It Was All Just a Game

Sueño sin sueños

—Harry, estoy preocupado.— El Gryffindor estaba encajado entre las piernas del rubio, con la espalda presionada contra su pecho. Draco acarició el cabello de Harry y Harry acarició sus manos entrelazadas con su pulgar. Draco estaba tan cálido y Harry se empujó más profundamente en su cuerpo. 

—Escucha, sé que mi cabello es un desastre y todo, pero no importa cuánto lo cepille o use un hechizo, simplemente no se despeinara— Harry podía sentirlo sonreír detrás de él a pesar de que no podía ver su rostro. 

—¿Qué?— se rió. —No, me refiero a ti.

—¿Hm? ¿Entonces?— Harry frunció el ceño. 

 —Te quedaste dormido durante la clase de Umbridge ... otra vez.

—¿Quién no lo haría? Ella es lo peor del mundo.

—Ese no es mi punto,— Draco envolvió sus brazos alrededor de él más fuerte. —También te quedaste dormido durante Pociones el miércoles. 

—¿Y? Snape es un imbécil.

—Ese tampoco es mi punto,— Draco se mordió el labio. Harry no dijo nada, pero se incorporó un poco y volvió la cara para que sus ojos se pudieran fijar en los suyos. —En cada cita que hemos tenido en el último mes y medio, te has quedado dormido de una forma u otra. 

Harry tragó saliva. —¿Y? ¿Y qué? Estoy cansado y eres como una almohada. No deberías ser tan suave.

—No es solo que estés cansado. ¡Te ves enfermo, Harry!

—No estoy enfermo, Draco.

—¡Joder! Tu piel se ve ... bueno, muy horrible.

—Vaya, gracias— se volvió para mirar al lago. Harry suspiró, sabiendo que no había forma de evitar esta conversación. —Draco, estoy bien. Solo estresado, supongo. Creo que tiene algo que ver con Umbridge. Ella solo me está estresando. Es enloquecedor.

—No es natural. Algunos contratiempos están bien, pero solo poder dormir, como dormir de verdad, a mi alrededor no es saludable. 

Harry sabía que eso también era cierto, pero se negó a pensar siquiera en contarle a Draco sus sueños.

—Tal vez ... no lo sé.— Tanto Draco como Harry se callaron. Draco todavía se estaba peinando cuando de repente pensó en una idea casi brillante.

—¿Entonces solo puedes dormir a mi alrededor? ¿Verdad?— El chico de ojos verdes se animó al oír el entusiasmo en su voz.

—Sí— dijo Harry con curiosidad.

—Bueno, ¿por qué no te acuestas conmigo?

—¿Qué? Um Draco, estoy bastante seguro de que si me alejo incluso a 10 metros de las mazmorras de lo que me matarían en el proceso. ¿Qué nos pasó siendo un secreto?

—No estoy diciendo que vengas a mi dormitorio, idiota— Draco golpeó a Harry con la cabeza suavemente, pero con firmeza, —Estoy diciendo que dormiré aquí.— El Gryffindor lo tomó en consideración, pero muchas cosas. Podría salir mal.

—¿Qué pasa con mis amigos? Ya están nerviosos y tú y yo estamos desaparecidos todos los viernes, ¡mucho menos todos los días!