Conozco tu futuro (Loki)

Decisión tomada: ¡Adiós Asgard!

Rosy se veía muy segura de su decisión, nada podía hacerla cambiar de opinión. Sin embargo, Loki estaba muy alterado.

-¡No! ¡Tú también estás loca!

-Escúchame -lo tranquilizó posando sus manos en las mejillas de él-, no seré una asgardiana fuerte como Sif, ni tampoco la humana más fuerte de la Tierra, pero tengo la motivación más grande del universo: tú. ¿No ves lo que me has hecho lograr? Antes de ti yo era una persona sin magia, fuerza, ni convicción, que me dejaba pisotear por cualquiera. Tú haces que logre maravillas, y esta vez no será diferente.

Loki estaba fascinado por la actitud de la chica, definitivamente era el ser más grandioso del universo y se sentía afortunado de que ella se fijara en él y lo amara tanto como él a ella. No obstante, seguía preocupado por el destino que le esperaba si no se preparaba lo suficiente para vencer a la bestia.

-Tú eres la que cambió mi vida -aseguró colocando su mano derecha sobre la izquierda de ella y ladeando la cabeza-. Tendremos que trabajar muy duro.

-Así es -sonrió-. No dormiré si es necesario.

-No creo que…-se interrumpió señalando las cicatrices que tenía Rosy en la muñeca izquierda-. ¿Qué es eso?

-No es nada, heridas de batalla -mintió retirando el brazo-. Ahora debemos ir con Odín para revelarle nuestra decisión.

-No esperemos más -la alentó a ponerse de pie, pasando por alto la mentira de la joven.

-Le diremos que regresaremos antes de un año…

-¿"Regresaremos"? -repitió caminando hacia el castillo junto con la midgardiana-, ¿a dónde crees que iremos?

-Bueno, pues yo pensaba en que podríamos ir a la Tierra para visitar a mis padres… -declaró en voz baja.

«Ya que tal vez sea la última vez que los vea» pensó. No podía decirle eso a Loki ya que cambiaría de opinión y no la dejaría enfrentarse a la prueba. Sin embargo era lo que en realidad pensaba, no quería morir sin haber visto antes a sus padres y sabía que las probabilidades de sobrevivir eran muy pocas.

-De acuerdo -accedió viendo la tristeza en la chica; recordaba que ella se había separado de ellos antes de conocerse y supuso que no los había vuelto a ver-. Iremos a Midgard y ahí también entrenaremos.

-Me parece perfecto, gracias Loki -le regaló una sonrisa sincera, llena de amor.

Él no contestó, simplemente se agachó a su altura y le dio un beso, tan tierno que nadie hubiera creído que ese era el dios del engaño. Siguieron caminando hacia la sala del trono cuando se encontraron con Frigga y Lady Sif.

-Oh, hola -saludó la midgardiana-. Lamento que tuvieron que presenciar esa discusión, no quería armar un alboroto.

-No tienes por qué disculparte -la tranquilizó la reina.

-Así es, la que debería ofrecer una disculpa es esa mortal, Foster -soltó Sif-. No sé cómo Thor pudo fijarse en alguien como ella.

-Bueno, creo que ha de tener su lado bueno ¿no? -bromeó la joven, pero al sentir el ambiente tenso decidió cambiar de tema-. Reina Frigga, Loki quiere disculparse con usted.

-¿Yo?

-Sí, tú. Por haberle dicho que no es tu madre y por los demás errores que has cometido -susurró para que sólo él la pudiera oír.

-Sólo lo dijiste para cambiar el tema, por el comentario tan malo que hiciste.

-Da igual, tú discúlpate. Recuerda también que nos vamos a ir por un tiempo, tu madre lo tiene que saber.