quarentine ; trueno

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Me pidieron por favor que suba otro cap y acá me tienen, eso sí, recomienden la fic porfa para así la hacemos llegar a más personas 💛

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Mateo

—No la banco más boludo, te juro que esta más insoportable que antes —me quejé mientras me acostaba en el sillón.

Desde el otro lado de la línea me contestaba Daniel que se estaba cagando de risa.

—Pero, ¿tan así? Me parece que tas exagerando wacho —dijo dani dudoso —No pensé que era así tu wacha.

—No es mi wacha, imbecil —escupí ya cansado — Es mi ex.

—Uh, tas perdido eh —bromeó a lo que yo suspiré —Solo a vos tenes que cumplir cuarentena con tu ex.

—Me parece que voy a romper la cuarentena boludo, te juro que es infumable —me llevo las manos a la cabeza —Aunque los ratis me lleven a la comisaría, prefiero mil veces estar allá que acá.

—Sos un exagerado —soltó — ¿Le hablaste a Azul? Anda re loca esa piba con vos.

— Nada amigo, tipo andamos ahí pero nada más —solté y le di un mordisco a la manzana que tenía en la mano.—Bueno wacho, nos vemos no sé cuándo, espero sobrevivir a esto —dije poniéndole un poco de gracia al asunto, sino me deprimía más o menos.

—Dale wacho, suerte y no te metas en macanas...ya sabes a lo que me refiero —rió y colgué.

Que hijo de puta este Daniel, ni en pedo me vuelvo a enganchar con esta loca.

Y hablando de Roma, apareció Constanza con los pelos todos parados y enredados.

—Alto nido de pájaros tenes allá arriba —me burle haciendo que esta me mire y me saque su dedo corazón.—Ay que tierna que sos.

— Chúpala, puto.—siempre tan sutil ella.

—Ya lo hice y prefiero no volver a hacerlo, créeme —está rió sin gracia.

Esta se acercó a mi, muy cerca de mi cara haciendo que yo arquee la ceja, pero me agarro del cuello de mi buzo y me acercó a ella, mucho más de lo que antes estábamos.

— ¿Todavía no me superaste, no? —pregunté mirándola de arriba a abajo.

—Mirá, me vas a tener que dejar de joder porque estoy en mis putos días, me duelen los ovarios como si me los estuviesen estrujando y no estoy de humor —expresó y tomó aire para luego seguir —Así que cerra el orto si no queres quedarte sin hijos, ¿si?

Yo asentí y esta me soltó brusca, la puta madre eso si que fue tenso.

Esta agarro una pastilla y un vaso de agua para luego llevarla a su boca y digerirla, su teléfono sonó a lo que atendió.

Cuando comenzó a hablar yo ya sabía sin dudas quien era.

—Hola bebé —soltó ella —Si, estoy bien...

—Si, bien loca estas —agregué haciendo que me mire mal.

—No Pau, estoy solo con Barbara —se mordió el labio y yo la miré, mírala a ella mintiéndole al novio.—¿Sabes que? Después te llamo, besos.