Capitulo 12

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Viernes en la mañana

Después de que León se fuera a trabajar, Jill se arregló y tomo sus cosas, entre eso estaba Dana.

Le había prometido hace varios días a Rebecca, que le ayudaría a tirará algunas cosas en su casa, la castaña solía tener palabra y sabiendo que está sería un buena oportunidad para que su hija conozca a la doctora Chambers, mejor.

Al salir de casa, se dirigió a su auto, subió a Dana y la aseguró firmemente ella hizo lo mismo.
Para su sorpresa al meter la llave, su coche no podía encender, el tablero (Digital) encendía, no así el motor que no arrancaba.
Asomó su cabeza a la ventana, pensando que algo bloqueaba o impedía que se moviera.

—Pero porque no arrancas—Grito exasperadá, y salió afuera.

Puso sus manos en su cintura, observando detalladamente el auto, debía hallar la razón por la cuál no arranca

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Puso sus manos en su cintura, observando detalladamente el auto, debía hallar la razón por la cuál no arranca.

No tardó mucho, para percatarse que había aceite o algo así regado justo debajo del auto. Se agachó inmediatamente para ver mejor.

Maldijo al notar que el tanque tenía más de 3 agujeros, los cuales hicieron que saliera todo combustible, empapando el suelo.

Subió su mano a su sien, estaba que la sangre le hervía, no podía creer que esto le halla sucedido, desde el principio entendiendo que era intencional.

Suspiró pensando quién podría haber hecho está maldad, pasó por su mente, el leve recuerdo que León le sucedió algo similar, pero en su caso pincharon sus neumáticos.

“Quien diablos está haciendo ésto"Pensó, abriendo la puerta y sacando a la pequeña.

Colocó su vista más al fondo del garaje.
Solo había otro forma de ir, sin su auto o el de León, y ese era el tercer Choche... Dicho por el rubio, Auto familiar.

No era su Nissan que tanto tiempo había pasado junto a ella, pero debía llegar a dónde Rebecca

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No era su Nissan que tanto tiempo había pasado junto a ella, pero debía llegar a dónde Rebecca.

Subió nuevamente a Dana atrás, la aseguro bien, seguidamente verificó que esté no tuviera algo similar.

La historia de Leon y Jill 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora