Capítulo 47

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Pasan dos horas desde esa llamada y escucho el timbre. Dylan insistió que no podía decirme por teléfono, que era necesario que habláramos en persona.

Voy a abrir la puerta y me encuentro con aquel chico de cabello negro. May tenía razón, la palabra guapo se le quedaba corta, traía la ropa mojada, no había notado que estaba lloviendo afuera.

—Vaya Dylan. Estás empapado. Déjame traerte algo para que te seques. ¿Quieres un café?
—Sí, gracias ______.

Camino a mi cuarto a buscar las toallas me volví a tener esos pensamientos qué estaban fuera de mi realidad.
¿Acabo de ofrecerle  un café al protagonista de "Maze Runner"? Sí. Mi vida ya jamás volvería a ser la misma luego de mi estancia en Londres.

Volví al living y le entregué unas toallas a Dylan y puse su chaqueta en la estufa para que se secara. Fui a la cocina y preparé dos cafés, al volver Dylan ya se había puesto cómodo.

—Bueno dime, ¿Qué es tan importante como para no poder hablar por teléfono?
—Es sobre Thomas.
—Dylan, perdóname de verdad. Pero no quiero hablar de Thomas.
—Por favor _____. Es importante.

Miré a Dylan con cara de pocos amigos, pero sabía que de todas maneras no iba a conseguir nada. Dudo que existiera una chica que pudiera decirle que No a Dylan O'brien.

—De acuerdo, ¿Qué sucede?
—¿Viste su declaración en televisión?
—Sí, sí la vi. ¿Qué pasa con eso?
—Bueno, luego del día del restaurant. Fue a mi casa y me contó sobre su conversación. Estaba destrozado y sé que en cierta parte lo merece, pero me duele verlo así.

No interrumpí a Dylan mientras hablaba porque temía que al hablar se escuchara un sollozo.

—Me dijo que le habías dicho que no lo amabas y en realidad, yo no te creo. Y no porque Thomas sea uno de los hombres más guapo, atentos, sexys y buenos  de este mundo. Sino porque yo los vi juntos. Y ustedes se adoran.
—Dylan... sé que Thomas es tu amigo, pero este no es tu asunto.
—Lo sé, lo sé. Pero quiero que sepas que luego de eso renunció a la serie y por eso hizo la declaración pública.
—¡¿Qué?! ¿Y por qué demonios renunció?
—Dijo que ya no podía seguir trabajando para ese director, ya ni siquiera podía verlo a la cara luego de lo que te hizo.
—Pero... ya no tenía sentido, las cosas ya estaban hechas. ¿De qué sirve que haya dejado su empleo ahora, ahora que ya no hay nada que hacer?
—¿y realmente ya no hay nada que hacer _____? No sientes nada por Thomas.

Dylan me miraba tan fijamente que me ponía nerviosa, sentía que podía leer mis pensamientos.

—No te mentiré Dylan, yo aún siento cosas por Thomas. Pero, es mejor así. Se lo dije a Thomas y te lo digo a ti también, no pertenecemos al mismo mundo. Siempre habrán problemas como el que tuvimos, además pasado mañana debo regresar a Chile y también regrese con Sam...
—¿Sam? ¿Quién demonios es Sam?
—Bueno, era mi ex...
—¿El qué te engañó?
—Bueno, no me engañó realmente.
—¿Y eso lo hace mejor que Thomas? Por Dios, nadie es mejor que Thomas.
—Dylan, comienzo a creer que el qué está enamorado de Thomas eres tú.
—Pues claro que lo estoy, pero él te ama a ti así que no tengo oportunidades.
—Eres un tonto Dyl.
—Bueno, no no es cierto. Pero Thomas es bueno para ti, él se equivocó y tuvo muchas consecuencias, pero vamos. ¿Nunca te has equivocado?

Claro que me había equivocado, mil veces.

