Capítulo 17. Prioridades Confusas [✅]

59 5 1
                                    

Narra Evan

—No tienes que seguir haciendo esto —se lo hago saber esperando no sonar grosero o algo así.

—Quiero hacerlo —esboza una pequeña sonrisa un poco antes de beber un poco más de leche tibia de su taza—. Es un buen ritual antes de dormir y me gusta pasar tiempo contigo —admite de una forma muy dulce.

—Ojalá él te haga muy feliz —mi buen deseo le sorprende un poco.

—Evan yo... —va a decir, pero le interrumpo llevando mi mano a la suya para darle un ligero apretón mirándole directamente a los ojos con un semblable sereno, luce tan hermoso en pijamas.

—No hay nada que decir —digo restándole importancia al asunto, retiro mi mano e incorporo mi trasero de mi lugar para acercarme al fregadero a lavar la taza que usé.

—Quizá no, pero si hay algo por hacer —dice imitando mi acción para hacerse a mi lado tomando la taza de mis manos para terminar de lavar lo que usamos dándome un pequeño empujón con sus caderas.

—No hay nada por hacer —le contradigo con un ápice de diversión.

—Si lo hay y si quiero que las cosas funcionen con Tyron debo cerrar este ciclo contigo —me quedo un poco extrañado por lo que acaba de decir.

—No comprendo —digo cuando él deja las tazas en el escurrir a un lado en el fregadero.

—Ven, te explicaré —me pide que lo siga antes de dirigir sus pasos hacia la puerta trasera que conduce hacia el patio trasero y al salir de casa él toma mi mano para llevarme hasta el granero donde los chicos guardan todas las herramientas e insumos para los caballos.

Queda un poco lejos, sin embargo, disfruté su compañía aunque esté haciendo un poco de frío aquí afuera y cuando entramos en este él suelta mi mano para seguir sus pasos sin importar que no pueda ver mucho por donde va.

. —¿Qué hacemos aquí? —se me ocurre preguntar cuando él enciende una pequeña lámpara cercana a nosotros.

—Vamos a resolver esta situación —responde a mi pregunta entonces voy por unos banquillos para que nos podamos sentar y ya que ando por estos lados tomo una botella de ron que los chicos esconden en una de las cajas de herramientas.

—¿Cómo exactamente? —pregunto con curiosidad regresando con los banquillos y la botella de ron.

—No lo sé pero el ron nos va ayudar con eso —se ríe dándome una mano con los banquillos para dejarlos en el suelo.

—Gracias —le agradezco tomando asiento para abrir la botella y darle un trago a su contenido, vaya esta bueno.

—Dame necesito un poco de valor líquido para decir lo que voy a decir —pide con un tono burlón entonces le hago entrega de la botella y él le da un gran trago.

—Brooklyn tómalo con calma —mi sugerencia le causa un poco de gracia.

—Yo nunca me he tomado nada con calma —dice con ironía dejando la botella en el suelo y luego da un suspiro de frustración—. Yo no soy bueno para ti Evan Carter —dictamina sin más.

—Es extraño, yo iba de decir exactamente lo mismo pero sobre mí —me burlo un poco, pero luego asumo un semblante más serio—. No necesito que un chico que podría ser mi hijo me haga sentir estas cosas —me explico lo mejor que puedo y él asiente debiendo un poco más de la botella para hacerme entrega de esta.

—Entonces... ¿Qué es lo que quieres? —su pregunta hace estragos en mi cabeza.

—No lo sé —respondo bebiendo un trago de la botella, el ron no me gusta mucho pero supongo que Brooklyn tiene razón en llamarle valor líquido—. Yo estuve solo en los momentos más difíciles de mí vida, así que discúlpame si actúo como si no necesitara de nada o de nadie —expongo un poco frustrado por ello.

Perdido en ti© [En Edición]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora