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❛ Interrupciones;❜ 

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La primera vez es una de las paradojas más grandes en la existencia de la humanidad. Sabes que lo más probable es que sea un desastre, es tu debut sexual, en ciertas ocasiones tu pareja tiene tan poca experiencia como tú. Dos personas dando palos de ciego intentando hacer sentir bien a la otra, algo así no está destinado a ir bien, más bien parece destinado a ser un pequeño desastre. Un bonito pequeño desastre con el cual siempre se acaba fantaseando y en la mayoría de ocasiones se intenta que esta primera vez sea perfecta porque es algo que solo sucederá una vez en la vida, algo único del cual buscas llevarte un buen recuerdo, o al menos compartirlo con alguien que se tenga confianza y cariño.

Desde que empezaron a salir, ambos habían sido conscientes de aquello desde el principio, incluso lo hablaron cuando decidieron esperar antes de saltar a la siguiente fase, como diría Jason, querían tomarse las cosas con calma aunque ambos también eran conscientes que el momento llegaría tarde o temprano, ya que, eran adolescentes por el amor de dios. Eran dos jóvenes que se querían y adoraban, pero sobretodo eran adolescentes llenos de hormonas, curiosidades y, las cosas como son, se atraían. Mucho. 

Por aquella razón se encontraban en la habitación del cambia forma, ambos tirados en la cama del chico besándose con una pasión, que más bien parecía que se querían devorar, mientras poco a poco iban descartando piezas de ropa, dejándolas caer sobre el suelo. 

Se separaron durante unos segundos y se quedaron mirando. El rostro de él estaba con cubierto de una fina capa de sudor y el de ella estaba rojo, lo notaba quemar por dentro de sus mejillas. Sus respiraciones estaban agitadas, Rachel sentía las emociones de Gar burbujear contra su piel y las emociones de ella como si tuviesen vida propia empujaban contra las de él con fuerza, abrumándola, el deseo de ambos juntándose en su sistema con una fuerza que parecía que temblaba. 

Una sonrisa pequeña se dibujó en los labios de Gar mientras la miraba fijamente, antes de volver a besarla durante un efímero segundo para luego separarse, después le plantó un beso en la mandíbula, y continuó repartiendo besos suaves a lo largo del cuello y...

— ¡Gar!—exclamó Dick al otro lado de la puerta mientras la golpeaba repetidas veces de manera apresurada.— Hay problemas en la ciudad, vístete. Avisa a Rachel.

Sin esperar ninguna respuesta el adulto se fue.

Rachel comenzó a gruñir violentamente, sintiendo unas ganas sobrehumanas de querer golpear a algo o a alguien.

— Tienes que estar de broma.—gruñó la chica mientras Gar se apartaba de ella, al momento Rachel ya echo en falta el calor de su cuerpo. Nunca se había sentido tan frustrada, de eso estaba seguro.

—No me puedo creer esto—se quejó el chico mientras se ponía la camiseta y se recolocaba los pantalones, su rostro mostraba tanta frustración como el de su novia.

Rachel tomó el tirante de su sujetador y se lo colocó en el hombro mientras no paraba de maldecir.

—Por fin tenemos algo de tiempo libre y esos idiotas tienen que venir a arruinarlo todo, sea quién sea va a desear no haber nacido— dijo Raven tratando de no perder el control ante su rabia, mientras se acaba de vestir de manera rápida y enfuriada.— ¡Yo solo quería hacerlo de una maldita vez!

—Rachel por el amor de Dios, no lo digas así.—se quejó Gar mientras la miraba con el rostro enrojecido y la mandíbula prieta.—  No haces más fácil toda esta situación si dices esas cosas ¿sabes?

Rachel dibujó una sonrisa pequeña a modo de disculpa y le revolvió el pelo verde, provocando que, a pesar de la frustración, el chico también sonrió.