Resiliencia Sempiterna | COMPLETA

d i e z

Hola!! ¿Alguien leyendo que se manifieste? Muchas gracias por estar aquí, solo pido un votito que me de ánimos y algún comentario, prometo no defraudar con la historia!!

Dendrofilia: amor por el bosque y los árboles.

10. El bosque es suyo.

Abandono el instituto en cuanto termina la sesión con el orientador, topándome a varios alumnos en los pasillos.

Había accedido a volver al grupo de teatro y que así mi padre abandonase la idea de querer que me casase para no ir a la universidad. Era asqueroso, horrible y demasiado encerrado en las malditas tradiciones, pero claro, este pueblo no dejaba ver más allá de lo que el mundo de hoy en día enseñaba.

Los pequeños rayos de sol que se dignaban a iluminar mi camino por el pavimento hacen que me tenga que llevar una mano a la frente, usándola de visera para observar al policía que se hallaba dando vueltas por el recinto.

Mi plan empezaba aquí.

―Buenas tardes ―yo le respondo con un movimiento de cabeza―. Directa a casa, Shirley.

―Iré a la biblioteca. Tenemos mucho trabajo que hacer, se acercan las presentaciones para las universidades y no podemos retrasarnos.

―¿Por qué no usas la del instituto? No hay mucha vigilancia por la biblioteca pública...

―Habrán más estudiantes, mis padres lo saben, les llamaré para que me recojan luego... ―muevo una mano y me agarro uno de los tirantes de la mochila.

―Te puedo acompañar ―coloca sus manos en el cinturón de su uniforme, pero yo niego―. Mantendré la distancia, es solo por tu seguridad.

Vuelvo a negar. Este policía llevaba poco tiempo formando parte del cuerpo que asistía al pueblo, pero ya conocía mi historia. Lo único que agradecía de él era la forma respetuosa con la que se dirigía a mí.

Sigo mi camino y él permanece merodeando las instalaciones escolares. Eso me da margen, no eran muchos los policías y la biblioteca ―a donde supuestamente me dirigía― no tenía vigilancia. Eran bastantes los estudiantes que llevaban yendo a ese edificio estos últimos días, por lo que nadie notaria o no mi presencia. La señora encargada de la biblioteca era una gran ayuda en esa función pues no sellaba a las personas, y menos responde acerca de quienes han o no han asistido.

El tema de mi familia lo había solucionado anoche. Avisé de que iría a estudiar tras la sesión con Augustus y, como están más receptivos desde que "volví" al grupo de teatro, aceptaron. Pusieron alguna que otra queja pues tenían miedo, pero la policía decía que todo estaba perfectamente controlado.

Había pasado una semana desde la aparición del primo de Steve, y desde ahí no habían encontrado ninguna actividad que resultase sospechosa. Se comentaba que habían encontrado a un posible sospechoso, pero no teníamos más noticias.

Trato de que nadie me vea en mi camino a la valla que siempre había solido usar. La tarea era sencilla pues nadie salía de casa si no era muy necesario. Eso me da ventaja y llego sin problemas a la zona de la valla por donde entraba siempre que quería ver a Pax, trepándola y cruzándola una vez he comprobado que no había nadie a mis espaldas.

Me siento relativamente bien cuando me vuelvo a encontrar rodeada por la gran espesura verde que conformaba el bosque. Volvía a mi lugar favorito, y vería a mí... animal favorito.

―Mierda. ―mascullo, sacando mi móvil del bolsillo pequeño de la mochila.

No había avisado a Joel... pero es que tampoco quería hacerlo. Hacia 3 días que él me visitó; o sea, se supone que desde hace 3 días me estaban esperando.