—Sí Dylan, claro que me he equivocado. Pero por favor, no continúes. Fue muy difícil para mi alejarme de Thomas, pero créeme que es mejor así. Debo irme, no pertenezco aquí, fue hermoso todo esto, Thomas me hizo sentir un millón de cosas. Me enamoré de él. Pero ya se terminó.

Dylan me regalo una sonrisa de compasión y pareció entenderme.

—Bueno, tenía que intentarlo. Gracias por el café ______.

Acompañé a Dylan hasta la puerta.

—Fue un placer conocerte _____. Eres genial. Espero que tengas un buen viaje.
—Gracias Dylan, tu también eres increíble.
—¿A qué hora es tu vuelo?
— las 11:00.
—Bueno, ve a descansar. Mañana será un día agitado considerando que al parecer no has empacado nada.

Sonreí, Dylan tenía razón.
Salió por la puerta y me quedé pensando en todo lo que había dicho.

Al otro lado de la puerta Dylan sacaba su teléfono y cerraba la aplicación de grabación de voz.

Había grabado toda nuestra conversación.

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El día siguiente apenas lo había notado. Me levanté muy temprano para terminar de empacar todo, dejando fuera solo lo que usaría el día del viaje. Había ido a retirar mi último cheque al restaurant y a despedirme de mi jefe que había sido muy bueno conmigo. En la tarde había ido a cenar con Sol y Mark, ya que sería el último día que estaríamos juntos. Sol había decidido quedarse con Mark dos meses más.

—Vaya, eso si que es una sorpresa.
—Sí, al principio no estaba convencida, pero Mark es muy persuasivo. Además Luego será muy difícil vernos, considerando que Mark debe volver a Estados Unidos y yo a casa.
—Oh cierto, lo había olvidado. Bueno, cuando hay amor las relaciones a distancia funcionan de maravilla.

Sol y Mark me miraron con cara de poker. La verdad mi frase había sido bastante inconsecuente considerando mi situación.

—Ni siquiera me molestaré en decirte algo ______. Solo que eres una tonta.
—Sol, es diferente...
—Sí si, él es de Marte y tú de Venus, blah, blah.
—Y que tengo un novio, además.
—Un novio que te engañó si mal no recuerdo
—Sol, ya te expliqué.
—Como quieras, hay algo ahí que no me cuadra.

Me levanté de la mesa antes de comenzar una discusión con Sol.
—Okey, me iré a descansar. Mañana tengo un largo viaje.

Sol se levantó comprendiendo que me había molestado y me abrazó.
—_______, te quiero... espero que podamos vernos cuando estemos en el mismo continente otra vez.

Le correspondí el abrazo y se me formó un nudo en la garganta. En ese momento asimilé que se había acabado mi aventura.

—También te quiero Sol. Y tenlo por seguro, quiero ir a tu casa en la playa.
—Oh, eso dalo por hecho.
—No se olviden de mi.—Mark nos rodeó a ambas con sus brazos.

Esa noche sería una de las que recordaría con una sonrisa en el rostro.

Al día siguiente,  salí temprano al aeropuerto. Estaba sentada esperando que nos llamaran a hacer la fila cuando recordé el día que había llegado a Londres, miré a unos pocos metros y vi el lugar dónde me había encontrado con Thomas por primera vez.

Escuché la llamada de mi vuelo y caminé al avión. Escuché un alboroto a mis espaldas, debían ser unas chicas acosando a algún famoso. Definitivamente no extrañaría esos escándalos.
Antes de subir al avión miré una vez más hacia atrás.

"Adiós Londres"

Lo que yo no sabía era que a unos cuántos metros Thomas luchaba para evadir a las fans mientras discutía con seguridad para que lo dejaran llegar al avión.





Chicas, me atrasé al subir el capítulo porque tuve muchas cosas que hacer hoy. Espero que lo disfruten y siento que se sientan tan cortos. Pero en mi defensa si fueran más largos no podría subir todos los días, un beso para todas💕

"Ni en mis mejores sueños" (Thomas-Brodie Sangster)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora