Un Tropiezo Con El Amor. (Joel Pimentel Y Tu) - CNCO.

Queria decirle.

Si sabía lo que quería y la quería a ella, es solo que me quede completamente paralizado frente a ella, no sabía que decirle y de tanto que pasaba por mi mente nada pudo salir de mis labios.

Quería decir que no importaba cuanto tiempo haya pasado, quería decirle que la amo como nunca y como el primer día que tomo cavida en mi memoria, queria decirle que quería ser parte de su vida y que no había justificación para lo que había hecho, quería decirle que a pesar de todo y a pesar de todos, quería decir le que intente olvidarla pero incluso la idea de olvidarla parece más imposible que la idea de tenerla.

— Dime que es un chiste... — Dice Johann sostenido el puente de su nariz después de que le contara lo que pasó.

Niego, — ¿Crees que es una broma?

— No puedes ser idiota ¿O si? — Alsa la ceja.

— No quieres saber lo idiota que puedo llegar a ser.

— ¿Le has llamado al menos?

— 134 veces, ya no tengo data...

Suspira viendo su reloj, — Una de las peores bromas que te puede jugar la vida es conocer a la persona indicada en el momento equivocado.

Volteo los ojo, — Necesitas dormir.

El asiente, — Y tu también pero no dejaré que no hagas nada, soy tu mejor amigo si no te caes, te empujo y si caes mal yo caigo contigo para levantarnos juntos. — Sonríe.

— No hay más nada que hacer, así que ve a dormir.

Niega, — Siempre hay algo más que hacer.

Suspiro, — Es que no se que más hacer... no sé si intentarlo una vez más o rendirme.

Se pone de pie, — Si lo intentas no tienes nada que perder pero si mucho que ganar ahora son las 3:32 am ¿A que horas sale su vuelo? — Lo observo y niego, — ¡¿No preguntaste?!

— No... — Siento un manotazo en mi cabeza. — Esta bien, lo merezco.

— ¡¿Es que no es importante para ti?! — se pone cunclillas frente a mi.

— No lo sé.

— ¿No lo sabes? — rie, — Mirate al espejo y luego me dices si lo sabes o no... ¿No vale la pena?

Cierro los ojos haciéndome un masaje el cabeza y en seguida su sonrisa se refleja en mi mente causando la mía, — Vale toda la maldita pena.

— Entonces... tu escríbele a _____ y llámala todo lo que puedas yo buscaré los vuelos programado para hoy.

— De acuerdo...

Tome mi teléfono y marque de nuevo todas las veces que puede pero en ninguna contesto así que decidí escribirle...

"Hola...

No debería decir esto por mensaje pero se que no contestaras mis llamadas, quiero estar contigo siempre ¿me entiendes? Bueno... no pretendo que lo entiendas, quiero que lo sientas y es que somos tan diferentes en tantos aspectos pero tan iguales al mismo tiempo que se me es difícil imaginarme un día sin ti y tan fácil a la vez, nunca he sabido lo que quiero porque nunca tuve algo a lo que pudiera llamar mío pero ahora se que te tengo a ti y no puedo perderte, quiero que seas mía siempre así que por favor dime que no me odias tanto y que sigues siendo mía."

《Enviar》

— Malas noticias. — Escucho s Johann decir.

Suspiro, — Solo dilas...