No debiste volver | [D.M]

Capitulo 16: Sólo esta noche.

Era consciente de lo que estaba haciendo y de lo malo que era. No porque Draco sea mal chico, sino por todo lo que había sucedido. Era débil. Estaba siendo débil ante él y lo sabía perfectamente pero no entendía el por qué. O tal vez la respuesta era tan sencilla y malditamente estúpida que me negaba a querer aceptarla aunque ya lo había aceptado hace tiempo.

Mis dedos acariciaban las frías paredes del castillo. Había pasado tanto tiempo desde la última vez que lo bese, no había olvidado como eran sus besos, siempre dulces y juguetones. Pero esta noche pude notar cuanto había mejorado y una parte de mi agradeció muy en silencio que haya sido así de conquistador para tener más experiencia al besar pero la otra parte estaba molesta por imaginarme con cuantas tuvo que estar para lograr besar como si fuera un maldito experto. Siempre fui consciente de su fama como rompe corazones pero nunca me había molestado del todo, algunas veces lo había aconsejado con sus ligues y él a mi también sin que los sentimientos interfirieran del todo, claro que algunas veces moría de celos. Bueno, siempre. Pero no podía hacer nada más que hacer lo mismo que él hacía, así fue como me convertí en esa pseudoperra. Todo por querer causarle lo mismo, aunque nunca sabré si funcionó o no. Y ahora ambos seguíamos igual, pero yo estaba tan completamente enamorada de él que no me importaría dejar esa vida atrás. Sin embargo, aún resonaba en mi cabeza eso de que solo quería follar conmigo. ¿Y si eso era cierto y todo esto era alguna especie de plan para lograrlo? Creo que en alguna parte de mi, desde el comienzo supe que esto sería un problema y se que luego de esto había probabilidades de que sufriera y sería mi culpa por ser tan ingenua, pero algo que tengo en claro siempre es aquello que papá alguna vez menciono.

"¿Qué es la vida sin un poco de riesgo?".

Y entonces aquí estoy, caminando por los helados pasillos de la escuela con mi mano recorriendo las paredes de piedra, a punto de arriesgar mi salud mental por un chico del cual sabía que de un momento a otro cambiaría de parecer. Pero esta noche, solo por esta noche, me arriesgaría a amar sin preámbulos.

El sonido de unos zapatos replicar llegaba por detrás de mi. Me había encontrado, tal y como había dicho.

- Lamento haber tardado – dijo a mis espaldas, acercándose cada vez más – ese imbécil de Snape me retuvo.

Dejaría a mi mente olvidar que era una mala idea.

- Aadhya – dijo acercándose a mi a medida que yo me alejaba - ¿te ocurre algo?

Volteé a verlo. Su rostro se veía desconcertado y en su mano tenía una varita que iluminaba aquel pasillo de luces tenue. Sonreí haciendo señas con mi dedo diciendo que se acercara, lo cual hizo. Luego, y tomándolo por sorpresa, comencé a correr.

- ¿Qué? - oí que dijo - ¡Aadhya espera!

Entonces oí que comenzó a correr detrás de mi. Lance un risa, sabía que se molestaría luego de eso. Supongo que aquel impulso fue algo que estaba ansiando allí detrás de la cortina, quería salir corriendo porque sabía que era algo imprudente. Pero lo quería cerca a la vez.

Con mis manos apuntando hacia la puerta hice que estas se abrieran de manera silenciosa y corrí fuera del castillo con Draco aún detrás de mi. No tenía idea de donde dirigirme ahora entonces me detuve, sintiendo como el rubio de ojos grises se acercaba cada vez más a mi y antes de que llegara, visualice a los invernaderos no muy lejos así que volví a emprender mi recorrido.

- ¡Te odiaré por siempre, Aadhya! - oí que dijo y reí entrando a uno de los invernaderos.

Barrí la habitación con los ojos. No parecía haber plantas peligrosas, por suerte, tal vez era el que usaban con los de primer año. Recorrí los estantes con plantas silvestres inofensivas hasta llegar al otro lado de la habitación.