Wooyoung decidió quedarse un par de días más allí, quería tratar de superar un poco todo lo que acaba de suceder. Si regresaba a casa, todo lo recordaría a él y lo impulsaría a seguirlo hasta la casa de Jongho
Enciende su celular para ver la hora, pero una imagen de San y él juntos sonriendo aparece en la pantalla, una lágrima cae sobre este.
Luego de dar una gran bocanada de aire frente al mar, que al final San no pudo conocer por culpa del aquel incidente, estuvo tan entusiasmado en salir de casa e ir juntos a un lugar diferente. Woo asumía toda la culpa por no ser cauteloso a la hora de salir con San a las citas. Lo había cambiando bastante que ni él mismo se percató de eso.
En otra perspectiva
-San, tráeme un café.- Jongho lo trataba como a un sirviente. No podía quejarse y mucho menos hablar si no se le permite.
-¿Desea un americano, un latte, un capuchino o un moka?.-
-¿Cómo es que sabes tanto de cafés?-
-Aprendí por...- se detuvo y pensó antes de hablar, Jongho lo había perdonado varias veces al decir el nombre de Woo, pero se enojaba bastante y no quería volver a meter la pata.- aprendí por Internet.- terminó por decir
-Estoy perdiendo la paciencia contigo. Sólo trae cualquier cosa y rápido.- Inclina su torso en reverencia y sale de su habitación. Por mas que haga su mejor esfuerzo en ocultar sus sentimientos por Woo al final siempre hace enojar a Jongho.
Sus padres no se encontraban en casa, ambos estaban es sus respectivos trabajos y no regresarían hasta tarde.
San vuelve con un latte, es su favorito y el primero que aprendió a hacer gracias a Woo. Se acerca a su señor pero tropieza con la alfombra y cae sobre él, cubriendo su camiseta con café.
-¡Pero que rayos! ¡fíjate por dónde caminas! Ahora estoy todo pegajoso.- igual que San, pero Jongho se llevó la peor parte.
-Lo siento mucho... traeré algo para limpiarlo.-
-No te vayas...- logró tomar su muñeca y retenerlo.- no me dejes por favor.- estaba actuando extraño, su humor cambió en menos de un minuto. Esa expresión en su rostro la había visto antes cuando regresaban de aquel viaje en su auto. Sus facciones estaban relajadas, pero podía ver a través de sus ojos que no estaba para nada bien. ¿hablaba en serio cuando dijo que nunca ha recibido carban de nadie en toda su vida?.
-No me iré, no tengo a donde ir.-
-Claro que tienes, Woo te recibiría con lo brazos abiertos, pero yo te necesito mas que él. ¿entiendes eso? Es como si viviera solo en esta casa.-
-Woo también vive solo y sus padres ya no están.-
-¿Qué te he dicho sobre nombrarlo?-
-Usted lo hizo primero.-
-¡No me contestes!- San logra zafarse de su agarre pero Jonhgo alcanza y jala su brazo atrayéndolo hacia él, enrolla sus brazos en su delgado cuerpo en un abrazo.- te he dicho que no te vayas.- sus cambios de humor lo volvían loco.
-Sueltame.-
-No lo haré, sabes que no lo haré, ahora eres mío San.-
-Mi cuerpo te pertenece, pero mi corazón siempre sera de Wooyoung.- aquello fue la gota que rebalsó el vaso.
-Entonces haré lo que yo quiera con este cuerpo.- lo llevó a la fuerza al cuarto de baño, metiéndose en la ducha. Jongho abrió la canilla de agua caliente mojando a ambos. Sus ropas estabas completamente empapadas, podía ver a través de la playera de San su torso, eso excitó al mas alto.
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ᴍʏ ꜱᴛʀᴀɴɢᴇ ʙᴏʏ - ᴡᴏᴏꜱᴀɴ
RomanceWooyoung es un estudiante universitario, frío y distante, con un pasado desgarrador. Comienza a convivir bajo el mismo techo con un extraño ser llamado San. Dice ser de otro planeta, pero Wooyoung no le cree, de igual forma lo deja vivir en su prop...