Buenas, buenas, aquí aparezco con otra actualización. Si ven algún error, por favor, háganmelo saber, no hay ningún problema.
Como siempre, espero que estén bien, que disfruten de la lectura y que hayan muchos momentos de homosexualidad en su vida.
A Jeonghan le parecía gracioso (y a veces molesto) lo cerrada que era la gente en cuanto a la sexualidad. Y no lo malinterpreten, él sabía perfectamente que cada persona era un mundo y vivía su sexualidad de la manera que quisiera. Lo que a él le jodía era que quisieran implantar sus normas en la vida sexual de Jeonghan y Seungcheol.
—Dinos Hannie, ¿Seungcheol es de esos que les gusta dominar? —preguntó Miyeon. Su jefa era una persona tan curiosa que rozaba lo imprudente, a Jeonghan solía agradarle cuando no era él el blanco de sus preguntas. Afortunadamente, no había clientes en ese momento.
—Obviamente que es así, —habló Calvin, su compañero de trabajo, quien sólo hablaba cuando el tema eran chismes— ¿acaso te imaginas a Jeonghan siendo el activo? Lo veo imposible.
—¿Por qué lo ves imposible? —curioseó Miyeon— Una cosa es ser activo y otra cosa es ser dominante.
—Pues es obvio que Jeonghan no es ni lo uno ni lo otro —Jeonghan quería saber en qué momento dejó de participar en la conversación a ser solo un espectador—. ¿Has visto a Seungcheol? No te molestes hermano, pero ese hombre es la definición de dominancia, no me lo imagino recibiendo órdenes de nadie. Tiene un aura tan poderosa que ni yo me atrevería a cuestionarlo y fíjate que me despidieron de mi último trabajo porque mandé a chupar penes a mi jefe.
—Calvin, la gente vive su sexualidad diferente de su vida diaria. Aquí donde me ves siendo la jefa de ustedes dos, prefiero que sea Minnie quien lleve las riendas.
—¿En serio me estás diciendo que hay la posibilidad que Jeonghan, con cabello rubio y largo, su carita tierna y esa voz tan dulce, sea activo y dominante? Ni de coña.
—Es muy interesante ver cómo intentan adivinar mi rol en la cama con Seungcheol, pero —señalo la puerta donde el susodicho estaba de pie, esperándolo—, hablando del rey de Roma, ya llegó por mi. Hasta mañana.
Los otros dos se despidieron, saludando al pelinegro. Lo último que Jeonghan escuchó fue a Calvin.
—¿En serio crees que ese motociclista con pinta de matón se dejaría dominar por Hannie?
—Hola, hermoso —lo saludó Seungcheol, dándole un beso rápido. Le quitó su bolso para guardarlo en el pequeño compartimiento de la moto y le tendió el casco.
—Hola, Ddadu —saludó de vuelta. Seungcheol se quedó quieto por un momento, observando a su novio durante unos segundos y luego asintiendo. En cuanto Jeonghan se subió a la moto y lo abrazó para sujetarse, arrancó hacia su hogar.
—Amo verte así, te ves exquisito.
—Me alegro que le guste, amo. Sabe que solo vivo para servirle.
—¡Oh! Por supuesto que solo vives para esto, Daddu. —Le sostuvo la barbilla para asegurarse de que lo viera directamente a los ojos—. Tú meta en la vida es complacerme, nada más.
Observó al pelinegro con detalle, admirando al hombre y su posición. Estaba arrodillado a los pies de la cama, totalmente desnudo y expectante a lo que sea que Jeonghan hiciera con él. Sus manos sujetaban el somier por órdenes del rubio y tenía la mirada gacha después de que Jeonghan lo soltara.
ESTÁS LEYENDO
30 Days Smut Challenge - Jeongcheol
FanficEl título lo dice todo. - Seungcheol top - Jeonghan bottom