capitulo 6

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—¡Oh por Dios! —Me coloqué de pie inmediatamente, estaba avergonzaba hasta los tobillos—. Lo siento mucho.

—Solo ve por la comida —me respondió con algo de humor y tratando  de relajarse.

Bajé las gradas con el mayor cuidado del mundo para no pisar o volver a caer sentada encima de nadie de nuevo, eso fue vergonzoso, mucho, si su mano no hubiera estado dentro de su bolsillo hubiera sentido más de lo que ya sintió y ese gemido, no fue precisamente de dolor, el solo recordarlo mis mejillas se colocaban calientes. 

Mientras hacía la fila en la cafetería me esforzaba por ignorar lo que acababa de pasar, cuando su mano apretó mi cintura me provocó una electricidad en todo el cuerpo y eso fue extraño ya que eso solo me había pasado con Aaron, aunque nunca con esa fuerza, sacudí mi cabeza cuando llegó mi turno de pedir y al final solo compré un hog dog y una soda grande para no tener que llevar dos vasos.

El partido de soccer transcurrió tranquilo, me arrepentí de haber llevado un solo popote para la gaseosa ya que tenía que beber inmediatamente Alexander dejaba de hacerlo, pero decidí no mostrarme incómoda con eso, actué casual y cuando el equipo local anotó un gol me vi obligada a pegarme aún más al cuerpo de Alexander ya que todo el mundo se colocó de pie y empezó a brincar.

—¿No te estas divirtiendo? —me preguntó al oído mientras los estudiantes celebraban el gol.

—Si, a decir verdad si —respondí con una sonrisa al ver como hacían una mímica como si estuvieran jugando bolos—, aunque nunca brincaría de esa forma —le señalé a una chica rubia que se negaba a sentarse  cuando su amiga intentó jalarla.

—Ella es Kristen, es el cliché de las películas juveniles.

—¿Y cómo es eso? —pregunté tratando de alejarme un poco de su cuerpo.

—La chica popular y rubia de la escuela que es la novia del capital del equipo —sacudió su cabeza—. Es lo típico.

—¿Y qué? ¿No hay una nerd que se entrometa de repente con el chico?

—No, es un nerd que se entromete con la chica —me susurró al oído nuevamente.

—¿Es en serio?

Él encogió los hombros.

—¡Que buena historia! —le dije con una sonrisa.

Cuando el partido terminó y todos evacuaron las gradas Alexander se quedó junto con el entrenador y los muchachos para hablar sobre el partido que acababan de ganar, yo por mi parte me dirigí hasta la biblioteca para rescatar mi bolso, cuando lo saqué de la gaveta no me había fijado en que la cremallera estaba abierta y todo su contenido cayó al suelo, rodé los ojos con agotamiento y me arrodillé sobre el suelo para recoger las cosas, una sombra se paró frente a mí obligándome a levantar la vista para encontrarme con Alexander, quien lentamente se agachó y su rostro quedó tan cerca del mío que me coloré inmediatamente, bajó su mirada y yo seguí su vista pensando que me estaba mirando los pechos, su mano viajó por debajo de mi cuerpo hasta que alcanzó el libro que se encontraba justo al lado de mi pie y lo agarró.

—Lo necesito —me informó con una sonrisa antes de alejarse de mí y salir de la biblioteca.

Yo me arrojé al suelo tratando de recuperar el aliento que estaba conteniendo ¿Por qué se acercó de esa forma a mí? Mi corazón empezó a palpitar como un loco y la necesidad que había desaparecido mientras estaba en el partido apareció de golpe chocando contra mi sexo provocándome una palpitación y mucho calor, terminé de recoger mis cosas de prisa y abandoné ese lugar.

mientras caminaba de regreso a casa trataba de controlar mi cabeza ¿Acaso él pensó que la caída fue apropósito? Porque era obvio que no lo fue, incluso me dolía un poco el abdomen por el manotazo que me dio el muchacho, cuando llegué a casa respiré profundo y me vi obligada a tomar una ducha fría para calmar mi necesidad.

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