Chapter XXXII: Rei Todoroki

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Pov Dabi

Tal como había sospechado, Shoto se encontraba en el testamento y de hecho lo que ninguno esperaba es que el fuera el mayor beneficiario y además de eso el dinero no podía ser transferido hasta que el fuera mayor de edad, lo que era más grato ya que Shoto siendo mayor de edad podía estar conmigo sin ningún problema y aquella herencia se quedaría con él, las cosas no podían estar más que perfectas exceptuando el hecho de que Shoto estaba actuando muy raro, llegaba tarde de la escuela y algunas veces salía desde temprano los fines de semana, no le quería dar importancia a eso ya que quería confiar en el pero ya me estaba cansando de la situación y más por el hecho de que ya eran un par de semanas de esta forma.

¿Sería capaz de engañarme? Nadie me vería la cara de estúpido así que, si ese era el caso el imbécil que estuviera con Shoto terminaría tres metros bajo tierra y Shoto, terminaría amarrado en mi cama o en el sótano, aunque lo prefería en la cama si ese era el caso.

Hoy como todos los fines de semana se levantó de la cama siendo aún algo temprano, creí que con el hecho de agotarlo físicamente dejaría de asistir, no le había dejado dormir más que unas horas y quizás me había pasado con él por el hecho de ver aquellas mordidas y marcas en su cuerpo, no sé si me había excedido, pero no le había lastimado así que un problema no era, solo que aquel chico me volvía loco y prácticamente quería devorarlo cuando lo tenía entre mis brazos, desde la punta de sus pies hasta su cabeza, todo de él me enloquecía y si él no se quejaba no le veía un final a nuestros encuentros frecuentes.

Fingí estar dormido hasta que él se vistió y se marchó, lucia cansado, pero aun así se fue ¿Tan importante era aquella persona que visitaba? Lo mataría de verdad. Salí de la cama, me vestí y me cepille los dientes, no me importo peinarme, solo tenía que darme prisa en seguir a Shoto, lo alcance unas calles después, subiendo a un taxi en donde yo también tome uno, creo que necesitaba un automóvil, lo solucionaría después.

-Siga a ese taxi- creo que todos tienen la fantasía de decir eso alguna vez, no creí que me pasaría siguiendo a un niño y quien es mi pareja actual.

El taxi se estaciono y el mío hizo lo mismo, pague el taxi importándome poco si le había dado mucho o poco dinero y salí del auto siguiendo a Shoto quien compro unas flores y siguió caminando, para comprar flores era obvio que era para una mujer, no pensé que mi siguiente victima sería una mujer, pero daba igual, nadie tocaba lo que era mío.

Llegamos a su destino y me sorprendí un poco el hecho de que era un hospital, solo me adentré y le seguí, mi mente solo estaba ocupada pensando en que el me engañaba, pero cuando leí "Rei Todoroki" en la puerta de la habitación donde había entrado Shoto todas mis dudas se disiparon, había exagerado la situación. La puerta se abrió dejándome ver a Shoto quien me miro con sorpresa para después sonreír.

-No puedo pedir una mejor situación- me tomo de la mano y me hizo entrar a la habitación en donde sentada en la cama viéndonos directamente a los dos se encontraba mi madre la cual sonrió al verme.

-Touya- me llamo, se iba a levantar de la cama, pero me acerque a ella antes de que lo hiciera.

-Lamento no haber venido antes y también el hecho de venir de esta forma- dije haciendo referencia a mi cabello el cual estaba hecho un desastre.

-Los dejare solos- dijo Shoto quien salió de la habitación.

-Touya... ¿Qué fue lo que sucedió ese día? – pregunto en cuanto tome asiento a su lado.

- Si te soy sincero no lo sé, lo último que recuerdo es estar rodeado de aquellas llamas y despertar en el hospital con un gran dolor, no quería que me vieras de esta forma y sigo pensando igual- mi madre se acercó a mí y me abrazo, oculte mi rostro en su cuello, extrañaba esa calidez que me transmitía, muy diferente a lo que sentía con Shoto así que realmente con esto podía diferenciar del cariño que le tenía a Shoto y lo que sentía por mi familia.

Sus manos comenzaron a acariciar mi cabello peinándolo con suavidad.

-Te tintaste el cabello- asentí.

-Lamento venir con una apariencia desagradable-

-No lo eres, eres mi hijo y el hecho de que estés aquí es lo que me hace ser feliz-

-Siempre quise verte, pero fui un cobarde y llegué a pensar que tú también me habías dado por muerto al igual que Enji- ella negó apartándome un poco.

- Perderte fue el dolor más grande que pude experimentar, fue lo que me hizo perder la cordura para al final lastimar a Shoto-

-No te odia, él sabe todo lo que paso para que terminaras así-

-Lo sé, pero yo aún no me puedo perdonar lo que le hice-

-El piensa que tú le odias, se parecen mucho en eso-

-El collar que trae Shoto...-

- Encontré a la persona que quiero proteger-

-No esperaba que se lo dieras a tu hermano- supongo que decirle lo que teníamos no era correcto, no ahora, ya habría tiempo para aclararlo, aunque aún si ella se negaba a aceptarlo y rechazarnos como sus hijos, realmente no importaba mi familia ni la sociedad, había vivido por años sin necesitar de ellos, sería igual mientras tuviera a la persona que amaba a mi lado. Eso era lo único que necesitaba, aunque no negaría que ver a mi madre, me había hecho más feliz de lo que esperaba.

-Quiero protegerle como en el pasado no lo hice-

-Sé que lo harás- en ese momento la puerta de la habitación se abrió dejando entrar a Shoto quien traía unos jugos para los tres.

Quizás cuando nuestra madre supiera lo nuestro nos rechazaría al igual que lo hizo nuestro padre y hermanos, así como la sociedad lo hace con las personas que han roto un tabú, pero los momentos que pasábamos juntos como familia no podrían arrebatarlos. Justo como este momento.

Quizás y solo quizás nuestra madre nos aceptaría.

Quizás y solo quizás Shoto y yo podríamos ser felices viviendo con Rei. Pero todo eso queda en un quizás y lo único que puedo asegurar es que aun con todo eso en nuestra contra. Amaría y protegería a Shoto hasta el final de mis días. 

OBSESSION [Finalizada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora