueco que había entre su cuello y su hombro.— Aunque encuentro adorable tu capacidad de romantizarlo.—añadió mientras soltaba una carcajada, sus labios rozando contra la piel de la juntura de su hombro y cuello cuando movía sus labios. Ante su comentario notó como el cuello de Gar se calentaba a causa del sonrojo.