10. No quise mentir (Lemon)

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Marinette

Es viernes y estoy agotada, nunca pensé que el trabajo sería tan pesado. Alan es un perfeccionista que le gusta que todo salga a la primera, eso me agrada, soy igual.

He estado trabajando con él directamente, aunque el primer día parecía que me iba a encargar solo de los cafés, al instante de que él llego las cosas cambiaron.

Corrí de un lado a otro, acomodando las luces, checando las cámaras y verificando que la escenografía estuviera perfecta. Al terminar la sesión nos despedimos de las modelos, unas gemelas muy agradables, y corrí al área de vestuario, al parecer también debo apoyar en los ajustes a los vestuarios.

En la mañana tuvimos sesión con Félix, los comentarios de las chicas de vestuario, maquillaje y peinados hacia él no eran agradables.

Al parecer se queja por todo y les grita, Alan es el único que puede controlarlo.

Estamos iniciando con las fotografías para las vacaciones, Félix modeló trajes de baño, junto a una de las gemelas, ella no se veía cómoda, eso me preocupaba ya que las fotografías podrían revelar su incomodidad. Se lo comento a Alan, que coincide conmigo, le molesta que tal vez tenga que repetir la sesión. Modifico las luces para tratar de ocultar el malestar de la modelo, Alan cambia un poco las poses y al final logramos sacar una sesión estupenda.

La gente empieza a salir, los modelos entran a los camerinos y yo, me quedo acomodando todo para el lunes, afortunadamente este fin de semana podré descansar, si es que no surge algún imprevisto.

-Hola Marinette-, me dice Felix a mi espalda.

No nos habíamos saludado ya que con todo lo que hacía no tenía tiempo de socializar.

-Que bien que estés aquí, por cierto luces muy linda-, me dice coqueto. Yo no veo en mí nada que sea extraordinario, llevo pantalón de vestir azul marino, blusa blanca y botines. Mi cabello esta sujetado en un chongo y mi maquillaje es natural.

-Gracias-, le digo un tanto apenada.

-Oye, ¿te gustaría salir a tomar algo conmigo?-, me pregunta.

Me sorprende que me esté invitando a salir, cuando es el novio de Chloe, -gracias Felix, pero debo ir a casa, tengo muchas cosas que preparar para mañana- le miento.

-Mmmm, que te parece entonces que mañana te lleve a comer?-, insiste en invitarme.

Antes de que pueda responder la puerta se abre y Chloe entra. Camina directo a Felix, lo abraza y le da un beso demasiado sonoro. Por supuesto me ignora completamente, lo cual, en lugar de molestarme, me alivia, me permite salir del lugar sin responder a la invitación de Felix.

Mi teléfono suena, es Adrien, nerviosa, contesto la llamada.

-Hola Gatito-, le digo, este apodo se lo dí desde la época en la que éramos compañeros de batallas.

-Hola princesa, ¿quieres que pase por ti?-, me pregunta.

Mi corazón late como loco por la emoción que esto me causa, ¿que si quiero que pase por mi?, por supuesto que sí.

-Adrien, voy saliendo de la oficina, ¿te parece que nos veamos enfrente del museo de Louvre?, es un punto intermedio y llegaremos casi al mismo tiempo-, le digo de la manera mas tranquila que puedo.

Creo que estoy controlando de maravilla mis nervios, no he tartamudeado, ni tampoco he dicho palabras inentendibles.

-Esta bien Bogaboo, ahí te veo en 30 minutos, adios-, se despide.

Solo porque voy en la calle caminando no he pegado un grito de emoción, llamo de inmediato a Alya para cancelar los planes que teníamos, le prometo que iremos a bailar otro día. Ella trata de sacarme información acerca del motivo de mi cancelación.

Reencuentro (+18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora