Soren había decidido que no quería ver a Marck al día siguiente, sin embargo Sarabeth ya había arreglado la cita Marck y no podía cancelarla a ultima hora.
Soren en refunfuños se metió a bañar, inflando las mejillas. Y como niño chiquito se rehusaba a salir de la bañera.
Ya había desesperado a Sarabeth, quien nunca le tuvo mucha paciencia.A muchos gritos y forcejeos, convencieron a Soren de salir de la bañera. Comenzaron a vestirlo, y este ni siquiera dejaba que su madre le pusiera una mano encima; a Marzialle nunca le gustó que Soren tratara de tal manera a su madre y ella se lo había dicho muchas veces a partir de que Soren se había hecho rebelde a los once años.
Marzialle frunció el ceño y ajustó fuerte y repentinamente las agujetas del corset de Soren sacándole todo el aire, haciéndolo sacar un gemido de dolor. El chico arqueó la espalda con unas lagrimillas por debajo de las pestañas inferiores de sus ojos. Y enseguida volvió su cabeza hacia Marzialle con el ceño fruncido. - ¿¡Porqué hiciste eso Marzialle?! Exclamó mas que molesto.
Marzialle dejó ir el aliento por la nariz, como un pequeño toro que acababa de cornar a su presa. - Te he dicho miles de veces que no trates así a tu madre.
Soren frunció el ceño mirando a Sarabeth, no dijo nada mas, estaría loco si propiciara que Marzialle tirara de las cuerdas del corset de nuevo de esa manera.Lo enfundaron en un vestido color musgo de terciopelo. El cual caia de manera tranquila hasta llegar a sus pies, Sarabeth se llevó una mano al mentón, tomando los extremos inferiores del vestido y acomodando las telas que este tenía por debajo y listo, el vestido ahora tenía una dimensión mas grande.
La blusa de este era del mismo color, y las dividía un pequeño cinturón dorado discreto y a la vez llamativo, tenía mangas largas y lisas, de un color ligeramente mas claro que el de todo el vestido.El maquillaje fue azul de nuevo en los parpados, pues era el color que mas quedaba con el tono de piel del joven.
Se miró al espejo suspirando, ahora mas que nunca quería evitar a Marck, ahora que sus sentimientos dilucidaron un poco y se hicieron mas concretos... Tenía mucho miedo de que pudiera pasar después.Salió de la casa con zapatos de piso, pues se había negado rotundamente a usar tacones, estaba cansado y lo único que quería era dormir.
Levantó la cabeza mirando a Marck, quien lucía de manera parecida a la de Soren, a juzgar por sus ojeras... Algo le había impedido dormir del todo bien a Marck.
Soren se preguntaba si era por como se había comportado con el la noche anterior.Caminó hacia el, quien lo esperaba junto a la carreta, fuera de la casa de Soren. Marck sonrió un poco, de media luna. - Buen día Eloise...- Dijo tomando la mano de Soren, apenas rozándola con los labios, por el tacto de estos, los cuales casi siempre estaban cálidos y suaves, se sentían rígidos y resecos.
Se le notaba bastante que no había pasado una buena noche. - Buen día señor Gallagher... ¿Ha estado durmiendo bien?- Preguntó Soren sin poder evitar sentirse de alguna manera preocupado por el. Marck asintió ligeramente, haciendo una mueca incomoda.
Soren abrió muy grande los ojos al mirar su gesto... No podía ser... Y si... ¿Marck se pudo percatar que el era Eloise? ¿Y si solo esta fingiendo y planeaba decirle algo?
Todo eso se esfumó cuando sintió a Marck tocar su cintura, envolviéndolo en sus brazos. Ni siquiera se percató de cuando fue exactamente el momento en el que se encontraba recargado en el pecho ajeno.
La cercanía... El calor y la colonia del ajeno fue una combinación lo suficientemente grande como para lograr que el rostro frío y blanco de Soren, tomara una tonalidad rosácea en sus mejillas. - S-Señor Gallagher... ¿Qué sucede? Preguntó sin corresponder el abrazo del todo, solo colocando sus manos en el pecho ajeno.
- Ayer me pelee con tu hermano...Soren abrió muy bien los ojos, el corazón comenzó a latirle de manera acelerada, producto de los nervios que tenían a Soren completamente amarrado en ansiedad y temor.
- ¿E-en serio?
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"El arte de la mentira"
RomanceSoren Thomas es un chico de 18 años que vive en Inglaterra del siglo XIX Con trastornos serios de memoria y un cuerpo seriamente deformado con un corset. Vive una vida monótona a lado de sus padres los cuales no tienen sentimientos de cariño por su...