Blood & You [Jookyun]

Trece

Hwasa era una mujer fuerte y hermosa. La vida le había dado algunas lecciones que tuvo que aprender a la mala, se volvió osada e inteligente y sin miedo. Ella haría lo que fuera por su familia, su sangre y la causa. Y eso incluía disipar las dudas y temores de cierto nieto suyo.

Kihyun jugaba con sus manos y fruncía el ceño de vez en cuando. Hacía años que no veía a su abuela y ahora estaban aquí, caminando por el bosque. Esperaba no estar en problemas, estaba nervioso.

-Tu tío dice que vas muy bien en la escuela, el primero de tu clase.

-Sí, me gusta la escuela.

-¿Tienes alguna materia menos favorita?

Kihyun lo pensó por un momento, - tal vez física. Bueno no, es decir, es difícil pero aún así me parece fascinante.

Hwasa sonrió, -me alegra. Ser inteligente es una virtud y una maldición.

-¿Porqué?

-Ser listo te llevará lejos, pero también te hará cuestionarte todo el tiempo incluso contra tus propios valores. Debes aprender a dominar tu mente y no dejar que se descarrie por ideas contrarias a lo que te hemos enseñado.

-Yo, yo no, -Kihyun de pronto lo entendió. Así que su tío bocazas le había contado a la abuela sobre sus dudas. Maldito -yo no estoy en contra de lo que hacemos, es sólo que -de detuvo, ella era su abuela pero también era su líder. Y él tenía miedo.

-Es sólo ¿qué? Vamos, continúa Kihyun.

-No lo entiendo.

-Hacer lo correcto no siempre es fácil. Kihyun, eres muy listo, puedo verlo. Y sé que aún eres un niño pero esta vida es sagrada. Fuimos elegidos por las deidades para limpiar el mundo del mal. No cualquier persona tiene ese privilegio. Y el mal nunca duerme, llegará el momento en que los monstruos intentarán rebelarse, se harán fuerte y seremos probados. Quiero creer que cada miembro de mi familia entiende lo que espero de ellos.

-Tu eres valiente abuela, yo no sé si podría hacer lo que tu hiciste.

Hwasa sonrió -yo tampoco lo creía.

-Todo el mundo habla de ti y yo, yo no creo ser así de valiente.

-Yo era como tú Kihyun, nunca había visto lobos ni monstruos. Nada, pero conocía las historias y las hazañas de mis ancestros así que por años estudié y entrene como si matara uno cada noche. Pero no fue hasta los diez y siete años que finalmente pude ver a un lobo de verdad y cinco años después, pude matarlo. Era enorme, gris y de ojos tan rojos como la sangre.

-Era un alfa -Hwasa asintió.

-Nada de lo que estudié me preparó para eso. Tuve miedo. Yo había pelado con mi madre esa tarde y salí sin permiso por la ventana. Por aquellas fechas, toda la familia era famosa entre nuestra gente. Teníamos un linaje y mis padres habían eliminado a tantos lobos y manadas que no podía contar. Así que los lobos sabían quienes éramos, algunos salían huyendo y otros más tontos peleaban. Como sabes, no es hasta los diez y ocho que se nos permite al fin cazar con el clan. Tuve que esperar mi oportunidad.

Siguieron caminado por el bosque, Kihyun estaba totalmente metido en la historia de su abuela. El sol estaba por ponerse y suaves rayos de luces naranjas y rojizas se colaban por los árboles.

-¿Qué pasó?

-Yo regrese tarde ese día, estaba molesta aún. Nuestra casa era grande y estaba justo aquí, -Hwasa se detuvo y Kihyun miró alrededor. Estaban en el santuario, justo en medio del bosque. Aquí era donde tenían lugar las cosas importantes, como sus entrenamientos, los exámenes físicos, la graduación de un cazador y las ejecuciones, -yo estaba justo detrás de este árbol y lo vi todo. Eran decenas de lobos, tantos que no pude contarlos, pero si pude contar a mi familia. Mis padres, mis hermanas y hermanos y tu abuelo. Vi como despedazaban a cada uno de ellos, los gritos de mi madre siguen en mi cabeza. Vi a tu abuelo pelear hasta el final, no había miedo en sus movimientos. Pero eran demasiados contra ellos y no quedó nada. Subí al árbol y aún hoy no sé cómo pude hacerlo. Al final, los lobos se fueron, pero se quedó el alfa. Miró alrededor como buscando algo y después se fue. Yo tuve miedo Kihyun, no hice nada. Simplemente los deje morir a todos. Estuve horas en este árbol.