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Habían pasado varios días. La temporada de fuertes lluvias había llegado al fin. Eran las ocho de la noche, mamá había llegado a descansar debido a que al siguiente día ella se iría nuevamente con el sr. Jong, a Daeyeon por motivo del trabajo.

Por lo que estaré sola con Taehyung nuevamente, no es nada del otro mundo quedarme con él. Pero sinceramente ya desearía irme lejos de aquí, y comenzar una nueva vida.

El cielo nublado era lo único que se podía apreciar a través de la ventana. Había terminado de hablar con Jimin y me pidió que mañana nos fuéramos después de la escuela a una cafetería. Al principio me negué rotundamente a ir debido a que me he estado sintiendo mal últimamente. No me siento con ganas de salir, y eso estaba más que claro, justo la semana pasada; Minjae, un chico de la escuela había estado invitando a media escuela por motivo de su cumpleaños... Jimin tenía ganas de ir conmigo, pero realmente no he querido hacer nada más que quedarme en mi casa y ver caer las gotas de lluvia a través de la ventana. Por más aburrido que fuera, a mí me hacía perder el tiempo, y por alguna razón me hacía sentir melancólica.

Miré a través de la ventana, la casa de a lado.

Solté un suspiro lastimero al recordar aquellos momentos que había compartido, claro qué para cualquiera no pueden ser la gran cosa, pero para mí era totalmente distinto. Cerré los ojos y por un breve momento sentí qué estaba a su lado, visualicé a la perfección sus facciones, sus caricias y los mínimos detalles de su vestimenta y su escencia.

Inconscientemente, llevé mis dedos a mis labios y lo toqué, pues una rara y agradable sensación me había envuelto por completo.

—YoonGi... —dije para mí misma, antes de recorrer sutilmente mi pecho y luego bajar lentamente hacía mí abdomen. Y comenzar a estimular un poco la zona.

Su suave piel blanca, sus ojos gatunos con sus pupilas dilatadas, sus labios delgados dignos a ser besados. Fue lo qué pensaba mientras me daba placer, solté pequeños gemidos cuando sentí la cavidad de mis dedos acariciar mi feminidad, con la misma dulzura y delicadeza, así como él lo hacía.

Mordí mis labios y jadeé una y otra vez tratando de llegar al orgasmo. Pero no era suficiente. Interrumpí mi momento de placer... Necesitaba algo más... Sonreí maliciosamente y me dirigí al armario...

Estaba perdiendo la cabeza.

Detrás de mi ropa desordenada, estaba lo qué hace mucho no utilizaba... abrí la caja con sumo cuidado, como sí fuera la primera vez, mi sonrisa se agrandó cuando tomé eso con mis manos... Y me dejé llevar por mis deseos húmedos...

[...]

Más tarde, cuando los animales nocturnos y el silencio de la noche se hizo presente, tomé un baño. Llené considerablemente la tina con agua tibia y jabón para crear burbujas y relajarme, después de todo. Repose mi cabeza y cerré los ojos satisfactoriamente, el agua hacía que mis músculos poco a poco dejarán de tensarse. Era justo lo qué necesitaba.

Cuando salí de la bañera me coloqué la bata de baño y me dirigí al armario para buscar mi pijama y poder dormir, esperando con ansias lograrlo con éxito ya que últimamente no lo hacía... el insomnio era cada vez más fuerte que poco a poco se hacía costumbre. Cuando por fin terminé de colocarme la ropa, me cubrí con las colchas de la cama, esperando quedarme dormida en cualquier momento. Sin embargo, no fue así.

Miré el raso cielo del techo, como sí fuera la cosa más interesante que hacer en ese momento. Solté un suspiro, mis días no eran los mismos. Me desesperaba no saber más de YoonGi, ni siquiera vivía aquí. No tenía idea de dónde podría haberse ido, lo último qué supe fue que ya se había dado de alta hace un par de días, lo supe gracias a Jimin. Pero sinceramente no entendí el por qué no volvía a casa, tenía la esperanza de volverlo a ver, al mismo detrás de mi ventana. O quizá acercarme cautelosamente a él sin sobrepasar los límites... algo casual.

