Chispa entre secretos

El bautizo

07:30 AM

Que mal he dormido por dios, la cabrita de mi hermana me dio la noche oye, como sabe meter el dedo en la llaga para dejarme pensando, justo anoche, que hoy tenemos fiesta, la madre que la trajo.

-    Buenos días cariño, ¿Qué haces despierta tan temprano? – "como le extrañaba"
-    Hola papá, ¿y tú?
-    Ya conoces a tu viejo, cada vez duermo menos, ¿quieres que vaya a comprar churros?
-    Papá tanto churro nos va a poner cara Torta, hago el desayuno ¿vale?, además tenemos mucho lío hoy.
-    Vale como tú digas mi hija, me gusta, se la ve buena persona. - "a la yugular"
-    Papá tú también no porfa, es solo compañera de trabajo.
-    Oh ¿y no puedo decir que es buena persona porque sea tu compañera entonces?, no mi niña, es tu amiga y eso es suficiente como para preocuparse de si es buena o no.
-    Gracias papa.
-    Lo demás no se busca, surge solo y si tú no quieres nada no tienen por qué pasar de ahí, me conformo con que tengas una buena persona a tu lado cuando estás lejos de nosotros.

Ay mi viejito lindo, siempre cuidandome, es un cielo y lo adoro, es por momentos como este que lo hago, sabe que decirme para quitarme la tontería de encima y espabilar.

Más importante aún ¡y que yo elimine el quebradero de cabeza también!, así que me acerco y lo abrazo con todo el cariño que es posible mientras le digo:

-    Te echaba de menos papá - "realmente lo hacía"
-    Y yo a ti mi niña, me haces mucha falta, trae yo hago el desayuno hoy, sólo puedo cuidarte poco tiempo antes de que te vayas.

Así sin más, nos ponemos a preparar todo antes de que venga el resto, entre confidencias y risas, si algún día decido probar suerte de nuevo con el amor, será el a quien avise primero.

08:00 AM

Ahí viene toda la familia del golpe, he tenido apenas media hora a solas con mi padre, pero eso es suficiente para reconfortarme, ya tenemos todo listo, incluso lo que toman los peques, así que no nos pillan de sorpresa.

-    Pero bueno que hacen ustedes en mi cocina – "estos son los buenos días de mi madre, ¡que mujer señor!"
-    Dirás nuestra cocina cariño, que aquí los privilegios se reparten a medias, hoy es mi turno de cuidarlos, que pocas veces puedo – "y con un beso le contesta mi padre."

Que tío, no debería ser así en el mundo actual, pero desgraciadamente tengo que decirte que personas como mi padre hay muy pocos, esa actitud de siempre querer estar ahí en el cuidado de la familia.

No se escaquea con las tareas de la casa, cada vez se va viendo más, pero en hombres de la edad de mi padre no, se trata de generaciones al fin y al cabo.

-    Buenos días, ¿tenéis alguna forma de organizaros para hoy? Lo digo para echar una mano – "y ahí llegó doña estirada."
-    Primero desayunar con calma mi niña, con el estómago vacío no se piensa bien, luego duchas, rapiditas niñas que somos muchos – "eso lo dice por mis hermanas y por mí, nos tiene caladas mi padre" – luego vestirse y de parranda.
-    Parranda es el bautizo entiendo, es como le llamáis aquí - "¡pobre Jessica!"

Y vuelven las risas a esta casa, cualquier cosa es motivo de fiesta estos días, ¡pobres! ahora es cuando viene la defensa a ultranza del léxico canario que hace mi madre, junto con Carlitos.

-    Eso eso, que significa "paranda" - "Mitch... ¡ay que mono cuando intenta evitar el acento inglés!"
-    Parranda, cariño, se dice parranda, y significa fiesta, el bautizo es una escusa para celebrar algo – "mi hermana Maria no para con las risas"
-    Mitch creo que tenemos que estudiar el lenguaje canario, si no éstos un día nos la cuelan con las palabras – "que graciosilla Jessica, riendo también."
-    Y el castellano of course- "Mitch remata también con sorna."
-    ¿Y tú que haces para estar siempre recién levantada como acabada de salir de una tabla de planchar Jessica? No hay quien compita contigo mi niña, nos dejas a las demás en evidencia.

Comenta mi hermana Elena Mientras Maria y Yasmina añaden al unísono un "¡eso!" Bien sonoro entre carcajadas, lo que provoca que el resto vayamos detras.

-    Ay mi niña siempre vas de punta en blanco ¡Jesus, que envidia! - "ay mama"

Ala de vuelta la tromba de risotadas, es que mi madre es lo más, que personaje, cotilla como ella sola y, a veces, demasiado directa, pero entrañable.

12:00 PM

El desayuno se pasó volando, nos dedicamos a seguir el juego y chinchar a los recién llegados con palabras canarias, luego a ducharnos rápido como dice mi madre,Fíjate que somos muchos para dos baños.

¡Y arreglar a los niños! pero finalmente estamos todos listos para salir, con lo necesario para los pequeños, junto a los regalos y demás tonterías de bautizo, ¡Que trabajo! Cuesta querer ser madre viendo todo esto, mejor me quedo de tía.

-    ¡Pero Jess que guapa estás!, se supone que la madre y la madrina deben deslumbrar y nos vas a dejar en evidencia mi niña. - "¡Que pilla Elena! como la ha soltado mirándome sin que se den cuenta."
-    Gracias, no es mi intención, vosotras estáis preciosas todas, Nieves la que más sin duda – "ya te vale Jess regalándoles los oídos"
-    Ay mi niña gracias pero aquí son mis hijas las que van a estar genial hoy, tanto Elena como Cris, que son las protagonistas.

Que perro viejo mi madre, con lo que le gusta que le doren la píldora ¿y suelta esto?, algo se trae entre manos.

-    Cierto, muy guapas las dos... - dice Jess mirándome ¡que calor!
-    ¡Ehhhh! que yo no me quedo atrás – añade María mienta vuelven las carcajadas.

¡Menos mal! Salvada por la campana, ya no sabía donde meterme, esa mirada... nerviosa sería poco decirte de como me ha puesto.

Llegamos a la iglesia justo a tiempo, y la ceremonia, aunque aburrida para mí, fue preciosa, Jess conoció al resto de invitados y, cuando le vi cara de agobio me la quise llevar a parte.

Pero ¿tu piensas que ella quiso?, muy dignamente mi niña, como diría mi madre, siguió presentándose a todos y riendo, en cuanto tuve un momento aproveché para ver cómo estaba.

-    ¿Muy agobiada? – "se ve en su cara, conmigo no disimula"
-    Que va son encantadores, muchos pero encantadores – "menos mal se relaja"
-    Si son demasiados a veces – continuo entre risas.
-    Me alegro de haber venido.
-    Y yo de que lo hicieras.

Ya en la fiesta, cuando estábamos en los postres, se acerca una amiga de Elena y se sienta con nosotros.

Ella muy llana, agarra a Jessica del brazo y le suelta "ay mi niña, cuéntame tu secreto, pareces salida de un desfile de modelos, que envidia" mientras yo, como si de un avestruz se trata quiero meter mi cabeza bajo tierra de la vergüenza.

Doña estirada muy resuelta le replica "de eso nada mi niña, aquí la modelo es la madre que mira que pedazo de bautizo ha organizado solita, hoy es su día, y del niño" ¡y se parte de risa!

Mis hermanas y nuestra madre rompen a reír también, y la otra se queda boquiabierta, a lo que Nievitas con su picardía remata "has visto Sara, que nuera tengo más salá", espera ¿qué? ¡Tierra trágame...!