Descubriendo

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Cuando vio a Harry en el pasillo por primera vez desde antes del descanso, los ojos de Draco se iluminaron. Fue justo antes de que comenzara la cena la noche antes de que se reanudaran las clases. No había mucha gente en el corredor, de hecho, la mayoría estaba en sus propias salas comunes, terminando sus ensayos o libros antes del día siguiente. 

Draco miró a su alrededor, asegurándose de que no hubiera nadie cerca de ellos, pero había otros al final del pasillo, por lo que convirtió su rostro en una sonrisa burlona, ​​mirando los ojos de Harry, que se lanzaron hacia su mano. Draco asintió, caminando cerca de él. Sus hombros se golpearon y lo que aterrizó en su mano fue un pequeño trozo de pergamino rasgado. 

—¿No puedes ver, cuatro ojos?

—Aléjate, Malfoy. Mira por dónde vas— dijo Harry antes de poner los ojos en blanco. Cuando doblaron el pasillo, Draco se escondió detrás de una columna para poder ver la escritura desgarrada.

Segundo piso, armario de escobas junto a la sala de clase de encantos. Ve cuando puedas. Te encontraré en mi mapa. Te veo ahí. 

El corazón de Draco dio un vuelco y tragó una sonrisa antes de darse la vuelta y dirigirse hacia allí. Se mordió el labio mientras caminaba, acelerando el paso  porque puede ver a Harry. 

Miró a ambos lados antes de entrar al armario, y una vez que cerró la puerta, lo abrazó. Harry sonrió levemente y apenas respondió; todo su cuerpo se sentía demasiado culpable.

—Hola, tú.— Draco lo apretó, besando su frente. —¿Cómo estás? ¿Cómo estuvieron tus vacaciones?

Se agachó y besó los labios de Harry, pero, de nuevo, Harry no respondió tanto como Draco quería que lo hiciera, así que lo soltó.

—Draco.—Harry compuso una sonrisa falsa. —Bien. Acabo de visitar a los Weasley. Te he extrañado— dijo, y esta vez se acercó para besarlo de verdad, porque no era Cho. Este era Draco. Esto fue en casa. Dulce, salado, encantador hogar. Le rodeó el cuello con los brazos y se puso de puntillas para poder obtener un mejor ángulo. 

—Mhhmm— gruñó Draco, —definitivamente te extrañé. 

Harry se dejó besar por Draco, respondiendo profunda y apasionadamente, apretándolo más fuerte. Draco soltó sus labios y presionó besos en su cuello, pero Harry sintió que estaba siendo egoísta, sintió que no merecía esos besos, así que se apartó. 

—¿Cómo estuvieron tus vacaciones?— Preguntó, casi demasiado solemne.

—¿Estás seguro de que estás bien?

—Estoy bien. ¿Por qué preguntas?

—Simplemente no pareces feliz de verme. Estaba extasiado cuando leí tu nota. ¿Qué pasa?

—Háblame de tu descanso primero, sin embargo,— Harry se mordió el labio, recostándose sobre los talones y fuera de su abrazo. 

—Está bien ... estuvo bien. No pasó mucho. Lo de siempre, debería decir.

—¿Lo de siempre? El significado de siempre ...

—Sí, Harry.

—Como en tu padre-

—Sí, Harry. Está bien. Estaba bien. Solo está preocupado porque mi futuro es todo. No soy lo suficientemente serio.

It Was All Just a GameDonde viven las historias. Descúbrelo ahora