Capitulo 32: Mosmorde.

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Le di otro bocado a mi pastel de queso. Estaba confundida, demasiado confundida. ¿Cuándo fue que los sentimientos de Zora hacia mi comenzaron a ser así? Obviamente yo no respondía a sus sentimientos, por favor, puedo decir que soy 100% heterosexual ahora mismo. ¿Pero en que momento Zora decidió convertirse en lesbiana? Reí un poco. Era todo tan extraño. Si me hubiera dicho las cosas desde un principió nada de esto hubiera pasado. No habría entrado en detalles cuando de Draco se trataba.

¡Pero era tan confuso!

Zora había sido una especie de consejera del amor cuando tenía problemas con los chicos, en especial con Draco o incluso con Theo. ¡Ella me había acercado a Theo! De cierta forma... No tenía ningún sentido esto. Nada. No lo tenía.

- ¿Has tenido experiencias lesbicas y no me has dicho? - oí la voz de Draco con un deje de burla junto a mi.

- Solo un par de veces – dije soltando una pequeña risa. Mejor reír que llorar.

Draco se sentó a mi par al pie de la escalera de algún pasillo desierto que había descubierto hoy. Me miró con una extraña sonrisa en sus labios que no supe interpretar, mientras me tomaba de las manos.

- ¿Cuándo? - preguntó interesado.

- Pues – dije empezando a recordar – supongo que empezó el año anterior. Zora y yo hacíamos pijamadas entre nosotras dos, nos reuníamos en la casa de alguna. Ella era de Serpiente Cornuda y yo Pukwudgie, entonces ella venía a mi habitación o yo a la de ella. Teníamos un profesor, Harriet, que tenía un armario lleno de bebidas. Entrabamos por las noches a robar un par y nos emborrachábamos en las pijamadas. Y un día, Zora me beso. Como no entendía nada simplemente le seguí el beso y eso se repitió varias noches más, a veces la única borracha terminaba siendo yo mientras que Zora estaba consciente. Nunca le di gran importancia, solo estábamos experimentando – reí – pero supongo que debí haberme dado cuenta.

Draco permaneció callado, con una sonrisa juguetona en los labios. Eso no podía ser buen augurio, nunca es buen augurio cuando el sonríe así.

- ¿Sabes? - dijo luego de un momento – suena hasta excitante.

- Oh, Draco – me quejé escondiendo mi rostro entre mis piernas.

- ¿Qué? - dijo en medio de una risa - ¿nunca tuvieron relaciones?

- No – dije molesta.

- ¿Ni siquiera un dedo? - dijo enseñando el dedo indice.

- Oh, vamos – volví a protestar viéndolo reír.

- De veras, suena excitante.

- No tendremos tríos, Malfoy. Te lo digo desde ya – dije en tono de advertencia.

- Eso es decepcionante – dijo e hice ademan de levantarme e irme enojada, pero el me abrazo por la cintura para retenerme – mentira, mentira, mentira.

- Te odio – murmuré haciendo que se ría de nuevo. Me hacía molestar y se divertía, y eso me hacía molestarme más.

- Ya esta, no más chistes – planto un beso en mis labios – te amo.

- Yo igual – dije entre dientes.

- Pero considera lo del trío – volvió a reírse de mi cara enojada.

Me levanté de allí a grandes zancadas mientras oía como me seguía diciendo cosas lindas para que me calmara. Era un idiota, pero así lo amaba. Lo amaba demasiado.

***

- ¿Cómo te sientes? - preguntó Hermione sentándose en el sofá continuo.

No debiste volver | [D.M]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora