•Venganza•
CapriAlek y yo nos encontrábamos sentados en los sillones puff que encargué por internet para mi nueva casa del árbol. Observábamos sus paredes de madera ya listas mientras, achicando uno de nuestros ojos, intentábanos encontrar el lugar perfecto para la pequeña colección de libros románticos que compré.
—Ahí es perfecto —señaló.
Negué con lentitud.
—Ahí no estarán tanto a la vista.
—Y eso es perfecto, nadie quiere leer novelas románticas.
—Discúlpame, pero estabas muy emocionado con amor eterno. Tanto, que rogabas capítulos extras.
—No me hables de ese libro. Leíste cuatro capítulos sin mí, me traicionaste y me tienes muy decepcionado —dijo, haciéndose el digno.
—Bueno, si me quieres hacer hablar, al menos yo leía un libro mientras tú besabas a tu ex.
Dejó caer su cabeza sobre el puff rosado en el que se encontraba y soltó todo el aire contenido en sus pulmones.
—No tienes por qué mencionar eso.
—Estoy molesta, Alek.
—¿Por qué me llamas Alek? —recriminó.
—Porque así te llamas. —Me encogí de hombros con basta tranquilidad, continuando la búsqueda perfecta del estante.
—Me llamo Aleksanteri, y tú prefieres llamarme así.
Me levanté del puff blanco y caminé tres pasos hacia el frente para señalar con ímpetu y emoción.
—Aquí colocaremos los libros. Ya solo resta saber dónde pondremos la alfombra, pero en definitiva va ahí. —Señalé y sonreí antes de dar unos cuantos aplausos—. ¡No puedo creer que la casa por fin esté casi lista!
Una reluciente sonrisa apareció en su rostro de porcelana.
—Podremos leer el libro aquí, aún faltan varios capítulos, y deberás regresarte a los que no escuché —advirtió.
—Mejor te los platicaré. Sucede que a Perla le obligaron a salir en una cita con un nuevo personaje llamado Fausto, quien en realidad solo...
—No, yo quiero la versión completa.
Un suspiro de derrota apareció; este hombre era imposible. Pero la verdad es que me encantaba que «Aleksanteri y Caprichos» estuviesen de vuelta. Lo extrañé, y tuvo la oportunidad de explicarse. Aunque seguía molesta, especialmente por haber decidido acercarse a Amber mientras se alejaba de mí; pero si sus palabras eran honestas, que casi estaba segura de ello, merecía otra oportunidad. Y yo quería dársela.
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LA PRIMERA VEZ
Teen FictionLa vida está llena de primeras veces. Algunas maravillosas, otras buenas, y unas quizá no tanto. Capri lo sabe muy bien, y a pesar de ello se mantiene firme en su decisión. Son catorce cosas que debe hacer en seis meses, y aunque no lo contemplaba...