- No tenéis escusa, sabéis de sobra que cuando estamos en algo es a tope, no con sensiblería, ¡aunque sea mi familia!
¡Joder! Los necesito concentrados no apiadándose de mi, esto tiene que salir bien, que digo, perfecto, ya habrá tiempo de lamentaciones, incluso pedir disculpas si tengo que hacerlo.
Este par de bárbaros no sabe lo que se les viene encima, pienso sacarles hasta la última palabra, así tenga que torturarlos.
De lo que nadie se da cuenta es que, aunque esté en modo Robot, como ellos dicen, si hay algo que me saca de ahí, Cristina, lo está pasando fatal con esto, para ser su primera salida no es la más fácil ni mucho menos.
Piensa que no va a salir nada bueno de esto, y la verdad es que yo tengo ese presentimiento desde la primera vez que me llamó Rich, siempre hubo algo que me decía "cuidado".
Aún no entiendo como los idiotas de Seattle se despistaron con la niña y permitieron que la raptaran, cuando zanje este tema, ellos serán los siguientes, no pienso quedarme conforme.
- Vais a contarle el cuentecito a vuestra abuela, los dejasteis desatendidos y ahora tengo que arreglar vuestro error, esto no se queda así, ahora dejadme solucionarlo en paz.
- No Hennings, aquí mandamos nosotros. - "menudo gilipollas el jefe de Seattle"
- ¿En serio quieres jugar esa carta? No te conviene, te lo advierto, tienes una orden.
- Hennings...
- ¡Basta! O lo hacéis por las buenas o por las malas Simmons, tu decides.
- Esta bien, tu mandas.Así me gusta, al final voy a pensar que, si soy borde es porque ellos lo propician, encima, lo que mas me fastidia es que Cristina va a ver algo en mi que le va a horrorizar.
Con esta gente no hay que tener contemplaciones, no pienso matarlos ni nada parecido, es mas, con la cara que se me suele poner debería bastar para infundirles el miedo suficiente y que hablen.
- Bien, os voy a explicar con todo lujo de detalles donde estáis y que va a suceder a continuación, ¿quien va primero?
- ¡No puedes tocarnos zorra!
- Esperaba que dijerais eso...No me han dado otra opción, se han llevado algún golpe que otro, pero se de sobra que ni la mitad que ellos propician, cuando ven de lo que soy capaz empiezan a hablar como críos.
Cuando oyeron de primera mano las posibilidades que tenían, el daño que les iba a hacer, verme detallar con lujo de detalles todo lo que iba a pasar entre golpe y golpe, se han hecho una idea de lo mal que estaban.
Soy muy convincente si me lo propongo, evidentemente no pretendía torturarles ni romperles deditos poco a poco, pero ganas no me faltan, eso seguro.
Cristina no ha puesto nada buena cara, cuando he salido de esa sala su expresión y como me miraba lo decían todo, si en algún momento hubo cercanía se disipó, de nada sirve que le expliquemos el teatro.
Esta noche va a ser muy movida sin duda, en este instante preferiría que ella no estuviese, preocuparme porque le suceda algo dejó de ser una opción en cuanto vimos a que nos enfrentamos.
Va cambiando de color en su cara a medida que comentamos el plan, no está nada convencida de que pueda lidiar con esto, yo tampoco.
Lo que menos necesito es tener que sacar un momento para insuflarle la confianza que requiere, es mas, estoy convencida de que la única forma es tratando de ser lo menos fría posible.
Eso implica que deje a un lado la concentración que me hace falta para que nadie salga herido hoy, tengo que tenerlo todo bien memorizado en mi cabeza, estar metida en el papel.
Cristina me complica la tarea mucho, está claro, lo que me falta averiguar es si lo hace ella o son los sentimientos que tengo, no se que nubla mas mi entendimiento en este momento.
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Chispa entre secretos
RomanceDos mujeres con mucho que procesar por delante. Una se enfrenta a un cambio laboral y la incertidumbre de verse atraída por alguien con quien no sabe qué sentir, no ayuda... La otra se enfrenta a sentimientos que hacía mucho no tenía, había bloquead...