Estaba totalmente arrepentida de haber hecho lo sucedido, sí hubiese sido por eso, nada de esto hubiese pasado. Que estúpida fuí. Al poco tiempo, se me ocurrió una idea –que para muchos sería algo absurdo– pero realmente quería saber de él...

Tomé el móvil y busque su número entre mis contactos... En ese momento mi corazón latía fuertemente, sentía que quería salirse. Sude frío, y un calor en las mejillas invadió todo mi rostro. Era como sí hiciera una llamada debido a muerte. Cómo sí fuera algo malo de hacer. Pero estaba decidida. No me quedaría de brazos cruzados esperando una noticia de él. Tenía la esperanza de que atendiera mi llamada como de costumbre.

Una...dos...tres ...

No atendía mi llamada.

El celular no estaba apagado, quizá él me estaba ignorando, o estaba ocupado... Entonces me dí cuenta qué sus palabras fueron ciertas. Lo "nuestro" se acabaría en el momento en él qué yo dijera que NO.

Ese día ya pasó, más bien esa noche. Una noche en dónde tomé una decisión qué me haría sentirme arrepentida.

Una última vez, solo una última vez...

Estaba apunto de colgar la llamada cuando una voz jodidamente ronca la cuál reconocía a la perfección, respondió con un “hola” quería gritar y llorar de la emoción que sacudía mi cuerpo en ese momento.

Estaba hablando con YoonGi después de mucho tiempo. Casi un mes. Y escuchar su voz.

—H-hola

—Esperaba tú llamada _____... —dijo él en un susurro.

YoonGi...

Estaba apunto de decir diversas cosas, sabiendo que podría llegar a irritarlo, pero sinceramente eso no me importaba. Pero fue interrumpida, cuando por la ventanas una luz para nada agradable –preocupante para muchos–, hizo acto de presencia. Me llamó mucho la atención.

La policía estaba aquí.

Y lo comprobé cuando tocaron la puerta haciéndome sobre saltar.

Me levanté y corrí hacia la ventana. Y en efecto, un auto de policía estaba FRENTE A MI CASA. Estaba realmente confundida. No tuve más remedio que colgarle y decir que lo devolvería la llamada. Juré que Taehyung abriría la puerta, pero pasaron minutos y él no salía a dar la cara.

No muy segura salí de mi habitación. E ir en busca de Tae, pero él estaba en el pasillo. Cuando lo ví, se miraba pálido y hasta cierto punto un poco agitado. Llevó un dedo a sus labios en señal de silencio.

—¿que está pasando? —susurré, pero no recibí respuesta de su parte. —Taehyung la policía está aquí y...

—Shhh. No digas.

—Pero-

—H-haz lo... que pido, ellos se irán. Regresa a tu cuarto —murmurró con un hilo de voz. Parecía tener... Miedo.

—Taehyung...

—Yo no fuí. Yo no lo hice, tienes que créeme. Yo no lo hice, no fui yo quien pidió que lo hiciera.

—Tae...

—Te lo juro, no tuve nada que ver en esto —esas fueron sus últimas palabras antes de estallar en llanto.

He vuelto después de 100 años casi.

Lamento mucho la demora y el capitulo tan corto, era siguiente será una largo, se los aseguro. Espero y les haya gustado, y sino lo entiendo. Gracias por leer de todas formas. 😔❤️

Hay muchas cosas que quisiera decirles, pero seguramente les dará flojera leerme, anyways. Lxs amo. Por favor manténgase a salvo, y no sé estresen con las tareas en línea como yo, por qué luego terminan llorando y haciendo cosas que no. 😔💔

En fin, cualquier error, háganmelo saber, gracias. 🤗

𝓓𝓪𝓭𝓭𝔂 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora