CAPITULO 25

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Estaba en su pecho mientras nuestras respiraciones volvían a la normalidad, ambos nos encontrábamos en silencio disfrutando de estar juntos, realmente había Sido mejor de lo que yo esperaba, estaba realmente cansada.

- estás bien- su voz me saco de mis pensamientos.

- mmm.

- cansada.

- mmm- sentí su sonrisa y beso mi cabello.

- supongo que debo dejarte dormir.- asenti como pude, mi cuerpo estaba inmóvil- duerme nena.

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Desperté y Cris no estaba a mi lado, aún estaba oscuro, se iría pensé, levanté la vista y allí estaba en el balcón de la habitación, solo tenía un boxer puesto. Me levanté, sentí un poco de dolor en mi parte baja, enrrolle la sábana a mi cuerpo, camine hasta el balcón y lo abrace por detrás.

- que haces acá?

- nada nena, dormí en el día y por eso no tengo sueño- se volteo y me abrazo- porque no regresas a la cama has de estar cansada aún.

- porque tú no estás en la cama- sonrió- y hace frío.

- eso lo podemos resolver- beso mis labios solté la sábana y lo abrace profundizando el beso- hey no quiero lastimarte.

- estoy bien.- sonrió acariciando mis mejillas

- eres preciosa, no me apetece que otras personas te vean desnuda, así que adentro.

Camino hacia la habitación aún abrazándome, besé su pecho acariciandolo, sentí la cama detrás de mi, el me recostó con cuidado y se acomodo entre mis piernas. Me beso suave con cariño, y bajo a ver mi punto más débil, tocandome.

- te ves bien.

- cris- chille tapando mi cara.

- ohhh nena, ya conozco más está parte que tú.

sus dedos empezaron acariciarme, entraban y salían de mi causando un sensación muy excitante, mis gemidos se hicieron presente, pero el me beso para callarlos.

- quédate conmigo- sus palabras me confundieron.

- estoy contigo Cris- sus besos bajaban por mi cuello hasta llegar a mis senos.

- siempre.

Mordió mi pezón, un pequeño grito escapó de mis labios, su mano seguía haciendo magia, ya estaba muy mojada, se acomodo y lo sentí entrar completamente en mi, dolió un poco pero la excitación era mayor, sus embestidas eran rápidas y fuertes, sus músculos estaban mas tensos con cada embestida. Empece a sentir ese hormigueo en mis piernas ya era familiar.

- vamos nena correte para mi- beso mi cuello y apretó mi cadera, ese fue mi detonante.

- ohhh Cris- las palabras salieron en un gemido, mientras el orgasmo explotaba haciendo estremecer mi cuerpo por completo.

Cris dió un par de embestidas más y se corrió dentro de mi. Apoyo su cabeza en mi pecho, acaricie su cabello intentando regular mi respiración. Pocos minutos después salió de mi y se acostó a mi lado abrazándome.

- estas bien?

- si, muy bien, y tu?

- bien- beso mi cabello.

- Cris de verdad estas raro.

- raro, como así?

- no se, pasas de estar cariñoso a estar como distante- el suspiro y eso me asusto intenté moverme pero el me apretó a su cuerpo.

- puede que las cosas apartir de hoy no sean fáciles, no se si tú aguantaras, pero espero que sí- dijo totalmente serio.

- no entiendo, a qué te refieres- me confundió mucho esa respuesta, sentí un presión en mi pecho.

- tengo mala fama de mujeriego, y no lo voy a negar lo fui, le fui infiel a Irina por mucho tiempo, fue una etapa mala en mi vida, aparte soy uno de los mejores futbolistas del mundo y es mucho lo que hablan de mi.

- no entiendo cristiano eso que tiene que ver conmigo, me serás infiel a mi.- me senté en la cama viéndolo, porque sale con esto ahora, el nudo en mi garganta se hizo presente.

- no nena, no pienso serte infiel, es solo que lees los comentarios, y parece que te afecta la opinión de la gente, y por más que te digo que lo ignores, no lo haces- suspiro - ahora está confirmado ante el mundo que estamos juntos y no se que inventaran de mi en los próximos días, no quiero que se vea afectada nuestra relación...

minha vida (Cr7)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora