CINCO

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La semana estaba llegando a su fin y a pesar de que Iris hizo todo su esfuerzo en prestar atención en sus asignaturas no lo logró.
Sus dos amigas habían intentado de todo para llamar su atención pero era imposible, su mente seguía en el suceso anterior incluso podía asegurar que el ambiente estaba tenso era eso o su paranoia que seguía creciendo.

Agradecía eternamente que estuviera en su última clase aunque también maldecía porque era francés y presentía que tampoco podría tomar notas o rendir al cien, lo confirmó cuando observó a los dos hermosos adolescentes frente a su banco habitual.

-Bonjour, Iris - había pronunciado la rubia con un perfecto francés, mientras le ofrecía una tierna sonrisa, su compañero por el contrario solo asintió con la cabeza para sentarse sin ganas junto a ella-.

-Hola- saludó desganada con una sonrisa que no llegó a sus ojos-.

-¿Sucede algo? - preguntó mientras tomaba asiento junto a su hermano, ignorando las miradas de los hormonales adolescentes-.

-No he dormido bien, eso es todo - sacó su cuaderno de la mochila mientras la profesora ingresaba al aula-.

Garabateaba sin sentido sobre una hoja en blanco que debía tener apuntes ajena a la situación externa, en su mente repetía una y otra vez las palabras de su amiga y aunque al comienzo pensó que era algo tonto seguir teniendo miedo no supo explicar porque seguía dándole tantas vueltas. Imaginaba distintos escenarios con distintos finales trágicos para ella, se estremeció al darse cuenta que todos terminaban igual: con ella muerta. Su paranoia volvió a dispararse, ¿y si llevaban observandola de hacia rato? Volvió a estremerserse y saltó en su lugar al sentir una mano helada sobre ella.

-¿Te parece bien? - preguntó la chica Hale de forma amable-.

-¿Disculpa? - se sintió avergonzada al ser tan obvia de que no había prestado nada de atención-.

-Pregunté si te parece bien hacer el ensayo en tu casa, nuestro hogar está casi siempre con demasiado ruido - ladeó la cabeza-.

-Desde luego- no quiso preguntar de qué era el ensayo, se vería aún más torpe-.

Sintió una leve vibración en el bolsillo de su campera de jean, por lo que sacó de forma disimulada su celular y sonrió levemente al ver el mensaje de Tyler invitándola a beber un café. Se removió sobre su lugar al sentir la mirada de su compañero y frunció su ceño ante el bufido del chico. No quiso ser descortés e insultarlo por lo que mordió su lengua para no gritarle "cotilla".

Milagrosamente el timbre que indicaba el fin de la jornada había sonado, fijo su vista en la pizarra dónde se leía legiblemente "ensayo libre elección", al menos sabía medianamente qué hacer. Se giró levemente para poder concordar con su equipo pero ya no había nadie allí.

Una vez más mordió su lengua para evitar insultar o maldecir, Emmett Cullen estaba cayendole demasiado mal.

Tomó su mochila de mala gana y tras levantarse dio cinco pasos para poder salir del aula sin embargo frenó en seco al notar que no llevaba su cuaderno con ella.

-Mierda - soltó en seco-.




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Dos media coletas se apreciaban en el reflejo junto a un vestido de tiras cortos floreado, sobre éste llevaba un fino abrigo blanco. El brillo labial era el único maquillaje que adornaba su rostro y sobre su largo cuello reposaba su característico collar de perlas.
Sonrió alegre ante la tierna imagen que veía para luego tomar una pequeña cartera negra y guardar dinero, llaves y su perfume.

ADORE YOU ~ EMMETT CULLENDonde viven las historias. Descúbrelo ahora