Be Mine ll Tony López y tú

5

Cuando salí de la oficina para ir a casa pasé a ver como estaba ________. Es inexplicable que es lo que siento.

—¿Aún no te vas? Ya pasó tu hora — me recargué en la puerta

—Lo sé pero aún tengo trabajo.

___________:

Él se acercaba y mi corazón se agitaba. Cerró la puerta y yo tragué saliva.

—¿Qué me haz hecho ______? — estaba tan cerca que bien podía sentir su respiración con la mía

—¿Hacer de qué con usted? —Él me sacó de la silla y me cargó al escritorio. Me sentó ahí y yo comencé a exitarme.

—No puedo alejarme de ti —Pasó su mano por mis labios —No puedo resistirme más tampoco.

El comenzó a besarme y era algo que ya necesitaba, por dentro estaba tan feliz y a la vez no podía creer que esto estuviera pasando. Su lengua jugaba con la mía. Y mordió mi labio. Gemi bajo.

Que bien besaba.

Él se separó y se alejó silenciosamente.

—Señor López... —Yo necesitaba más

—Olvida esto, fue un error.... — salió a pasos largos de la oficina y me quedé ahí sentada tratando de entender que era lo que pasaba ¿se había ido? ¿En serio?

Después de que terminé lo que estaba haciendo fui a casa.
Me di un baño y recibí una llamada de mi abuela.

—Abuela, hola ¿que pasa?

—Llegaré mañana mi amor, ya tengo todo listo —di un saltito

—¿Quieres que vaya a recogerte?

—Sí, por favor.

—Bien, te veré mañana saliendo de el trabajo.

—Hasta luego —Se despidió.

Cociné la cena y me senté a comerla. Una notificación de mi banco llamó mi atención.
Tony me había adelantado mi sueldo.

—Mm... Supongo que es bueno—lo deje cargando y me fui a dormir.

TONY :

A la mañana siguiente tenía un millón de llamadas de Lily al igual que mensajes.
Los ignoré y me puse mi traje para ir a la oficina.

Cuando termine de hacer todo Scott me llevó a la empresa.

______ entraba apenas y yo corrí para alcanzarla.

—Dime que tenemos hoy—ella giró

—Buenos días, tenemos una junta rápida, nada de que preocuparse. Todo está listo. Iré a dejar esto a su oficina más tarde—señaló carpetas

—Claro.

Ambos entramos y cada quien tomó su rumbo

¿Y si la vuelvo a besar?

No pareciera que no le haya gustado.

Al ponerme de pie para ir a su oficina Lily entró a la mia

—¿Sabes que existo verdad? —Entró gritando

—Puedes ser un poco más silenciosa. Hay personas trabajando—me acerqué

—Te dejé tantas llamadas que hasta creo que he agotado el plan en mi celular —yo reí

—Entonces no lo hubieras hecho, sabes que cuando no contesto estoy ocupado.

—Lo sé pero...