Lovers

Capitulo 31

*Inicio Flashback 1 semana antes del cumpleaños de Riley*

El ruido de la ciudad y el frío colándose debajo de su abrigo eran lo único que la mantenía sujeta a su realidad, últimamente no importaba nada, nada que no fuera mantener a todo mundo bajo control, era como tratar de evitar que de un cielo gris y pesado brotara lluvia, justo así se sentía , como si fuera la única que trataba de evitar el drama, lamentablemente la situación comenzaba a sobrepasarla, como agua escapando de sus manos. Todo había comenzado a volverse un caos aquella mañana de Lunes donde se disponía como todas las mañanas a la escuela, pero con lo que no contaba es que en cuanto puso un pie dentro del apartamento Matthews , Josh ya estaba listo para escoltarla a ella y Riles a la escuela, comportándose como un verdadero caballero, para terminar deseándole un gran día con un beso en la frente y un guiño mientras la dejaba frente a las puertas de la escuela, donde un Lucas mortalmente serio la observaba con los ojos entornados pero sin decir una palabra, posteriormente el resto del día siguió y las cosas se volvieron a ir al carajo cuando a la hora del almuerzo , un repartidor de comida apareció con dos cajas de cartón pintadas en blanco donde se leía el logo de la comida china que tanto disfrutaba desde que era pequeña con su madre, información que al parecer Riley había compartido con su tío, pues en la nota solo había un dulce mensaje sobre que disfrutara de la comida y del resto del día, ¿cómo carajos iba a disfrutar de la estúpida comida cuando Lucas parecía listo para estrangular al primero que se cruzara por su camino?, afortunadamente el buen Zay le ayudo, y entre el y la misma Riley le dieron fin a la comida, mientras ella no pudo comer más de dos cucharadas de arroz chino sin sentir ganas de escupirlo, era una tortura, una muy dolorosa y larga cuando esos ojos verdes la miraban desde enfrente, con una aparente tranquilidad pero al mismo tiempo un fuego torrencial en la mirada que amenazaba con quemarla en carne viva.

Y a partir de ese punto todo se había arruinado, recibiendo flores de todos los colores y tamaños, regalos , caramelos, boletos para exposiciones de arte y por supuesto un sin fin de mensajes, conversaciones coquetas e incomodas, halagos que realmente no quería escuchar, roces accidentales y por supuesto invitaciones a citas que rechazaba cortésmente aun cuando Riley siempre parecía estar a punto de tomarla por los hombros y sacudirla para hacerla entrar en razón , por ello es que cada que podía se escabullía de su mejor amiga con cualquier excusa tonta, no quería ser cuestionada, ni tampoco regañada por su actitud, nadie lo entendería, todos la llamarían loca, pero es que ellos no sabían la verdad, no sabían que su corazón solo pertenecía a una sola persona, al único que podía llevarla al cielo con un simple beso y también al infierno con su indiferencia y justamente ese era el problema más grave de todo esto, pues desde que los intentos patéticos de Josh por conquistarla habían comenzado, su vaquero se había tornado silencioso y taciturno, casi como si su ira y sus celos lo estuvieran consumiendo todo el tiempo, a cada momento y sin descanso. No le hablaba, no le miraba, no le mensajeaba, mucho menos la veía después de la escuela y si podía tampoco compartía el mismo espacio que ella, si podía, salía disparado del lugar, alegando tarea pendiente o entrenamientos que realmente no existían, lo peor es que todas las veces que había intentado hablar con él, las cosas iban a parar al mismo lugar, con un Lucas silencioso que solo la miraba con furia, mandíbula apretada y puños cerrados, pero sin una sola señal de querer hablar, lo único que obtenía de el eran sesiones de besos furiosos, tal como aquel episodio afuera de la sala de cine, solo que esta vez todo se desarrollaba en cualquier pasillo desierto, salones vacíos o incluso detrás de las gradas , era sin aviso y sin una pizca de delicadeza, simplemente eran sus manos sobre su cintura mientras la arrastraba hacia otro lugar, pegándola a su cuerpo como si quisiera fundirse con ella, atrapando sus labios entre los suyos, mordiendo y saboreando hasta el último rincón con un hambre que la ponía a temblar de pies a cabeza.

Entonces el sabor de la sangre y un par de lágrimas traicioneras se mezclaban en sus bocas y solo así es como el rubio parecía reaccionar de su constante estado de furia y silencio, sabía que Lucas jamás la lastimaría y que probablemente él estaba tan asustado como ella, pero él no escuchar su voz ni saber sus pensamientos la estaban haciendo agonizar, pues cuando este se retiraba sin más y la dejaba de pie en medio de la nada, ella tenía que luchar para no caer de rodillas jadeante, como si sus pulmones y su corazón estuvieran a punto de sufrir un colapso, quería gritar y golpear, quería enloquecer y echarse a llorar, porque Maya Hart se había vuelto un manojo de nervios y lágrimas que se sentaba sola en el silencio de su habitación mientras lloraba desconsoladamente esperando a que Lucas o su madre aparecieran y se llevaran consigo todo el dolor y la rabia, pero eso no sucedía, simplemente daba la madrugada y ella terminaba durmiendo con las lágrimas acumulándose debajo de su barbilla mientras se sumergía en un estado de sueño leve del que no podía obtener descanso pero tampoco podía despertar fácilmente , sabía que debía hablarlo con alguien, pero eso no era una opción, odiaba pensar en alguien más juzgándola o echándole en cara sus malas decisiones y su madre definitivamente no era una opción, pues a pesar de que sabía que ella sería la única que no la juzgaría tan duramente, no quería arruinar su vida, no ahora que todo estaba yendo tan bien en el trabajo y con su noviazgo con Shawn , ella simplemente sería un mancha horrible en su historia y una parte orgullosa de ella se rehusaba a confesar la clase de persona que era, la clase de persona que había tomado el novio de su mejor amiga, que mentía a la cara de todos y sin pestañear, esa que se moría de amor por unos ojos verdes que se negaban a mirarla, cegados por su propia lucha interna y la ira.