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Mi cuerpo estaba acostado en mi cama, pero mi mente pensaba en Alec y su comportamiento

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Mi cuerpo estaba acostado en mi cama, pero mi mente pensaba en Alec y su comportamiento. Sinceramente no lo comprendía, últimamente peleaba demasiado con Jane y eso antes nunca pasaba. También se quedaba mirándome raro, cosa que trataba de ignorar.

El reloj marcaba una hora perfecta para salir a correr, pues ya era de noche y no debía preocuparme.

Me levante y agarré unos joggings negros y una corta remera roja. Me cambie rápidamente, no quería perder más tiempo.

Salí de mi habitación y Alec que me miró de arriba a abajo. Lo mire sin comprender esa mirada.

– ¿Vas a salir a correr?– me pregunto mirándome fijamente.

– Si.

– Me uno– sonrió– ¿No te molesta, verdad?

Pestañe dos veces para recomponerme, ya que yo siempre corría sola y nadie me acompañaba.

– No, para nada– respondí.

Alec sonrió emocionado. Yo en cambio fruncí el ceño, pues no le veía gran cosa ir a correr.

– Vamos– agarro mi mano.

Salimos del castillo, y Alec empezó a mirar atentamente nuestras manos unidas. Yo lo mire sin comprender, pero baje la vista a mi mano y comprendí que me había puesto demasiado glitter, quizás eso le molestaba.

Alec empezó a masajear mi mano, cosa que nunca había hecho, pues solíamos tomarnos de las manos pero sin caricias.

Alce mi vista, pero el no tenia la mirada en mí, sino en nuestras manos unidas, mientras las seguía acariciando.

No dije nada, por temor a convertir el momento tranquilo, a uno incómodo.

Llegamos a una playa y la luna que se encontraba en lo alto del cielo formando un paisaje precioso. La luz de la luna llena se reflejaba en el mar y el viento fuerte agitaba nuestros cabellos. Me reí de Alec pero él fue lo suficientemente sensato de no reírse del mío porque sino me hubiera enojado.

De repente sentí un agarre en mi cintura que me empujaba al mar. Estaba a punto de gritar a Alec que era un imbécil, pero preferí agarrarlo del brazo y tirarlo al agua conmigo.

Veronica VulturiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora