Jeonghan no tenía mucho sobre lo que quejarse. Vivía bien, tenía un excelente trabajo, un matrimonio ''estable'', nada le faltaba.
Lo mejor de su matrimonio, era sin duda su amante.
Joshua era su esposo pero este no cumplía con ninguno de los deberes. Demasiado clásico, el hombre solo usaba dos posiciones en la cama y no le gustaba hacerlo en otro lugar que no fuera su habitación. No es que el sexo fuera malo, pero tampoco era espectacular.
Y eso fue cuando hubo sexo, porque ya no había.
Jeonghan quiso experimentar, quiso probar muchas cosas en la intimidad pero el otro no compartía la idea; siempre se había negado.
¨Que no moleste entonces¨ pensó Jeonghan las primeras veces que estaba con su amante. Choi Seungcheol.
Este era todo lo contrario a Joshua. Cada vez que Jeonghan quería intentar algo, decía que sí; incluso, él mismo sugería cosas. Era más rudo y juguetón en la cama, sabía cómo manejar perfectamente al rubio y hacerse con el control. Jeonghan lo amaba.
Aunque un poco de culpa siempre invadió al pobre, sabía que no era correcto que hiciera eso.
– Hola, precioso – le saludo extendiéndole una rosa como regalo de bienvenida. Esa era otra cosa. Joshua no le daba algún detalle o regalo.
Sabía que su matrimonio era arreglado, pero al principio de este Joshua era todo un galán, le daba regalos, lo trataba con amor y tenía muchos detalles que lograron que Jeonghan comenzara a sentir cosas por él.
Claro que todo cambio cuando le consiguió un amante a su esposo. Pelearon mucho, Jeonghan se sentía traicionado y este último solo le había dicho que aguantaran un poco para poder heredar la compañía de su padre, conseguido esto, se divorciarían.
El sentimiento de culpa desapareció por completo y llegaron al acuerdo de no molestar en la vida del otro.
– Hola, amor – Jeonghan tomo la rosa, rozando el rostro del peligris con la flor. Amaba acariciar el rostro de su amante, era precioso y encantador – ¿Por qué no fuiste tú mi matrimonio arreglado?
Tarde se habían dado cuenta que sus padres habían planeado juntarlos pero habían concluido que ninguno se llevaría bien, por sus personalidades opuestas y cancelaron el trato. Joshua era más parecido a él y pensaron que tendrían más química, nunca pensaron que las cosas se iban a dar así.
– Porque ser tu amante también es divertido – Seungcheol lo tomo por la cintura, acercándolo para hacer lo que quiso hacer desde que su novio llegó: besarlo.
Pasaron unos cuantos minutos allí, simplemente besándose. Poco a poco, la intensidad subía, mordidas eran repartidas entre los dos. La delicadeza fue puesta aparte, reemplazada con rudeza, a ambos les gustaba ser tiernos pero más les gustaba ser bruscos, juguetones.
– Tengo algo planeado para hoy, bebé – hablo Seungcheol mientras le quitaba el suéter y lo guiaba hasta su habitación.
– Cuéntame – Jeonghan ayudaba en su labor a su amante, quitando el mismo sus zapatos y abriendo sus pantalones.
– Prefiero que sea una sorpresa – llegaron a la cama del mayor, quien empujo a Jeonghan en esta. El rubio se veía exquisito, a opinión de Seungcheol.
Sus pantalones abiertos dejaban entrever la lencería masculina que portaba Jeonghan, tenía una franelilla blanca, la cual se levantó hasta dejar ver su abdomen (que tenía las marcas de los dedos de Seungcheol de un encuentro anterior en la cintura). Tenía la respiración agitada y los labios hinchados, haciéndose ver desesperado por el toque del mayor.
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30 Days Smut Challenge - Jeongcheol
FanfictionEl título lo dice todo. - Seungcheol top - Jeonghan bottom