Reencuentro (+18)

30. Equipo

Marinette

Abro los ojos con cuidado, trato de incorporarme, pero me mareo, desisto de mi intento por levantarme y solo muevo mi cabeza de un lado a otro, alcanzo a ver a Adrien parado junto a mí, me mira preocupado.

—Adrien, ¿Qué paso?— le pregunto aún sin levantarme, puedo notar que estoy acostada en la cama, ¿Cómo llegué aquí?

—Eso quisiera saber Marinette, Plaga y yo estábamos en la cocina, escuchamos un fuerte golpe y te encontré en el piso. ¿Qué sucedió?—

Llevo mi mano a la cabeza, trato de recordar, entre a la habitación para cambiarme, y cuando me acerqué al tocador, la vi.

—Adrien, ayúdame...— le digo mientras lo tomo de la mano, quiero que me sirva de apoyo para levantarme de la cama.

Me siento en la orilla, y Adrien se sienta al lado mío, lo abrazo mientras dirijo la mirada hacia el tocador, y ahí está, esa pequeña caja que hacía tanto tiempo que no veía.

Me levanto de la cama con precaución, —Adrien, entré a cambiarme y me encontré con esto...— le digo al tiempo que tomo la pequeña cajita del tocador.

—¡Oh, entiendo!— dice Adrien mirándome.

—Solo fue la impresión de verla otra vez, Adrien, ¿tú crees que…?—  no termino de hablar cuando él me quita la cajita de las manos.

—Marinette, ya te lo dije, si no estás preparada no debes hacerlo— me abraza y es así como logro tranquilizarme un poco. Solo un poco, porque tener la pequeña caja con esos aretes me pone ansiosa, ¿y si el maestro me está presionando?, ¿y si es necesario que vuelva?, ¿y si hago algo que ponga en peligro a Adrien?, tantas y tantas preguntas que se agolpan en mi mente.

—Marinette, nadie te está presionando, Adrien tiene razón, esto es algo que tú debes hacer porque quieres, porque te sientes preparada...— la vocecita de Plaga me saca de mi ensoñación.

—Pero debes entender que si el Maestro dejó los aretes aquí es porque está seguro que es el momento adecuado, él no se arriesgaría a dejar a Tikki con cualquier persona—

—Si, lo entiendo...— respondo mientras me acerco a tomar la pequeña caja, sin pensarlo mucho la abro, un destello rojo y mi pequeña amiga aparece.

—Hola— saluda Tikki mirándonos a Adrien, a Plaga y a mí.

Le sonrío y respondo a su saludo, —hola Tikki... ¿Cómo has estado...?—

—¡Bien Marinette, descansando y esperando tu regreso!—me dice con una sonrisa.

—¡Tikki te he extrañado mucho!— dice Plaga emocionado, volando hasta la pequeña kwami para abrazarla. Ella lo recibe feliz, al parecer también lo ha extrañado.

Aprovecho el abrazo de nuestros pequeños amigos para colocarme los aretes, Adrien me observa en silencio, sorprendido de mi acción.

—Adrien, voy a intentarlo, contigo a mi lado las cosas saldrán bien, somos un equipo—

Me sonríe y me abraza, —así es Marinette, somos un equipo, estaré junto a ti para apoyarte en todo—

—¿Qué te parece si salimos hoy por la noche?— le pregunto a Adrien.

—De acuerdo princesa, aunque ahorita creo que tendremos que encontrar a Plaga y Tikki porque se han ido— me dice Adrien señalando el lugar donde debían estar los pequeños kwamis.

Caminamos hacia la cocina, es seguro que ahí estarán. —Te lo dije princesa, este gato solo piensa en comida— Adrien mira a Plaga con reproche.