ÁNGEL O DEMONIO

Capítulo16

     

     La policía estaba alerta, las placas del vehículo que conducía a Albert hacia una zona industrial hacia las afueras de la ciudad, había ingresado hacia una zona de grandes locales que se usaban como almacenes de diferentes empresas y comercios grandes.

     La amiga de Silvio había sido de gran ayuda haciendo filtrar la noticia a los medios, de forma que hasta un vehículo de uno de los canales principales se encontraba cerca de la zona,  incluso un noticiero del canal N había conseguido filmar en vivo la persecución del auto en el que llevaban a Albert a través de un helicóptero. Los hombres de seguridad de Albert habían podido alcanzar a los captores, gracias a que la policía había podido adelantarse y obstruir el paso del mismo guiados por las imágenes que el canal N difundía en vivo la persecución.

     Se habían producido los primeros disparos, todos tenían la orden de darle a las llantas del vehículo, para evitar herir a Albert, lo primero que tenían que hacer es impedir el avance de ese auto a toda costa. Los primeros tres disparos habían sólo rosado las llantas, el piloto era muy hábil, y sabía moverse zigzagueando sin perder velocidad, ya había chocado varios postes a su paso y algunas barandas y señales en su huída, pero no se detenían. 

     De pronto; de una de las ventanillas de la derecha salió el cañón de un AK47 y empezó a disparar sin conmiseración. Las balas salían sin cesar, el primer auto en el que iban los de la seguridad de Albert fue el impactado, pero por tener vidrios protegidos y ser blindado pudo mantenerse en persecusión, a diferencia de los dos policiales que irremediablemente se estrellaron al perder el control del volante.

     Clemente manejaba muy bien, tenía a su lado al francotirador que lo acompañaba y al ver que el auto no cedía sacó su M4A1, mientras que el hombre de la ventanilla detrás de él sacaba su AUG. logrando detener al auto.

     El vehículo de los captores se detuvo pero no cesaron en disparar, sólo el francotirador se mantenía firme en su lugar, firme y estático esperando la más mínima posibilidad de un disparo certero.

     La puerta del auto de los captores se abrió abruptamente y de él salió una mujer de minúsculas prendas con un AK47 apuntando, hacia Clemente, el francotirador disparó una bala certera directo a la cabeza de la mujer y esta cayó irremediablemente al suelo.

     La puerta contraria se abrió y de esta un sujeto de traje oscuro y mirada borrosa portando un SG553 apuntaba hacia el interior del vehículo pretendiendo acabar con la vida de Albert, el francotirador no perdió tiempo y con un disparo limpio le dio directo entre ambos ojos y se deshizo del hombre.

     Una voráginede imágenes agridulces se solapaba en su mente: Albert salió disparado hacia el suelo, se envolvió como un armadillo, y rodó hacia la parte posterior y permaneció inmóvil.

     El fuego cruzado empezó.

     Una segunda mujer abrió la puerta del copiloto con un brazo y cabeza bañada en una estela de sangre con un arma, logrando herir el hombro de Clemente. Enseguida el francotirador disparó y la mató en el acto.

     Un segundo hombre disparaba desde el interior del auto en diferentes direcciones al verse acorralado, dando tiempo para que el piloto saliera corriendo, por su izquierda sin rumbo fijo.

     Algunos policías iniciaron la persecución del hombre hasta que lograron cogerlo, pero en el momento que iba a ser esposado presionó un detonador y voló en pedazos junto al oficial que lo arrestaba.

     Albert en medio del tiroteo se animó a gatear por el piso y acercarse al vehículo en el que se encontraba agazapado Silvio, hasta que Clemente lo divisó e hizo señas al francotirador y a la escolta de Silvio para que cubrierán a Albert a subir al auto.