𝕭𝖆𝖉 {Jack Conway}

•38•

Pasaron unos pocos días, Conway y __ se la pasaban 24hs juntos prácticamente; el se encargaba de llevarla a comisaría y hasta algunas veces la llevo a robos o a patrullar pero sin necesidad de que ella cumpla un rol de policía, simplemente acompañaba atenta sintiendo aquellas cosas familiares; a veces ella dormía en el departamento de el y a veces el en el de ella, eran muy pocas las veces en las que no pasaban juntos; la joven seguía perdida y muchas veces se encontraba sumergida en sus adentros tratando de pensar si lo había vivido o soñado. Ambos se apoyaban mutuamente y como podían, más cuando un uno de éstos días el superintendente se encontraba devastado por llevar a la federal a Gustabo y Horacio, sentía muy adentro aquella herida de traición.

-No puedo entender porque lo hicieron ¡Son unos jodidos gilipollas!- por alguna razón el no Temia a mostrar sus emociones ante la joven que lo contenía en el departamento- ¡Les di todo!... Los trate como si fuesen mis hijos y así me pagan... Cria cuervos y te comerán los ojos ¿Así decía el dicho, no?

El mayor se encontraba sentado en el sillón con una botella de whisky en la mano y a su lado __ atenta sin creer que aquellos habían aporreado a un hombre en plena comisaría.

-No se que hacer con ellos, tendría que haber sido más rudo, tendría que haberlos adoctrinado mejor... Estoy harto de estas mierdas.

-Si nos ponemos a pensar de manera fría- ella suspiro resignada- Era obvio que esto pasaría, ellos se criaron en la calle, solos, simplemente con la compañía del otro y confiando nada más que en su hermandad... Estaban acostumbrados a tomar lo que necesitaban y a no seguir órdenes, a manejar a la gente a su antojo para poder sobrevivir en las calles.

-Eso no ayuda- dio un trago largo a la bebida

-Lo que digo- ella se sentó sobre el regazo del mayor para captar más su atención colocándose cara a cara- Es que tu no tienes la culpa, simplemente son así y ya, se habrán sentido amenazados o presionados... Pero no tiene porque terminar así, aquí y de esa manera.

-¡Le dispararon a Emilio en las piernas! ¡Se pasaron las putas reglas por la raya del culo! ¡Aporrearon a un civil en plena comisaría con gente y cámaras! ¡¿Que quieres que haga?!

-Quiero que pienses en frio, como siempre haces- ella le sonrió a manera de Consuelo- Eres inteligente, mientras ellos están en la federal tienes tiempo de pensar en que hacer y ellos tienen tiempo de pensar en cómo seguir... Se que les aprecias, verás como todo se vuelve más claro cuando logres bajar tanta calentura y alejar esos pensamientos inútiles de tu cabeza, tu confía

El suspiro cansado, resignado de tanta mierda; ella con delicadeza atrajo la cabeza del mayor hacia su pecho y colocó sus brazos al rededor a modo de abrazo, acaricio levemente su cabello amodo tranquilizador; el correspondió colocando sus brazos al rededor de ella.

-¿Quieres que te deje solo unos horas?- soltó ella- Se que estas preocupado por mi y por eso te la pasas conmigo atrás, pero quizás en estos momentos quieras estar solo, prometo que obedecere tus condiciones.

Luego de meditarlo unos segundos el accedió con la condición de que este acompañada.

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Mientras el superintendente se tomaba sus minutos para meditar y pensar, __ se encontraba en la plaza central disfrutando un poco del sol de la tarde.

-Extraño que seas policía- su acompañante Greco la observaba

-Yo extraño recordar quién verga era, pero son detalles de la vida- ella río con ironía- Pero prometí ser amable así que dime ¿Porque extrañas que sea policía?

-Justamente por eso- el rio- Por tus comentarios y tu buena energía, dime ¿Haz recordado algo más?

-No mucho, no son cosas en especial... A veces no se si son iluciones mías o son recuerdos, pero ahí están

-Y... ¿Como es tu convivencia con Conway?

-Supongo que la normal ¿No? El es buena gente y tal, a veces se le pira pero es su esencia, un tío de pocas palabras pero elocuente a la vez- ella sonrió de manera inconsciente- Me agrada el viejo...

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Al otro día __ despertó sudando frío, se encontraba atemorizada, miró a su lado y ahí estaba Conway ella suspiro aliviada.

-Solo... Solo fue una pesadilla

Ella se levantó y notó que eran las 4 a.m. pero no podía volver a conciliar el sueño; se dirigió a la cocina tomando una taza de café, se dirigió a su balcón y comenzó a observar el cielo recordando su pesadilla donde mataban a Conway luego de hartas torturas.

-¿Estas bien?- la voz grave del hombre la asustó un poco

-¿Te desperté?- el nego con la cabeza y ella observo como en su mano el llevaba una pistola- ¿Que haces con eso?

-Pensé que quizás alguien había entrado a la casa- el suspiro y guardo la pistola- ¿Que haces levantada?

-Tuve una pesadilla...- ella volvió a mirar el cielo- Por ser superintendente algunas personas te quieren muerto ¿Verdad? - el simplemente no contestó- Tomare tu silencio como un si...

Ella suspiro, se dio la vuelta y lo miro.

-¿Porque me preguntas eso?

-Soñe que unos sujetos te torturaban y luego mataban... Pero se que es un simple sueño, tu sigues vivo.

De alguna manera aquellas tres simples palabras le dolieron "Tu sigues vivo" y es que el no sabía como decirle que el estaba muerto en vida, que ya no podía más con tantas mierdas y que el era el culpable de que ella estuviese en aquel estado además de la muerte de sus agentes. Ella colocó su cabeza en el pecho de el cansada, resignada de todo.

-Deja de clavarme el visto en vida- se burló ella para luego mirarle a los ojos- Si te vas a quedar siempre sin contestar prefiero ni hablar.

-Tu me dejas siempre sin palabras

-Que galante señor, no está mal para ser un simple viejo cascarrabias

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