-¡Pase!
-. . .
-¿Eh? ¿Malek? ¿Que haces aquí? ¿Viniste a seducirme en la noche? ¿Por fin aceptaste mi propuesta de acostarnos?.- con una actitud arrogante y confiada siguió peinando su cabellera.- ¡. . .!
Lo que menos se esperaba era que el pelinegro lo asaltara robándole un beso de sus labios.
"¿¡Q-Que!? ¿¡Malek!?" Pensó el rubio sorprendido.
-¡Mhn!- Este aparto un momento al peliengro de si mismo.- T-Tu. . .¿¡M-Me besaste!?- Lo miró sorprendido.
Este solo se quedo callado y volvió a juntar sus labios con los del rubio, levantandolo de la silla a sus brazos.
"¡Esta pasando realmente! ¡Besa tan bien~~!"
-¡Mnh! ♡.- no importaba el porqué, solo disfrutaba de la sorpresa.
Aquello le había dado un gran susto. Fueron un millón de invitaciones indecentes a su cuarto en el pasado, y ahora estaba complaciendo sus deseos por completo.
Su cuerpo cargó el del príncipe mientras sus piernas se enrollaban en su cintura mientras sus besos ardían en pasión.
Estos cayeron en la cama mientras seguían besandose con pasión.
-¡Ah! Que agresivo~- Río cuando el mayor le quitó la bata bruscamente y comenzó a lamer sus pezones.- ¡Mhn~!
Sin mediar ninguna palabra, sus manos ni dudosas ni vacilantes tocaron aquellas partes que queria de forma traviesas. Su cuello, sus pezones y su pene, felices provocándole arcadas sensuales de gusto culposo y pecaminoso. Suavemente dejó salir su miembro para colocarlo en sus muslos, frotándose con el del rubio.
-Ah, tiene un buen tamaño~- Dijo mientras se mordia el labio.- ¿Porque tanta prisa Malek? Quiero jugar con "eso" antes de tenerlo adentro~- Acarició el pecho del mayor.- Ni siquiera te has quitado la ropa.
- Quedate callado. Deja que te lo haga. ¡Hey!
- Permite que tu majestad te desnude ♡ .- dijo con una risa coqueta.- Ah.... esto quiero tocarlo.
-. . .- este vio la mano del rubio masturbando su pene.- Haa...~
-Que caliente y majestuoso. En verdad quiero que me lo hagas.- Susurró mientras terminba de desnudar al chico y tiraba sus ropas por la habitación.- Acuestate, lo pondre en mi boca para ti~
"¿Una felación? ¿Realmente va a darme placer con su boca? Eso me recuerda cuando estaba en el harem, las mujeres nunca se ofrecieron a hacer tal cosa por voluntad propia. '¡Es enorme!' Decían. '¡Me va a doler la mandíbula! Decían. Si acaso solo lo humedece con su boca... si, asi. Algo como eso. Y sera todo... espera, ¿que hace? ¿¡Que!? ¿¡Enserio lo meteras en tu boca!?"
-¿Porque estás tan nervioso? ¿Nunca te han hecho uno?- Río mientras lamia todo su miembro.- No te preocupes, soy bueno en esto.- dijo y comenzó a hacérsela.
-¡Ngh!- "¡No puedo creer que verdaderamente lo está haciendo!"
- Mnh...~
Sus labios suaves como la seda se envolvían de forma agradable en la piel de su miembro mientras poco a como hacia succión. Aquel príncipe lascivo se sentía como en el cielo teniendo todo aquello para el solito, y más aun propiedad del amor de su destino.
-¡. . .!.- con los ojos cerrados y dejando salir algunos gemidos, yacía el pelinegro acostado en la cama del príncipe.
"¡Ah! Se siente bien...N-No me quiero correr..... Quiero disfrutarlo más..." habló su instinto de hombre.
-¿Te esta gustando, Malek? Esto esta goteando mucho~- Río al acariciar su sensible punta.
-A-Ah~~- Echo su cabeza hacia atras.
-¿Ves? Podías disfrutar de esto hace mucho pero te resistias~- Río mientras volvia a hacee su trabajo.
- A-Ahn.... espera un momento... ¡Mnh! ¡S-Siento que me voy a correr....!.- dijo un tanto inquieto mientras se avergonzaba a si mismo de ser tan escandaloso, no seria para más en su primera felación. Deseperado intentó jalar de su cabello dorado.- ¡D-Dejalo!
-¡Ah~!- Este solto un gemido al sentir los jalones en su cabello.- ¿Cuál es el problema? Solo relajate y correte en mi boca. Es una orden~
- ¡No me puedes orden- ¡AH! ¡Otra vez!.- mientras se quejaba podia sentir como la boca del principe se sentia mojada y su lengua se deslizaba torturosa sobre su glande hinchada.- ¡Mph!
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Sha'er: Tierras Conquistadas - Colección II Reinos Antiguos
General FictionCANCELADA No spoiler. Advertencia: esta historia contiene escenas de sexo duro, humillación, bondage, sadomasoquismo y algunos otros fetiches sexuales. Al entrar usted acepta leer esta historia homosexual bajo su propio riesgo y con la debida discr...