Capítulo 31: Talento Innato

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En un lugar muy apartado de los brawlers, un desierto cubría gran extensión del terreno, la zona robot ya es muy conocida por ser desolada, incluso en sus restantes localidades. En especial nos centramos en un pueblo de apariencia medieval, la luz lunar alumbraba apenas el tétrico paisaje, la niebla se hacía notar por las frías calles, y el silencio era abrumador, todo esto creaba el lugar perfecto para una película de terror. Un grupo de tres individuos descansaban plácidamente, o al menos dos de ellos, en la habitación compartida, un terrible sueño perturbaba el descansar de alguien...

Hace mucho tiempo...

El reino de Diantza era gobernado por un benevolente monarca, este hombre erigió un glorioso imperio desde cero, ayudado por su leal población, un hermoso reino rodeado de gran vegetación, podría haberse considerado una gran utopía más sin embargo, esas ideas nunca se realizan. Una fatídica noche, el rey cayó en cama debido a una grave enfermedad de la cual se desconocía una cura en esos tiempos, y aún en sus penurias, él se mantenía estoico, calmando a su pueblo con su gran carisma. Con el pasar del tiempo su condición empeoró, y la presión de ser líder recaía en el único primogénito de la familia real Lionheart, un joven que rozaba la edad de dieciséis años, Vitae Lionheart se convertiría en rey de Diantza. El chico carecía de muchas cualidades que poseía su padre, su mejor y única virtud era su gran inteligencia, por esto tenia miedo de no poder llenar ese gran puesto como era el de gobernante. Día tras día iba a la biblioteca del castillo, leía centenares de libros en busca de una cura o tratamiento para su padre, a veces incluso olvidaba dormir y comer. Todos sus allegados creían que estaba desesperado por mantener a su padre vivo, pero más que eso, tenia miedo de defraudar a todos, su manera de pensar siempre fue tranquila y muy analítica, eligiendo siempre la mejor opción, pero esto era con cosas pequeñas que involucraban apuestas de niños con sus amigos, no la vida de todo un pueblo. La mejor opción que consideró fue alargar la vida de su padre, y prepararse para tomar su lugar, solo necesitaba algo de tiempo... tiempo que nunca obtuvo. El estado del rey no era esperanzador, en cualquier momento dejaría su vida terrenal, el joven escuchó esto de las criadas del castillo y corrió a la biblioteca en un último intento de hacer algo. Cuando inició su búsqueda, un libro había llamado su atención, muchas palabras estaban escritas en un idioma que desconocía, sin embargo en una sección traducida, describía una peculiar flor de tallo negro y pétalos blancos, según el libro, esta planta podía molerse y crear una milagrosa cura para cualquier mal. El joven jamás creyó tener que recurrir a algo tan absurdo, pero en ese momento solo le quedaba la esperanza, tomó el libro abandonando el castillo lo más rápido que pudo, se mezcló entre los pueblerinos y salió de los limites seguros. Su fe ciega lo llevó a lo profundo del bosque cercano, muchas historia fantasiosas se habían esparcido sobre ese lugar en el reino, muchas que nunca creyó, brujas, duendes, demonios, vampiros, una gran cantidad de criaturas que jamas se habían visto, pero mantenían a los niños alejados del peligro. En el interior de la arboleda frondosa era imperceptible el tiempo, la gran extensión de vegetación impedía el paso de luz, por suerte el chico poseía una pequeña lámpara con una vela encendida, objeto que tomó en ultima instancia, antes de abandonar el castillo. Su búsqueda parecía eterna pero una pequeña luz de esperanza iluminó su camino, en la raíz de un tronco enmohecido, se apreciaban esos pétalos blanquecinos que se describían en aquel libro, parecían brillar ante tal oscuridad, por fin había encontrado la solución a sus problemas. Contuvo su emoción y corrió hacia la flor, excavó con sumo cuidado para no lastimar las delicadas raíces, y la levantó en sus manos, el pequeño brote era hermoso. La luz que esta brindaba generaba una extraña calidez, calmaba el corazón del chico y le hacía sentir seguridad, la admiró unos segundos y se dispuso a regresar, pero al momento de dar un paso, su cuerpo se paralizó...

Vuelta al presente...

-Mortis: -despierta- ¡! -se sienta en la cama- *suspiro* Ese sueño de nuevo...

Brawl Stars: La Reencarnación del MalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora