- ¿Que es lo que tanto hablan?.- alzó una ceja disgustado mientras suavemente golpeteaba el latigo con su mano.- Mas importante, ¿Esta listo el desayuno?
- ¡S-Si majestad!
- Llevenlo inmediatamente.
- Seguro...
- Quiero que Malek tenga una comida especial, para curar sus heridas.
-¡. . .!- Estas dos se tensaron al escuchar eso. ¿Que le había hecho aquel príncipe?
-¿Acaso no oyeron? ¡Larguense!- Exclamó hacia las dos chicas.
- ¡Eek! ¡Si majestad!.- respondieron las chicas mientras el principe pasaba de ellas y simplemente se disponian a seguir con sus tareas.
-¿Q-Que le habra hecho a Malek?- Susurro la pelirroja con miedo.
-Es mejor que no se vuelvan a ver por ahora. Es un riesgo muy grande.
- Yo le llevare la comida.
- Supongo que eres la más indicada para hacerlo, ya que el príncipe tiene otra concepción de mi.. asi que me parece la mejor opción...
- E-Esta bien. Ire con cuidado a entregarle la comida.
-Bien, vamos a preparle la comida.. . .
Este estaba en su habitación. Se habia colocado unas cremas para las heridas.
-Ese Yndra. . .Me terminara matando.- Susurró.
- M-Malek....
- ¿¡Hayid!?
- N-No te asustes, vengo a traerte una comida especial para tus heridas. Tranquilo.
- ¿Tu la hiciste para mi? Eres una dulzura....
-El principe nos ordeno hacerlo. . .- Se acerco con la bandeja.- Lo siento, no debi haberte puesto en posición.-
- Estoy bien, no fue tu culpa. Yo tambien deseaba hacerlo.- dijo el pelinegro mientras abría la puerta.
- No puedo estar mucho tiempo aquí pero aquí te dejo la comida.
- Muchas gracias por tu amabilidad.- Rápidamente entregó un mensaje para ella.
-Nos vemos luego.- Sonrió suavemente y se fue de allí.
-Hayid es tan dulce. Tan diferente al pequeño demonio ese.- Suspiró mientras se sentaba a comer.
"Inclusive ese tipo ni se preocupó en golpearme el pene.... ¡Puedo quedar esteril! ¡Y yo aun deseo tener hijos!" Pensó seriamente.
- No puedes estar ahi solamente esperando que sea obediente.
- ¿Oh? ¿Ahora estas hablando solo?.- dijo detrás de la puerta el príncipe Zhane.
- ¿¡Q-
- Tranquilo, solo vengo a dejar un mensaje para ti. Escuchalo con atención, mis tropas invadiran las tierras del este de Sha'er. Iremos en 2 noches y espero que acompañes a tus hombres....
-. . .- "¿Enserio me estás pidiendo eso?" Alzó una ceja incrédulo.- Bien, como ordene.
-Hmph, preparalos bien.- Se terminó de acomodar su ropa.
- A sus ordenes.
- Estoy completamente seguro de que podras manejar bien a tus hombros. Iremos por algo mas valioso que el mismo opio.
-¿Puedo saber que es?- Preguntó
-Lo sabrás a su momento, solo sigue mis ordenes.- le dio la espalda.- Trata de no hacer enojar a Yndra de nuevo. Veo que ya probaste su látigo.- se burló
- Un par de veces.
- Bazhar me dio este frasquito para Yndra pero tu puedes usarlo para vengarte de el.- le dijo picaro.- Es una droga de placer.
-¿. . .?
-No me mires asi, soy hombre tambien.- Le guiño un ojo.- Bien, nos vemos luego. Se inteligente y usalo bien~
Este se quedo mirando la botella cuando el príncipe se fue.
"Pequeño demonio, me vengare de ti." Cuando este chico volvio al campo, avanzó lo mas que pudo en aquellas tierras. Lo unico que faltaba era que crecieran.
- ¡Ya casi es hora!.- dijo corriendo a la cocina.- Shiria, preparame pan arabe y vino.
- ¿Eh? ¿Estas seguro? Yo no-
- Es para Yndra. Estare con el en esta noche.
-¿¡Ehhhh!? ¿Despues de lo que te hizo?- Lo miro sorprendida.
-Tengo que contentar a ese diablo de una u otra manera. No quiero que mis "partes" sufran.- Levanto los hombros.- Tal vez con esto se le vaya el mal humor.
- E-Esta bien.- dijo ella mientras aun estaba preocupada viendo las heridas de Malek.- ¿Estas bien? Esas heridas de látigo se ven horribles... espero que puedas contentar a Yndra, parecia de mal humor.
-Por eso mismo debo alegrarlo. Pensaba que era solo un juego de niños, pero puede llegar a ser más cruel de lo que esperaba.- Respondió.- Una vez que recuperemos el trono, lo haré mi concubina para humillarlo~
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Sha'er: Tierras Conquistadas - Colección II Reinos Antiguos
Fiksi UmumCANCELADA No spoiler. Advertencia: esta historia contiene escenas de sexo duro, humillación, bondage, sadomasoquismo y algunos otros fetiches sexuales. Al entrar usted acepta leer esta historia homosexual bajo su propio riesgo y con la debida discr...