Diecinueve

6.6K 565 66
                                        

   Si había algo que Iris no tolerará era sin duda alguna la clase de gimnasia a primer hora, ¿qué clase de psicópata había distribuido los horarios?

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Si había algo que Iris no tolerará era sin duda alguna la clase de gimnasia a primer hora, ¿qué clase de psicópata había distribuido los horarios?

No le digustaba hacer actividad física, le digustaba el hecho de que eran las ocho de la mañana en pleno invierno por lo que la temperatura del gimnasio era inhumana al igual que los uniformes de verano. Sin embargo, allí estaba, intentando tener buena actitud en el absurdo partido de voley, junto a su equipo estaba Atenea la cual se encontraba posicionada delante de ella tratando de darle con la pelota a Jessica Stanley y tras ella, Isabella Swan.

El primer encuentro que mantuvo con la chica no fue el mejor puesto que todo había pasado demasiado rápido y desde allí supo que la pálida muchacha traería problemas.

Aquella mañana, mientras ingresaba al colegio junto a Emmett y Atenea, oyó los rumores sobre la hija del jefe. Y aunque al comienzo el nombre que le habían dado le sonaba a la mafia, había descubierto que se trataba de una muchacha sin nada de gracia proviniente de Arizona. Se quejó en voz alta junto a las maldiciones de Atenea al leer su nuevo horario, su último horario de toda su secundaria, y era una completa mierda.
Emmett reía a su lado al ver la expresión quejosa de la muchacha, y en cuestión de segundos Edward estaba junto a ellos adivinando que había sucedido.

-Esto es todo - soltó el horario la morena- me largo, odio los lunes-.

-Creí que eran las mañanas - respondió divertido el cobrizo mientras se agachaba a recojer el itinerario-.

-Uhm, también - se cruzó de brazos para chasquear la lengua- creo que iré a la enfermería y fingiré que tengo cólicos-.

-No lo harás, Atenea - Edward la tomó de la muñeca mientras insistía en que debía cursar la materia-.

El pelinegro llevó una mano a la cadera de su novia mientras caminaban por los pasillos, aún contándole con diversión como había visto tres osos los cuales habian sido su cena. Ella lo escuchaba atenta y lo miraba de reojo sonriendo ante las expresiones del chico. Cada día lo amaba más, si es que era posible.

Cuando se adentraron al gimnasio ya había gente allí, como Jessica Stanley y Mike Newton, pero lo que le llamó la atención fue la mirada que una pequeña castaña le daba a Edward Cullen para luego cambiar drásticamente su gesto y posarla en su morena amiga.

Supo de ante mano que serían problemas puesto que la muchacha se cruzó de brazos al lado del cobrizo y mantuvo la vista en ella con el rostro serio y una ceja levantada. "La posición de retame" le había susurrado el pelinegro para reír junto a ella, depositando un beso en su coronilla y salir empujandose junto a su hermano.

Se encaminaron juntas a los vestidores, dónde manoteo uno de los pantalones largos (golpeandose con Atenea) y una remera mangas cortas color gris, por el contrario de la morena que llevaba un pantalón corto azul con dos cintas blancas y una remera gris mangas cortas.

ADORE YOU ~ EMMETT CULLENDonde viven las historias. Descúbrelo ahora