_Capítulo 12_

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Jeon solo conducía en silencio, mirando al frente, no quería seguir preguntando, pues sabía que lo que estaba sintiendo su compañero era una confusión, y tal vez seguir insistiendo muy profundamente lo confundiria más.

Al cabo de unos minutos, llegaron al departamento del grupo femenino de la nación, donde frenaron, y Suga se dio vuelta a ver a la peliverde.

— Dahyun, levántate, ya llegamos — Avisó, usando un tono de voz elevado.

— No quiero — Se quejó Kim, acurrucandose más en donde estaba acostada.

— Dahyun, hablo en serio, ya llegamos, levántate — Insistió, moviendola para que le hiciera caso.

— Ahh, que amargado eres — Bufó sentándose en el asiento.

— Si si, también puedo ser tacaño, lo que quieras, pero ahora debes volver a tu departamento, anda — Repitió, señalando la salida.

La de tinte alocado lo vio con los ojos entrecerrados, se levantó, salió del vehículo y pasó por su lado, todo sin dejar de verlo amenazadoramente.

— ¿Se supone que eso me debe dar miedo o algo así? — Se burló el mayor, riendo ante la cara de indignación que puso la más pálida.

— Mañana sabrás — Finalizó, dándole una última escaneacion de arriba a abajo — Bye bye cuñado — Se despidió de Kook antes de entrar corriendo a su hogar.

— ¿Cuñado? — Rió Jungkook.

— Solo vámonos por favor — Pidió el Min, undiéndose más en su lugar.

— Como digas, tonto enamorado.

Mientras ellos se dirigían a su casa, Dahyun por su parte estaba entrando a la suya.

Por ahora no había nadie, lo cual le daba tiempo para relajarse un momento y aclarar su mente. Fue a la habitación que compartía con el resto de la maknae line, y allí se cambió de ropa por su pijama.

Se tiró a la cama, sintiendo sus piernas y pies super cansados, aunque su cabeza no le prestaba mucha atención a ese asunto, solo pensaba en el rapero del grupo masculino, era un sentimiento, relativamente nuevo, le gustaba estar con él, más bien le gustaba molestarlo, verlo como se pone rojito cada vez que le dice algo cursi, sin dudas no tiene precio.

Sonrió como tonta, soltó un suspiro, negó con la cabeza, y se acomodó mejor en su lugar, tapándose con las frasadas hasta los hombros, quedándose dormida al instante.

En el departamento de BTS~

Suga se dirigió a su estudio, sentía una pequeña sensacion extraña, algo que pensó que se iría al escribir una canción, pero le fue imposible, debido a que no lograba concentrarse en lo absoluto.
Solo pensaba en la pequeña chica de piel muy pálida, aquella de cabello verde y actitud revoltosa, esa que tantos estragos estaba haciendo en él.

Se rindió, y soltó el lápiz, disponiéndose a pensar en lo que le preguntó Jungkook.

¿Estaba enamorado de ella?, claramente no, el amor es algo que no se consigue tan fácil, no se debe tomarlo tan a la ligera, uno no se puede enamorar de la tarde a la noche tan fácil.

¿Ella le gustaba?, tal vez si, el hecho de que le guste no significa que quiera algo con ella, definitivamente no, o bueno, eso quería creer.

¿Le atraía?, muy seguramente si.

Y es que no lograba entender qué fue lo que hizo, cómo logró hacer que a él le dieran ganas de buscar el estar con ella todo el tiempo.
¿Fue un embrujo?, tal vez, aunque ya nadie usaba esas cosas hoy en día.

— Solo ve a dormir, todo estará mejor mañana — Fue lo mejor que pensó.

Se levantó de su silla giratoria negra y fue a su habitación, se tiró en la cama, cerrando los ojos, tratando de dormir, fallando en el intento, consiguiendo lograrlo una hora después.

Al día siguiente~

Nueva mañana, nueva tarde, ¡nuevo día!.
¿Que tiene de emocionante eso?, ¡exacto!. Nada.

Hoy las dos raperas de TWICE, y los dos raperos de BTS se volvían a dirigir a la empresa, tratando de prepararse para la lección - innecesaria- del día de hoy.

— ¿Crees que aprendamos algo nuevo? — Inquirió Kim mirando a su amiga.

— No lo sé, sinceramente me sigue pareciendo raro que JYP contrate a otros idols para darnos tutorias, digo, por favor, tenemos tutores certificados para eso, además de que en predebut ya nos preparamos lo suficiente para saber hacerlo, no tiene sentido... Pero en fin, que le vamos a hacer — Suspiró ChaeYoung al volante, mirando atentamente la carretera.

Dahyun optó por no decir nada más, contestando con un diminuto suspiro, pues ya habían llegado a su destino, y sabía perfectamente que si seguía hablando, ambas iban a iniciar una charla larga la cual tal vez no acabe muy rápido.

Subieron por las escaleras a la sala que les habían indicado debido a que el ascensor estaba fuera de servicio.
Por lo visto habían llegado antes que los muchachos, asique ahora les tocaba esperar.

— Tigger, ¿jugamos algo? — Propuso la mayor, tirándose como peso muerto en el suelo.

— Yo también quiero jugar — Habló una voz masculina a sus espaldas.

Las dos jóvenes se dieron vuelta, viendo a sus Sunbaes en la entrada, quienes se veían tan bien como todos los días, relucientes e impecables, como sacados de un comercial de cosméticos.

—Bien, ¿empezamos? — Dijo Namjoon, quien se arrepintió al instante, luego de recordar que le había prometido unas clases de inglés en lugar de rap a la pequeña Son.

— Andando, mientras más rápido lo hagamos será mejor — Animó la de ojos chinitos.

Se sentaron en un círculo, al cual no se les unió el moreno, pues este estaba parado meditando un poco cual era su opción, ¿rap o inglés?, ¿trabajo o amigos?.

¡Solo elige lo que quieres hacer y ya!.

— Chae, ¿me acompañas a la cafetería?, quiero comprar algo para comer — Mintió el joven, tratando de disimular sus nervios.

— Oh, este... De acuerdo, vamos —Cedió ella, levantándose de su lugar y saliendo con él.

Nuevamente, los aficionados a las siestas, se quedaron solos en aquella vacía sala de ensayos, pero que de alguna manera, no se sentía tan vacía.

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_Tutorias De Rap_ © Bangtwice ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora